Redován - Alicante

Conversaciones entre el vasallo Bartolo y el Sr. Gobernador.

-Si me permite, Sr. Gobernador, ¿Por qué en el 2013 recaudó un millón de euros subiendo el IBI si sólo tenía que pagar unos 260.000 euros por la deuda que dejó aquella que no quiero nombrar en su presencia?, ¿No habría sido mejor rebajar gastos corrientes, como personal, evitar errores –como la gestión del agua - los excesivos gastos en fiestas, excesivas ayudas al deporte, excesivas ayudas a las asociaciones, el pago a asesores palmeros, el pago a contabilidades externas, etc. Etc. Etc…. ¡ ah! perdone que se me olvidaba Sr. Gobernador! ¿Por qué ha adelantado pagos a los bancos si estaba calculado pagarles en 10 años?

-¡Ay, ay, ay! No vais a aprender nunca. ¡El personal está más contento si primero se le suben los impuestos y luego, como un favor, se le devuelve parte de lo subido! Además, cacho zoquete, los bancos son nuestros amigos y hay que tenerles contentos, por eso le hemos adelantado 500.000 euros.

-¡Tiene razón! Pero me estoy acordando de que mis otros amigos muy pobres no tienen trabajo ni pueden pagar impuestos tan altos, ni pueden comer, casi

-Lo tenemos todo pensado, a esos les llamamos aparte y, como favor por ser quienes son, les hacemos unas rebajas especiales y tan contentos. ¡Es que no te enteras! Insiste el Sr. Gobernador ¡Para qué crees que son esos 40.000 euros que hemos apartado sino para devolvérselos a los pobres! Además, aprende cacho buro, de esa forma nos lo agradecerán en Mayo.

-¡Que bien lo explicas todo, Sr. Gobernador!

-Sr. Gobernador ¡Que bueno es usted conociendo a la gente! ¡Por eso tiene tan contento a los vecinos, porque les ofrece fiesta hasta hartar!

-Ya se lo dije en la conversación que tuvimos ayer!

-¡Cómo ha sabido rectificar al comprobar que se le echaban encima por quitarles eso de los Autos Locos!

-¡Es que tengo unas ayudantes, vasallo Bartolo, que no son más tonto aunque estudien para ello! ¡ Mira que quitarles una fiesta al personal!

-¡Menos mal que su excelencia está al frente de todo!

- ¡Eso es verdad!

Conversaciones entre los pinos y el chema

ASÍ ES REDOVÁN¡¡ Y VIVA LA VIRGEN DE LA SALUD Y SAN MIGUEL.

Pa qué se va a perder el tiempo en EDUCACION,en CONOCER LA VERDAD,EN PEDIR CUENTAS, ETC, si luego vienen los mas listos te dan una palmadita en la espalda y te piden su voto y hasta si no eres muy listo te cogen el carnet y por media docena de huevos, das tu voto?.

A vivir que son dos dias¡¡

Enredo por mas que analizo tus comentarios,no se por donde sacarle punta.

Que revesao que eres me caguen en la Mar.

Esta mañana, como empieza a ser costumbre, se vieron el Sr. Gobernador y Bartolo. Al verlo, Bartolo le ofrece pleitesía al tiempo que le pregunta al Sr. Gobernador cómo va su cortijo.

–Buenos días, Sr. Gobernador, ¡Estará contento!

–¿Por qué?

–¡No se haga el tonto y perdone mi atrevimiento! El miércoles estaba Redován lleno de policías y grandes personalidades de su partido

–¿Eso? Hasta mayo los verás muchas veces. A mi partido le gusta mucho la Vega Baja y en cuanto pueden se vienen para acá.

–Eso está bien, Sr.Gobernado, porque servirá para acallar a los envidiosos que hablan que su partido solo se acuerda de la Vega Baja en elecciones.

–La envidia les correo, amigo Bartolo!

–Sr. Gobernador, a los que debería empapelar es a eso de Jodemos por decir que cerró usted su palacio para venirse a recibir a los suyos.

–En cuanto pueda, eso haré. Mira que atreverse a decir eso.

–Sr. Gobernador, reconozca que algo de verdad sí tienen ya que todos los concejales que tienen jornada estaban acompañando a la Señora Consejera.

–Cacho burro, si viene la autoridad hay que acompañarla

–¿Hasta la asesora personal de usted, Sr. Gobernador?

–¡Hasta ella, porque lo digo yo que soy el que mando.

–Sólo una cosa más Sr. Gobernador ¿Quien paga la comidas de los de su partido y de los concejales?

–Eso a ti no te importa, cacho burro

–¡Como usted diga, Sr. Gobernador, que es el que manda.

Solo una aclaracion, fueron tods a comer al bervedere, que alli el ayuntamiento de Redovan nunca ha pagado.

El ayuntamiento anterior nunca ha pagado en verbedere, al sufrido y apaleado pueblo de Redovan, siempre se ha tenido que comer las facturas,de lo que ellos se comian.

Otro ejemplo de los progresistas comilones, es la comida que tuvimos que pagar a los sindicalistas, y demas palmeros del rojerio local.

pichiiin en el barlobento se come bien

Amigo Visitadoras me han chivao que en el D Manuel pagaron a tanti cuanti.

Malaostia , no digas a tanti cuanti que no saben lo que significa esa palabra

Amigo malostia, que usted le diga a Visitadoras, que pagaron a tanti cuanti, eso es perder el tiempo, a el, se la suda, no le interesa,su objetivo es sembrar la duda, siempre tratando de perjudicar al PP.

Y luego por estas cosas se me enfada, pues lo siento, que se enfade.

Un saludo.

Se dieron de ostias por ser el primero en pagar.Como la barra municipal.

Efectivamente, a tanti cuanti, aver si tomais nota, y se os pega algo cosa que dudo.

A tanti cuanti repartía Barcenas los sobres a tanti cuanti repartía Cotino a su sobrino a tanti cuanti unta bigotes a los amiguitos del alma

Si esa gente no lleva dinero encima, como van a pagar a tanti cuanti rolleros. a engañar al nacho.

Lo que mas me fastidia de este atajo de fuleros, es que a demás, nos tomen por tontos.


Lo bien que saben quedar delante de todos los invitados pagando con el dinerico de tos los riovaneros.

Y el de manuel, poniendose las botas¡¡

Enrredos, eres un bastardo embustero, aque no tienes lo que hay que tener, y denuncias por mala administracion del dinero publico.

Anda tontorron, presenta la denuncia.

Denuncialo tú que tienes el gabinete en casa, no te j.de

Repito, lleve cuidadito al soltar la lengua.No se complique la vida,no vale la pena.

Una noche contigo contigo una noche locaaa
Fiesta fiesta

Hola grama, la vida me ha enseñado que las palabras, para que hagan daño, depende mucho de la persona que las diga.Como comprenderas, viniendo de tí, pues, como que ni fu, ni fa, es decir, que ni las siento susurar en mis oidos.

Por el contrário, lo que sí estas consiguiendo es RETRATARTE y demostrarnos bién al personaje que tenemos delante.

Por el contrario, lo que sí tendrias que hacer, es confesar mas a menudo tus mentiras e insultos hacia el prógimo.

Que tengas un buen día gramaor¡¡

Desde el mísero banco en el que se encontraba el siervo Bartolo, se dirige a su Gobernador para decirle,

—Sr. y admirado Gobernador, se cuenta esta semana que va a dar libros gratis a los niños pobres del reino, pero que casi nadie se ha enterado de su generosa acción. Cosa que no entiendo y me atrevo a preguntárselo ¿Por qué no ha salido el pregonero del Reino a decirlo de calle en calle para que todos se hubieran enterado de su gran generosidad?

—¡Tu sencillez de pensamiento te hace feliz! Te lo voy a explicar brevemente y sin palabras rebuscadas para que tus torpes entendederas lo entiendan. Escucha: Si lo hubieran publicado mis particulares voceros, todos los vecinos se habrían enterado y, hasta tu sabes, que algunos de ellos no me lo habrían agradecido porque me tienen tirria. Por eso sólo lo he colgado en el tablero real que casi nadie visita y mis sirvientes más cercanos se lo están comunicando sólo a los pobres que me quieren y que me lo agradecerán voceando mi nombre en plazas y calles y, sobre todo, en Mayo.

—¡Que listo es usted Sr. Gobernador! Ahora sí que lo entiendo

Me caguen en la Mar,han dado libros y no lo han puesto en el facebook,raro,raro,raro.

En el facebuque ese no se si lo an puesto pero no los colegios no lo an dicho

Visitadoras esfuercese un poquito mas, los foreros esperamos mucho mas de usted.

Quiere decir que por primera vez va a pagar sus impuestos . Se a dado cuenta que pagando impuestos y dehar de engañar al ayto se puede recaudar por eso a decidido pagar y dejar de ser .......amen

Pichin asi ay para los electrisistas

Mas vale que se dirigiera usted en otros terminos para hablar de las cosas del pueblo, LOS NIÑOS POBRES DEL REINO,eso que es?

a buen entendedor , pocas palabras bastan.


¡El tio amenazas!!!!!!

mejornolodigo, pues tio si no sabes, cállate hombre¡

Pa decir tonterias, tu nombre te va muy bién, es muy representativo.

CALLATE HOMBRE, CALLATE.

Esta vez el Sr. Gobernador y el plebeyo Bartolo se encontraban apoyados en un barril de pino que daba a la plaza del pueblo

—Sr. Gobernador, siento ser yo el que le tenga que transmitir los malos rumores que se escuchan en Las Cuatro Esquinas del pueblo y en la barra de los bares.

—Aboca y no seas marrullero. Además, ¡No lo haces gratis! ¡Recuerda que por eso te arreglé la acera que está cerca de donde tu pasas todos los días.

—Es verdad, Sr. Gobernador. ¡Perdone mi atrevimiento! Se comenta que su Excelencia y su delfín pasaron olímpicamente del problema de los pinos. ¡Hasta los socialistas dicen que hace más de dos años que se lo recordaron en un pleno. Dicen en un pergamino que han puestos por las calles que si entonces hubiera puesto remedio no estaría nuestra pinada prácticamente seca y sin solución.

—¡Estos plebeyos son unos mentirosos indeseables! ¡Tengo el cajón llenos de escritos enviados al Reino, diciéndoles que tenemos un problema con nuestros pinos!

—Una duda, Sr. Gobernador. ¿Los pinos son suyos o del Reino Valenciano?

—¡Eres un impertinente! Si digo que son del Reino Valenciano y a rechistar y a decir los mismo en todos los lugares!

—¡Lo que usted mande!!

—Sr. Gobrnador, unos enteradillo dicen en las plazas que el primer escrito que envió su Excelencia al Reino tiene fecha de este último agosto.

—¡Esos enteradillos hijos de satanás mienten! El Sr. Gobernador mientras decía esta frase apretaba los puños para dar un fuerte golpe sobre el barril en el que se apoyaba.

—Su excelencia me perdone, pero también comentan esos vasallos que la fecha del escrito coincide con la advertencia que una doncella le hizo sobre la muerte de los pinos.

—¡Mienten1 ¡Mienten! y ¡Mienten!

Tan enfurecido se puso el Sr. Gobernador que se levantó bruscamente para tomarse una tisana que siempre guarda en uno de los bolsillos de su sayo. Pasados unos minutos, el tic que le distingue cuando se irrita, habían desaparecido.

—Bartolo, quiero que llames inmediatamente a mi Delfín. Tenemos que salir por todo el condado a decir una y mil veces que yo soy el que más quiero a los pinos y que haré lo posible para que todos vuelvan a estar tan sanos como estaban antes.

—Sr. Gobernador, cuando los vasallos oigan eso no se lo van a creer.

—¡Tu calla, cacho burro!

—También se dice en las Cuatro Esquinas que su excelencia debería irse con su séquito a otra parte.

—¡Eso ni lo mientes!

Sr, Visitadoras,que bien escribe usted,que imaginación literaria.

Por una vez, su realidad, de manera inverosímil y novelesca, la ha ordenado de tal modo que el asunto de los pinos, parece pura ficción.

Me caguen en la Mar,ni Gramaor,ni Cloony,etc.....forever Visitadoras.

Sr. Visitadoras,para cuando la siguiente conversación entre el Sr.Gobernador y Bartolo?

Hola malaostia, eso es impredecible porque el Sr. Gobernador está muy ocupado en sus cosas y no siempre dispone de tiempo para escuchar las demandas o quejas de sus vasallos. Pero en cuanto la tengan, estaré pendiente para contarla.

Un gran saludo

Gracias Visitadoras,estaré atento a su narrativa,pero el sr Gobernador está trabajando a destajo con el tema de los pinos.

No lo presione usted mucho,me caguen en to los politicos corruptos.

Tenga cuidado malaostia66, pues son muchos los corruptos que están saliendo.

Saludos¡

Pichin malcopon estará trabajando a destajo por los pinos de Guardamar el arcalde.

Cómo le explicará el señor gobernador al vasallo Bartolo el pelotaso de la cantera???. A quien le pique que se valla al chalet de Guardamar.

Cómo siempre el gobernador llega tarde....
hace tiempo que están viendo los pinos y ahora le entran las prisas, se notan que vienen las elecciones...

Expliqueme una cosa.
Porque cuesta lo mismo el mantenimiento del campo de fútbol de redovan, que el del billares, siendo éste un campo de primera división????

Los pinos va ser su muerte política!!!!

El Sr. Gobernador, como estaba preocupado por la diversión de sus vasallos para que así no metieran sus narices donde no debían, mandó organizar una carrera de caballeros y damas, que se estaba poniendo de moda, y que transcurriría por las calles más importantes del pueblo, lo que serviría de regocijo y alegría de vecinos y visitantes. Así se hizo en un caluroso fin de semana.

En este evento participaron caballeros y damas de distintos condados y, como empezaba a ser costumbre, a los primeros en llegar a la meta, después hacer el recorrido indicado, se les reconoció su triunfo mostrándolos como triunfadores al resto de vecinos que les aplaudían llenos de orgullo y, en algunos casos, envidia. El evento fue todo un éxito de público y alegría con la que los vasallos consiguieron olvidar momentáneamente la pérdida de su pinada y el dudoso destino de la cantera.
Terminado el evento, el Sr. Gobernador y su séquito de caballeros, damas y demás palmeros se dirigieron al mesón amigo en el que, sentados alrededor de unas mesas hechas de pino, refrescaron sus gaznates con fresca cerveza.



Pasados unos días, el vasallo Bartolo se dirigió al palacio del Sr. Gobernador para tenerlo al corriente de los últimos rumores que Las Cuatro Esquinas lanzaban a los cuatro vientos. Después de la obligada reverencia a su amo y señor, el Sr. Gobernador le inquirió:

—¿Qué me tienes que contar hoy? Dijo en un tono poco amigable. ¡No quiero oír nada de pinos ni canteras! ¡Estoy que no duermo con la dichosa pinada para que tu vengas a contarme más insidias de esos que no quiero ni nombrar!

—¡Cálmese, mi señor! Nada de eso mencionaré!

—¿Entonces…?

—Es sobre la carrera del finde pasado.

—¡Algo bueno debe ser porque hubo mucho colorido y el pueblo llano se lo pasó muy bien!

—Pues…de verdad, de verdad, lo que se dice por las Cuatro Esquinas…es que hubo un… amaño.

—¿Cómo se atreven?

—¡No se irrite, Sr. Gobernador!

—¡Que no me irrite, dices ¿Quiénes son esos desgraciados vasallos míos para decir que ha habido un tongo?

—Se comenta que la dama de su Delfín, que es del condado de Bigastro, la apuntó su señoría como si fuera de nuestro para así poder recibir el tercer premio en esta categoría, ya que uno de los premios era para damas redovanenses.

—¡Cuanta envidia tienen algunos de mis vasallos !

—Sr. Gobernador, el grito de tongo lo puso una de las damas azules de su corte, muy simpatizante de su señoría.

—¡Sea quien sea! Como se atreva a poner en duda mis decisiones, le arranco el vestido azul que la distingue de su buena suerte y la visto de rojo para exigirla en una carreta por todo el pueblo. ¡Habrá desgraciada! ¡Poner en dudas mis sabias decisiones!

— Las Cuatro Esquinas comenta que no debía haber quitado el premio a esta dama para dárselo a la señora dama del su querido Delfín.

—¡Que se aguante! ¡Mis decisiones no se ponen en duda, para eso soy el gobernador y señor!
Su irritación iba en aumento y ya se le notaba excesivamente inquieto en su confortable sillón de piel de vaca, curtida de una hermosa tal que fue sacrificada para que sirviera para descansar sobre ella sus gobernadoras posaderas.

—Sr. Gobernador, cálmese por favor porque si le veo así no le podré contar lo que terminan diciendo aquellos que desean quitarle el gobierno de este hermoso pueblo.

—¡A esos ni me los miente! Dígame, dígame, no obstante, lo que esos descerebrados, hijos de satanás, van charrando de mi.

—Uh..Uh…..

—¡Quiere contarlo de una vez puñetera vez, desgraciado!

—Pues…pues…que si esos chachullos hace a plena luz que hará en los sótanos del su castillo…

Antes de terminar el vasallo Bartolo la frase, el Sr. Gobernador se levantó y golpeando con el puño cerrado en su hermosa mesa de pino, dijo:
—¡Vete de aquí, inepto que sólo me traes malos augurios!

Nadie supo con certeza que hizo después el Sr. Gobernador, aunque todos daban por hecho que buscaría su petaca con tisana recién hecha y echaría un buen trago con el que calmar su estado de irritación que últimamente le perseguía hasta en sueños.

Quería decir Villareal

San Miguel, los pinos lo pueden enterrar políticamente a Emilio, pero como dice la canción, pero no estaba muerto no no, pero no estaba muerto no no, que estaba en Guardamar donde tiene chalets Grupo Marjal.

Y el pequeño Adriancito que hará? por que en Redován lo tiene crudo.

Se dedicará a cuidar de Cotino, que está en horas bajas?

Se marchará a Guardamar? tendrán los chalets caseta del guarda?

Hay Adriancito, que incertidumbre

Amigo Visitadoras no me ha gustado que en su última narrativa,devalue usted el último Croos que se corrió en nuestra villa,ya que fue un éxito de participación y organización.

La mujer de Adrián hizó una buena clasificación y si le dieron premio local, creo que fue merecido,ya que su maridito es de Redován.

Amigo Gringo,no se preocupe usted de Adrián,que el ya es mayorcito,me caguen en la Mar.

Qué quisquillosos se merecerá esa mujer una medalla después de aguantar al marido cuatro años sin dormir por los paraos.

Al vasallo Bartolo se le veía cabizbajo y tristón. En esta semana había oído demasiadas criticas en contra de su Señor Gobernador y no le apetecía nada verlo para contárselas, dado lo rápido que se encorajinaba cuando se enteraba de que cada vez eran más los vecinos de la aldea que estaban descontentos con él. No obstante, hizo de tripas corazón y subió a su despacho para darle el parte semanal.
Tocó en la puerta, al tiempo que un hormigueo le rasgada por el interior de su excesiva barriga.

—¿Se puede, Sr. Gomernador y benefactor de sus amigos?

—¡Pasa y no te muestres más ruin de lo que ya eres!

—¡Sr. Gobernador, no me humille porque usted sabe que estoy y estaré siempre a sus pies y servicio!

—¡Bien te vale si no quieres perder la hogaza y el cacho de tocino que te entrego de vez en cuando!

—¡Siempre a sus pies, mi Señor!

—¿Qué chismes me traes hoy?

—Principalmente que los vasallos empiezan a pensar por ellos mismo y por ello están muy enfadados con lo de los pinos!

—¿No les ha sobrado que vinieran unos sabios que trabajan para nosotros en el palacio del burgo alicantino para explicarles que los pinos tenían que morir en uno de estos años, pues no servían para nuestra sierra?

—Eso les ha enfadado todavía más porque dicen que su Señoría les ha querido tomar el pelo.
—¿Cómo que les he tomado el pelo? ¡Habrá desagradecidos! ¡Cada vez estoy más arto de que me lo critiquen todo!

—Dicen que les ha querido engañar de nuevo con eso de que los pinos carrascos no son los adecuados para esta sierra y por eso se están muriendo, están molestos de que se trajera a unos siervos del palacio de Alicante para decir lo que su señoría y su válido querían que dijeran…y dicen más cosas que no les gustaría oír.

Como siempre que le visitaba el siervo Bartolo para contarle lo que pensaba los cada vez menos siervos, el Sr. Gobernador se ponía nervioso y se desahogaba dando vueltas por su soleada y acogedora estancia.

—Aunque no me guste oírlas–y se volvió con un violento giro–nada te calles si no quieres que te deje en el basurero de donde viniste.

—No se excite en exceso, excelencia

—¿Cómo te atreves a decirme lo que yo debo o no hacer?

—No entra en mi cabeza, Sr. Gobernador, darle consejo. Yo sólo soy un pobre vasallo que desea estar a su servicio. Y le ruego, por todos los santos del cielo, que no me devuelva al fango de donde vengo.

—Y un ¡Pues habla! Le salió con la rabia que le es habitual cuando le llevan la contraria.

—Dicen que lo de la rueda de prensa y demás escritos y visitas de su Excelencia y su Delfín, no es más que una tapadera para ocultar que es y se siente culpable por haber dejado morir la pinada.

—¿Yo culpable? ¡Nunca! Soy yo mucho señor para verme amedrantado por unos miserables descerebrados¡

La última palabra de la frase se le mezclaron con otras que el vasallo Bartolo no entendía, aunque comprendía que si fueran dardos de fuego, en vez de sonidos, habría que esquivarlas para evitar ser fulminados.
Mientras el Sr. Gobernador se desahogaba gritando como un energúmeno al tiempo que volcaba su ira contra su robusta mesa de pino, el vasallo Bartolo salió de la estancia evitando que su dueño y señor se percatara de ello.

Sr Visitadoras,me encanta leer sus narrativas,sin duda el nivel en el Foro lo pone usted.

Pero también le digo una cosa, al amigo Gramaor no le va a gustar que le venga con estos "cuentos",me caguen en la Mar.

Malaostia, hasta ayer no había leído tu escrito sobre la carrera.

En ningún momento devalúo la participación ni organización de la carrera. Si lo hago indíquemelo, cómo. Solo hago mía la queja de una participante que llegó a la meta detrás de la señora del sr. Adrian y se quedó sin premio. Esta se quejaba-repito- que la categoría de la prueba era para vecinas del pueblo y no parta esposas de personas nacidas en la localidad. ( que raro si fuera así) Se quejaba de que el premio le correspondía a ella por ser vecina de Redován y no a la esposa de una persona nacida en el pueblo, por muy Adrian que fuera.

No obstante, te pediría que colocaras en este foro las bases de dicha carrera para comprobar si la que se quejaba lo hacía con despecho o con razón. Por mi parte, si dichas bases le quitan la razón a mi confidente, pediré disculpas por no haberme informado mejor.

Un saludo y gracias por leerme con gusto

Amigo Visitadoras,siento no poder poner el texto de las bases,ya que no dispongo de ellas,posiblemente nuestro amigo Gramaor si las tenga y gustosamente las ponga.

No obstante en este tema se ha querido politizar,ya que lo facil es que la persona que entro en meta después de la mujer de Adrián,hubiera puesto una reclamación a los jueces de carrera si cree que el premio le correspondia según las bases.

Lo demás es querer marear la perdiz,me caguen en la Mar.

MOTIVOS PARA ESTAR CALLADITO

En estos últimos días, Bartolo, el vasallo fiel del Sr. Gobernador en cuyo escudo luce tres hermosos pinos en fondo marrón, encuentra a su señor, menos hablador que de costumbre. Piensa que algo le preocupa, por lo que decide, al tiempo que quiere ponerle al corriente de lo que se cometa en Las Cuatro Esquinas, dejar que descargue sobre él su malhumor con algún que otro exabrupto porque sabe que eso le alivia y él ya está acostumbrado a ellos.

—¡Buenos días tenga usted Sr. Gobernador! ¡Que el santo del día le proteja y le bendiga!

—¿Cómo te atreves a dirigirte a mi con ese tipo de saludo?

—Usted perdone, pero como todos los que le queremos y le debemos pleitesía le vemos últimamente tan callado y pensativo, me he atrevido a pensar que podría ser bueno encomendarle al santo del día, como suele aconsejar su buen amigo el Sr. Cura.

—Me basto y me sobro para vencer en batalla a cualquiera que se atreva a poner en peligro mi reino.
No obstante, su bravata ocultaba una gran preocupación. Así lo confirmaban el resto de soldados que para él trabajaban dentro y fuera del que creía su palacio. Al cabo de unos segundo, El sr. Gobernador hizo un esfuerzo y adoptó una actitud más condescendiente con su vasallo, al tiempo que le interrogaba sobre las habladurías.

—Mi estado es excelente y por lo tanto sigo firme con mi destino. Cuéntame las calumnias que los plebeyos de este lugar dicen de mi o de mis hechos.

—Excelencia, preferiría callarlos, pues lo que se dice de su excelencia y de su delfín es grave.

—No pueden ser porque nuestra conducta es intachable.

—No es eso lo que dicen, Señor.

—¡Cuenta de una vez, hijo de un mal parto!

—Pues…pues…dicen que si su excelencia está tan callado últimamente es porque tiene miedo a que los quieren arrebatarle el trono digan a la inquisición no se qué sobre quienes van a llevar la cantera.

—¿Miedo? ¡Yo solo entrego cuentas ante mi creador!

La agitación del Sr. Gobernador era más que evidente porque, aunque él nunca habría creído que sus enemigos llegaran a tanto, el hecho le inquietaba.

—¡Cálmese su excelencia!

—¡Que me calme, que me calme! Venga…venga…que más dicen esos hijos de satanás.

—Muchos de los plebeyos de este pueblo se ríen un poco– bastante, diría yo – de su excelencia y su delfín por anunciar a bombo y platillo que el marquesado de Alicante iba a entregar muchos eurarios para arreglar el desastre de la Sierra.

—¡No me hables de eso! ¡Me han hecho quedar en ridículo!
Una sonrisa maliciosa pareció dibujarse en el rostro del vasallo Bartolo que se ladeó un poco para evitar que su señor no se percibiera de ello.

—Sr. Gobernador, jamás me atrevería aponerme en su lugar, pero mi débil mollera comprende su decaído estado y el silencio que se ha apoderado de su excelencia en estos días.

—¡Es muy duro, amigo Bartolo, muy duro! Que los de Alicante digan ahora que no hay dinero, que aquellos que me quieren quitar el trono me amenacen con llevarme a la inquisición y ¡Para colmo! Los hijos de satanás de esta mi finca, se atreven a colgar dibujos de mis caballos para que todos lo lugareños se enteren de que los aparco mal. ¡Sí, he de reconocer que tengo motivos para estar callado!

Señor Iquisidor, muy pregunton, y poco respondedor, cuando se va a dignar a contestar algo,o es que las respuestas, le incomodan.

Se las hago de nuevo por si las ha olvidado.

¿Que opina de los enchufes por amistades politicas,por ejemplo, que un politico o POLITICA termine trabajando en el ayuntamiento de Benidorm.?

¿Que opina de la investigacion, SOBRE el mal uso de las tarjetas BLAK,en la mancomunidad?.

¿Porque estuvo calladito, cuando la lety nuestra lety, no movio un pelo mientra se le secaban los pinos?.

Siga lanzando humo, y haciendo el tonto con su Bartolo.


PD. Le ire informando de proximas investigaciones.

Me caguen en la mar amigo Visitadoras que textos más entretenidos,hace usted que uno se aficione a la lectura entre lineas.

No se preocupe usted por los eureles el Marquesado de Alicante,veran como llegan a espuertas antes de Mayo para adecentar la villa y los plebeyos lo celebraremos a bombo y platillo.

A espuertas han llegado los millones de la Diputación pa Bigastro.Me cague en la Mar

Gramaor cuéntanos como van las declaraciones del padrino Cotino.