Benínar - Almeria

¡Desdichada fué la hora,
desdichado fue aquel día
en que nací y heredé
la tan grande señoría
pues lo había de perder
todo junto y en un dia!
¡Oh, muerte! ¿por qué no vienes
y llevas esta alma mia
de este cuerpo mezquino,
pues se te agradeceria?

Cuenta de un sabio que un dia
tan pobre y mísero estaba,
que sólo se sustentaba
de unas hierbas que cogía.
¿Habrá otro entre sí, decía
más pobre y triste que yo?.
Y cuando el rostro volvió
halló la respuesta,viendo
que iba otro sabio cogiendo
las hojas que él arrojó.

La poesia muy bonita pero no me gustan las q hablan de muerte, esa cuanto mas lejos y mas tarde mejor.Jazmin

Paseába el rey moro
por la ciudad de granada,
desde la puerta de Elvira
hasta la de Vivarrambla.
cartas le fueron venidas
cómo Alhama era ganada.
¡Ay de mi alhama!
continuara.............

Las cartas echó en el fuego,
y al mensajero matara
echó mano a sus cabellos
y la de sus barbas estiraba
apeóse de la mula
y en un caballo cabalga;
por el zacatin arriba
subido iba a la Alhambra;
Mandó tocar sus trompetas,
sus trompones de plata,
por que lo oyesen los moros
que andaban por el arada (tierra labrada)
¿ Ay de mi Alhama!
Continuará.

Cuatro a cuatro, cinco a cinco,
juntando se ha gran campaña.
Allí habló un viejo alfaquí
de barba bellida y cana;
¿Para qué nos llamas, rey,
a que fué vuestra llamada?
Para que sepais amigos,
la gran perdida de Alhama.
¡ Ay de mi Alhama!
continuará.

Bien se te emplea, buen rey,
buen rey bien se te empleara
matastes los a una familia noble
que eran la flor de Granada;
cogistes los tornadizos
de Cordoba la nombrda.
Por eso mereces, rey
una pena muy doblada,
que te pierdas tu y el reino
y que se acabe Granada.
¡Ay de mi Alhama!
Fin.