Nueva Villa de las Torres - Valladolid

Conversación interesante la de hoy.
Entre mordisco y mordisco a la manzana mañanera, el grupito del desayuno, comentábamos sobre el tema del asunto:
Los padres que, como yo, tenemos adolescentes en casa, escuchábamos y opinábamos sobre lo difícil que lo tenemos para afrontar esta "Crisis necesaria" de nuestros hijos.
Buscando, buscando, he encontrado este texto que puede servir de ejemplo:

Carta (copia/pega) de unos padres preocupados:

"Empiezo a pensar que esto no tiene solución, La conducta de mi hijo es incomprensible. Y lo triste es que siempre ha sido un niño feliz, pero ahora. Todo esto me hace sentirme muy mal, pienso que no he sabido educar bien a mi hijo, y ya no sé que hacer, lo he probado todo y creo que no tiene solución. Nos sentimos fracasados como padres y esto nos causan tristeza y desesperación. Nuestros hijos han sido siempre lo más importante. Nuestra vida ha girado siempre en torno a ellos, les hemos dado de todo, hemos intentado hablar, pero es imposible, nos sentimos incapaces de comprenderlo".

Es curioso que, hasta este momento, todos nos hemos creído los mejores padres del mundo mundial y cuando nos llega este reto, en la mayoría de los casos, no sabemos bien cómo abordar el problema.
Aquí, en el Foro, ya hemos comentado alguna vez sobre la adolescencia, pero creo que merece la pena volver a reflexionar.
Venga, amigos, que de ésta: o se sale o nos metemos en un buen lío.
Como se dice ahora: ¡MENUDO MARRÓN! es la adolescencia. ¡Mecachis!
Un saludo a todos

Yo he pasado una etapa de "a dolescente" y me queda una segunda,ya que tengo dos hijos, seguro que muchos de nosotros ni nos acordamos de las que montábamos a nuestros padres en esa etapa de nuestra vida. Pues... sencillamente era lo mismo, intentando afirmar nuestra identidad, y posición en el grupo, familia, entorno social, (léase clases). La gran diferencia, creo yo, es que antes nuestros padres merecían todo nuestro respeto, y ahora, al menos por lo que veo en algunas familias, se ha perdido completamente, o lo que es peor, parece que los "únicos" que se merecen "respeto" sean nuestros hijos; se ha pasado de un extremo al otro por completo, hemos convertido a nuestros hijos en unos tiranos (hablo en general)no creo que sea una buena forma de educar el consertirles todo lo que quieran y en el mismo instante que lo demandan.

Debemos enseñarles a esperar, gratitud, respeto, consideración, autoestima, discernimiento para poder elegir... en fin, todos esos valores que nos convierten en "PERSONA".

Sólo espero estar haciéndolo bien, al menos lo hago lo mejor que sé, y cuando tengo dudas solicito ayuda de padres con más experiencia que la mía(algunas de sus soluciones me sirven)

Mil besos o más