La Gineta - Albacete

Albacete, 17 de Julio de 2012
EL GRUPO SOCIALISTA RESUME EL PRIMER AÑO DE GOBIERNO DEL PP EN DESTRUCCIÓN DE EMPLEO, DESATENCIÓN A LOS MUNICIPIOS Y SUMISIÓN A COSPEDAL
Agustín Moreno precisa que la austeridad no es un invento del PP y que el PSOE dejó una buena herencia económica en la institución, pese a realizar planes de ajuste
El Grupo Socialista en la Diputación de Albacete ha realizado esta mañana un balance de lo que ha sido el primer año de gobierno del Partido Popular en la Diputación de Albacete, lamentando que los titulares que ha acaparado en todo este tiempo y lo más relevante que ha hecho ha sido presentar dos EREs para despedir a trabajadores y trabajadoras de esta casa, concretamente del SEPEI y del ITAP.

El portavoz del Grupo Socialista, Agustín Moreno, ha definido la acción de gobierno del PP en tres grandes líneas: una, destrucción de empleo; dos, desatención a los municipios y ayuntamientos; y tres, sumisión total a los dictados del Gobierno de Cospedal y de Rajoy, anteponiendo intereses de partido al de la provincia.

El Grupo Socialista ha recordado que la Diputación de Albacete fue pionera en aplicar la Reforma Laboral aprobada por el PP que permitía despedir a personal laboral de la Administración, decisión contraria a lo que prometieron en campaña electoral cuando engañaron a los ciudadanos de esta provincia haciéndoles creer que tenían la varita mágica para reactivar la contratación. “Lo más es que han justificado estas decisiones en base a motivos económicos, cuando responden únicamente a razones políticas e ideológicas favorables al desmantelamiento del sector público porque no creen en él”.

El portavoz socialista ha señalado que no van a tolerar que cada vez que efectúan un recorte se amparen en la austeridad y en la necesidad de controlar el déficit, ya que la Diputación de Albacete es una institución absolutamente saneada económicamente.

“La austeridad no es algo que se haya inventado el PP. Por si les falla la memoria hay que recordarles que en 2009 el presupuesto fue de 116millones de euros; en 2010 se redujo a 103 millones y en 2011 no alcanzó los 93 millones. Por lo tanto, cuando el Partido Socialista ha gobernado en la Diputación ha sabido lo que es tener que reducir presupuesto, sin renunciar por ello a mantener lo prioritario y lo esencial, ya sea en inversiones o en los compromisos alcanzados con los trabajadores y trabajadoras”.

El Grupo Socialista considera que quienes enarbolaron la bandera del empleo, no sólo no se han conformado con enviar a personas al paro, sino que han sido incapaces de impulsar una sola acción para crear empleo directo o indirecto. “Se les llenó la boca cuando presentaron los planes provinciales, pero a fecha de hoy no se ha adjudicado aún una sola obra, por lo que ni una sola empresa ha conseguido un contrato de esta Diputación”.

Desatención a los municipios.
A lo largo de este primer año el PP se ha caracterizado por desatender a los ayuntamientos, obviando la difícil situación que atraviesan y olvidando que el último fin de la Diputación es prestar apoyo técnico y financiero a los ayuntamientos, sobre todo los más pequeños.

Agustín Moreno ha indicado que “para que los municipios sean lugares de vida y de futuro, tal y como dijo el presidente de la Diputación en su discurso, no vale sólo con realizar visitas protocolarias para hacerse la foto, sino que hay que ponerse en la piel de los alcaldes y alcaldesas y ser sensibles cuando nos transmiten sus preocupaciones. Y el apoyo que esta Diputación tiene que dar a los municipios no sólo viene a través de las decisiones que son de su competencia, sino también a través de su interlocución y posicionamiento ante cualquier tema que afecte a los pueblos.

Entre las pocas medidas con la marca del PP que han adoptado como gobierno de esta Diputación, el portavoz socialista ha resaltado el acuerdo financiero que se firmó con varias entidades para que los ayuntamientos pudieran pagar a los proveedores, un acuerdo que desde este grupo se calificó de caramelo envenenado. “Y prueba de que no íbamos desencaminados fue la escasa aceptación que tuvo esta medida, ya que fueron muy pocos los pocos ayuntamientos que se adhirieron porque ahogaba sus economías, les ataba de pies y manos en la toma de decisiones, les obligaba a pagar unos altos costes financieros y encima, los proveedores tenían que afrontar unos altos gastos de tramitación”.

Sumisión absoluta ante la desaparición de la colaboración económica de la Junta y del Gobierno central.
El Grupo Socialista ha denunciado también que ante la reducción o eliminación de las aportaciones de la Administración autonómica y central al Presupuesto de la Diputación, la actitud del gobierno de esta institución ha sido acatar estos recortes, en lugar de pelear y de buscar financiación.

“Y en este sentido por mucho que digan que han trabajado para ayudar a los ayuntamientos, tenemos que decir rotundamente que eso es falso. Lo que han hecho ha sido ayudar a la Junta, plegándose a los dictados de la señora Cospedal y contribuyendo con esta actitud de sumisión a potenciar la asfixia económica de todos los ayuntamientos, que están prácticamente en situación de quiebra porque la Junta no les abona el dinero que estaba comprometido para la prestación de servicios, muchos de ellos además de competencia autonómica”.

El portavoz socialista ha añadido que “de nada han servido todos los intentos que este Grupo Socialista ha realizado, a través de propuestas y mociones, para que el gobierno de la Diputación exigiera a la Junta colaboración, responsabilidad y el pago de lo que les adeuda a los ayuntamientos. Siempre han rechazado esa posibilidad y han optado por sacarles las castañas del fuego y encima venderlo como si estuvieran haciendo algo bueno. Se ha optado por anteponer los intereses de los proveedores y las empresas, obligando a los ayuntamientos a contratar préstamos en unas condiciones desfavorables para ellos, con un 6% de interés, y muy favorables para las entidades financieras”.

Agustín Moreno ha lamentado que durante años el gobierno socialista tuviera que soportar el discurso machacón y reiterativo del PP exigiendo siempre que la Junta pusiera más dinero para todo, durante unos años en los que la complicidad y la colaboración llegó hasta límites nunca conocidos alcanzando acuerdos tan ventajosos como el convenio para el arreglo de caminos rurales o el de mejora de obras hidráulicas.