Utiel - Valencia

La policía francesa ha impedido esta mañana una manifestación de solidaridad con Mahoma Merah, el musulmán que el pasado lunes asesinó a 7 personas.

Mahometanos vociferantes y musulmanas cubiertas con el niqab han sido dispersados por la policía esta mañana, cuando intentaban manifestarse para mostrar su solidaridad con Mahoma Mereh, autor material del asesinato a sangre fría de 4 judíos. Una de las víctimas del terrorista fue Miriam, una niña de 8 años de edad, a la arrastró del pelo unos metros antes de dispararle un tiro en la cabeza para mayor gloria de Alá.

Pero si en Francia algunos muslimes consideran al joven Mahoma un héroe que ya descansa en el Paraíso, con 72 vírgenes para él, en España, donde permanecen los residuos de la Alianza de Civilizaciones, los medios islamistas radicales le consideran una víctima del racismo, el colonialismo y las políticas antimusulmanas. En este sentido se manifiesta Webislam, órgano de agitación y propaganda de la subvencionada Junta islámica, que ha publicado un artículo en el que se afirma:

“Toulouse no puede explicarse como un crimen aislado fruto del odio o la acción de un fanático (…) “Los disparos del sur de Francia son el terrible y desastroso resultado de las políticas bélicas y el racismo antimusulmán de Occidente” (…) “La islamofobia no es una especie de aberración en Francia: proviene directamente del apoyo a las guerras imperialistas y al legado del dominio colonial”.

Sarkozy, según el artículo, es el auténtico instigador del suceso, ya que “ha atacado a los no franceses, insinuando que los franceses estaban viéndose obligados a comer carne halal”; también ha prohibido el hiyad en la escuela y reprime policialmente a los jóvenes magrebíes desempleados de las ciudades de la periferia… Pero junto a Sarko hay otros responsables:”Las continuadas ocupaciones sobre todo de países musulmanes, la incapacidad para poder resolver la cuestión palestina, las actuales amenazas a Irán y quizá, lo más importante, el creciente número de civiles muertos en Afganistán, han exacerbado esos sentimientos de afrenta”.

Tres niños han sido asesinados fríamente y con una crueldad extrema, pero como indica Webislam, engendro islamista generosamente subvencionado por el Gobierno, Mahoma Mereh es una víctima del racismo al igual que el imán de Tarrasa. A la pequeña Miriam le destrozaron el cráneo de un disparo, sin embargo, toda esta purria islamista ha encontrado lógicas explicaciones geoestratégicas e históricas que nos permiten “entender” su asesinato. Pero estos argumentos hieden. Apestan a justificación de lo más degradado y repugnante. No obstante, esto es el Islam, la religión de paz que ha sembrado de muerte Nueva York, Madrid, Londres, París, Bali, Moscú…