Ontur - Albacete

HOLA PRIMO, ESPERO QUE EL APODO DE "EL ROJO" TE DIGA ALGO, YA QUE ES TU TIO PEDRO DE ONTUR. TRAS COMENTARME VARIA GENTE QUE MI NOMBRE APARECIA EN EL FORO DECIDI ENTERARME DE QUIEN ERAS Y HE LLEGADO A LA CONCLUSIÒN DE QUE ERES MI PRIMO PEDRO DE CORNELLA. TE FELICITO POR LO BIEN QUE TE EXPRESAS EN EL FORO Y LA CAÑA QUE LE METES A ALGUNOS.
TE MANDO UN SALUDO DE TU TIO PEDRO Y TU TIA GENEROSA.

Saludicos para todos:

¡¡Hombre!! ¡¡Querido primo!! Vos seáis bien hayado. No sabéis la alegría que me habéis dado cuando os ví asomado a esta ventana que se ve desde la misma picota del Madroño. ¡Qué digo desde el Madroño! se ve desde la otra parte del mundo o desde donde quiera que haya un ordenador, un monitor y una conexión a Internet. Y una persona claro.

Pero ¡Por Júpiter! Me habéis dado un susto de muerte primo. ¡Eso se avisa hombre! Poco más y te cargas a tu primo de un plumazo internaútico. ¡Menudo arreón me has pegao! Con lo mayor que ya es uno, y lo esmirriao que los años te dejan, ha faltao el canto un duro pa que me diera un soponcio de aquí te espero.

No te puedes imaginar cómo me quedé cuando leí aquello de: “Pedro Higuera el Rojo” Dije “Aiváaaaaa! alguien me está tachando de rojo.
Es que últimamente parece que mis opiniones en este foro no son muy bien vistas, o mejor dicho bien leídas, a pesar de tratar a todos con el debido respeto. Mi intención nunca fue dar caña a nadie, ahora bien, si manifestar que sin insultos y malos modos también se puede hacer política, si eso se considera dar caña, pues entonces sí que daba caña.

El caso es que más allá de esas mis sugerencias, mi única intención siempre fue la de intentar armonizar y que la concordia fuese el aire sano que respirasen todos los ontureños, desterrando aquellos brotes que la política malentendida y mal practicada suele generar. Mas en vista de que el nivel de intolerancia rebasa cualquier límite imaginable y que las diferentes formaciones políticas andan a la greña tirándose los trastos a la cabeza y cada cual interpretando la democracia a su manera, hace unos días decidí no hacer ningún comentario más y retirarme a mis aposentos y que allá se las compongan. Tomé esa decisión con un sentimiento de tristeza ante la impotencia de ver a mi querido Ontur, a mi pueblo del alma así enzarzado en esa guerra de continuas descalificaciones como si unos fueran los malos y otros los buenos.

Me han dicho que desde la distancia no puedo tener una visión objetiva de lo que sucede en el pueblo y que por tanto, mi opinión no puede ser tan acertada como la de ellos. Y eso es verdad, lo tengo que admitir sin paliativos, pero dejando aparte los juicios de valor, juicios de los que suelo huir por desconocimiento, y porque no es mi estilo, también es cierto que por ese camino que parece que ellos conocen tan bien y yo no, y que han emprendido, no es el mejor para que en Ontur reine la calma, la estabilidad y el sosiego suficiente para que, fuere quien fuere quien gobierne, lo haga con la tranquilidad siempre tan fundamental de verse apoyado por todos los vecinos una vez que las urnas hubieron hablado. Así es como se avanza y se mantiene la amistad aunque cada cual con sus ideales y su liturgia exponga su criterio.
Puede que yo esté equivocado, nadie está en poder de la verdad absoluta, pero como así lo percibo así lo manifiesto, respetando que alguien pueda tener otra opinión completamente diferente a la mía.

Nunca critiqué a ningún partido y tampoco alabé a ninguno. Lo único que no veía bien eran las acusaciones poco respetuosas de unos y de otros. Y como parecía que eso no gustaba que lo dijera, pues oye, antes de que mis paisanos y amigos todos los ontureños se puedan molestar, prefiero ver los toros desde la barrera esperando que no haya ninguna cogida de gravedad.
Triste, pero, ¿Qué le vamos a hacer?

De ahí que cuando leí aquello de “rojo” y con mi nombre y apellido, se me subieron los colores, las mejillas se me tintaron de ese tono, me entró tembleque por todo el cuerpo, las manos me comenzaron a sudar y casi recupero la vista del susto. Y acto seguido me dije: ¡¡Tateeee!! ¡Atié con el simpático este! ¡Ya está la burra en las coles! ¿Quién será el gracioso que me está tachando de rojo? Oye que tampoco es que eso sea una deshonra, pero bueno, ya sabes tú la mala prensa que tiene esa palabreja injustamente tan mal tratada en nuestro país, pues tantos rojos como azules o viceversa…. en fin, sin comentarios. Puede que si algunos jóvenes hubiesen vivido aquella época de tan mal recuerdo, a lo mejor, no habría tanta beligerancia política en general y a todos los niveles.

Luego, cuando ya leí lo de primo, me emocioné sin poderlo remediar. Después, según iba leyendo, el color de mis mejillas volvieron a su tono original, desaparecieron los temblores y se apoderó de mí una santa paz muy agradable.
Ha sido una sorpresa inesperada y una alegría inmensa que mi primo haya podido entrar en el foro y me haya saludado. Muchas gracias hombre por tan hermoso gesto, me has alegrado la noche y me he sentido muy dichoso.

Ahora para finalizar, si te acercas un poco al monitor me verás con los brazos estirados intentando darte un abrazo de aquellos que cortan la respiración.
Dales también un abrazo muy fuerte a mi tío Rojo, a mi tía Generosa, y si tienes ocasión, a mi tío Alejandro, a mi tía Gene y a todos los familiares que veas y que a buen seguro estarán en estos días disfrutando de esas fiestas tan extraordinarias de las que Ontur puede presumir con orgullo.

Ah, y ten cuidao muchacho, que dicen por ahí que el pueblo está invadido de toros por todos sitios, no te vaya a coger alguno y la liemos. Tú no te separes del Rojo, que en caso de peligro, él es capaz de coger al novillo por el rabo, rebailarlo, ponérselo por montera y hacerse un estofado con el bicho en menos que canta un gallo e invitar a to el pueblo al festín gastronómico, con una cuerva de esas que saben a gloria y quitan el hipo. Eso sí, el rabo ¡ni tocarlo! que ese está adjudicado al cocinero.
¡¡Menudo es él pa esas cosas!!!

Un fuerte abrazo para todos. (desde un Cornellá muy caluroso)

Pedro Higuera

Perdón. Esto de no ver a veces tiene sus inconvenientes. Sin darme cuenta envié dos veces el mismo mensaje. Pido disculpas. Ya envié aviso para que uno de ellos sea suprimido.
Y nada más primo. Un abrazo para ti y otro muy fuerte para mi tía Rosa, mi tío Rojo, que espero esté algo más recuperado y cómo no, otro para la Rosina y esos peques que ya no serán tan peques.

Pedro Higuera

Borrado por Foro-ciudad.com

hola a todos los Pedros Higueras!!
Quizá no debiera meterme en su conversación, pero me ha parecido tan entrañable que necesitaba decírselos. Dicen que la distancia es el olvido, pero veo que eso no es así y me alegro. Sólo expresar que cuando yo sea un poco mas mayor y me iguale a vosotros me encantaría que alguien me recordase con tanto cariño como lo hacen ustedes. Perdon por mi intromisión pero necesitaba decírselo. Enhorabuena por su pasión y candor y felicidades por demostrar que el amor sigue vivo aunque pasen los años. Un abrazo.

Querido amigo ontureño de nombre noche:

La distancia no es el olvido. La distancia es un ancho puente de ida y vuelta que el tiempo va estrechando poco a poco sin que desde ninguna orilla se pueda evitar.
Al principio se cruza con cierta frecuencia, mas después, mil y una circunstancias se confabulan para espaciar en el tiempo esos largos paseos.

Lo que nunca el tiempo ni la distancia pueden borrar ni estrechar, es el amplio espacio que el corazón y la mente ocupa reservando en tribuna de lujo, aquello que se deja tras la otra orilla, máxime, si en esa orilla uno tiene sus raíces y una familia que siempre fue ejemplo y espejo de nobleza, generosidad y humanidad sin límite; Oro puro de 21 kilates. Eso, eso es imposible olvidarlo por muy largo que sea el puente y por mucho tiempo que se tarde en transitarlo.

No tienes porqué pedir perdón amigo, al contrario, tu intromisión ha sido un bello gesto de persona sensible y de gran corazón. Y cuando uno muestra esos atributos, lejos de pedir perdón, lo que debiera de hacer es sentirse muy orgulloso de ser como se es.

Gracias por tus palabras tan hermosas y reconfortantes.

Un abrazo.

Uno de los Pedros Higueras, pues tanto monta, monta tanto.