Boquerizu - Asturias

Un señor entra en bar...

–Tres cafés, por favor.

–¿Tres?

–Sí, uno para mí, otro para ti y otro para tu puñetera madre.

El dueño se calla, pero al día siguiente el señor vuelve y pide lo mismo, así que le da una paliza. Pese a todo, regresa.

–Quiero dos cafés.

–¿Sólo dos?

–Sí, uno para mí y otro para tu puñetera madre, que a ti, mamón, te pone muy nervioso.
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La esposa inquiere a su marido sobre la cena de trabajo celebrada la noche anterior con sus empleados.

–¿Todo salió bien? Vi que ibas un poco preocupado.

-Más o menos, los temas tratados fueron interesantes y la cena fue ovípara.

–Cariño, no seas garrulo y habla con propiedad, se dice opípara.

–Mi definición es correcta, porque me costó un huevo.
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BUEN DÍA A TODOS