Peñas de San Pedro - Albacete

Bueno, ya está. El parlamento de Cataluña ha prohibido las corridas de toros.

Mi enhorabuena más sincera a antitaurinos, abolicionistas y profesionales de la prohibición en general.

Pero, ¿por qué nos vamos a quedar ahí? Ya que hemos cogido carrerilla, podemos seguir prohibiendo cosas y más cosas perniciosas y poco recomendables. Ahí van algunas ideas.

Lo primero que habrá que prohibir, por supuesto, serán los encierros de San Fermín. Semejante manifestación de cavernícolas corriendo delante y detrás de los toros no es propia de un país que se dice civilizado. Por no hablar del estrés que sufren los animales, solos e indefensos entre tanto paisano retrasado.

A continuación prohibiremos las procesiones de Semana Santa. ¿Qué es eso de sacar a pasear a la calle las imágenes religiosas en un estado laico y secularizado como el nuestro? ¡Menudo escándalo para los ateos y los fieles de otras religiones! No se puede herir así la sensibilidad de la gente de bien.

Y luego, por qué no, vamos a prohibir las fallas de Valencia. ¡A quién se le ocurre quemar toneladas y toneladas de papel y cartón, con la crisis que hay, y con lo bien que podría emplearse todo ese material en fabricar libros para propagar nuestras buenas costumbres y nuestra aséptica y saneada cultura! ¿Y lo peligrosa para la salud y molesta para los oídos que es la pólvora?

Prohibiendo, prohibiendo, prohibiremos las carreras de coches y de motos, despilfarro de combustible y agresión al medio ambiente, además de que supone un riesgo inútil para sus conductores y también para los espectadores.

Y la guinda.

Prohibiremos los embutidos de nuestro pueblo. Sí, sí. ¿Que por qué? ¡Ah, chicos! ¿Y la sal, grasa y especias que tienen? Colesterol, ácido úrico, infartos, embolias... ¡Cuántos enfermos sin proponérselo y cuánto gasto para la seguridad social! El hombre nuevo tiene que ser sano, nada de ingestas insalubres y nada de cargas para las maltrechas arcas del estado.

Y sí.... también prohibiremos la carrera del Santo Cristo. Por si fuera poco sacar a pasear la imagen, encima llevarla corriendo para eslomarnos... ¡Si seremos bestias, madre mía!

¡Qué contento estoy de tener unos mandamases que se preocupen tanto por mi salud física y psíquica! ¡Qué porvenir más feliz me espera! Sólo de pensarlo me entran ganas de prohibir... ¡Aaaaah, qué gusto!......

Estoy contigo pocasprisas,hay mogollon de cosas que para mi tienen mas logica para ser prohibidas que las que tu destacas.Por ejemplo,las bodas gays,las multas de trafico tan severas(ya sabes con dos cañas adios carnet temporalmente),adopcion de niños entre gays(¿como sera el nuevo hombrecito el dia mañana cuando vea a sus "padres"dandosen esos morreos con sus viscosas lenguas),la verdad que asi va España,cada vez mas maricas pero no pasa nada AUPA ESPAÑA que vamos a triunfar como la coca-cola.QUE FUTURO MAS ACOJONANTE NOS ESPERA ¿no?

Artista! al SANTO CRISTO ni lo menciones para las prohibiciones!

ZAPATERO VETE YAAAAAAAAAAA¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

No era mi intención despertar sensibilidades, porque soy devoto del Santo Cristo como el que más. Pero... cosas veredes, kairos.....