Una cosa es predicar, y otra, dar trigo El doble rasero de los dirigentes políticos ha vuelto a vivir un nuevo episodio, esta vez en Castilla La Mancha. La Comunidad autónoma que se ha vanagloriado de reducir el gasto en sueldos públicos para equipararse a los recortes sociales que ha sufrido su población resulta que ha rescatado a un puñado de los suyos. Se trata de María Dolores de Cospedal quien en enero ya redujo un 10% la partida destinada a pagar a los diputados autonómicos para, el pasado mes de junio, presentar una proposición de ley para reformar el Estatuto de Autonomía y que el número de parlamentarios se establezca en una horquilla de entre 25 diputados y un máximo de 35. Un buen puñado menos que los 49 que hay en la actualidad. Pero frente a este supuesto ahorro, que implica que desaparezcan diputados tanto del PP como de la oposición, se encuentra un incremento de gastos para los altos cargos. Así lo ha denunciado la portavoz socialista, Cristina Maestre, asegurando que, desde que gobierna María Dolores Cospedal, los gastos en Alta Dirección de la Junta se ha incrementado un 170%, pasando de los 22 millones de euros de 2011 a los 59 millones de euros del presupuesto para 2014. Dinero de libre disposición destinado a cargos de confianza cuya contratación no se ha visto reducida y que serviría para recuperar a algunos de los miembros del PP despedidos por los recortes en otras áreas. En ese sentido Maestre pone en evidencia la incoherencia de Cospedal al dejar sin sueldo a los diputados para que no le puedan hacer oposición. "Ahora entendemos que esto de la austeridad y del dar ejemplo es para todos, para los diputados de la oposición y para los trabajadores, menos para los políticos del PP y del Gobierno de Castilla-La Mancha", ha señalado en declaraciones a los medios locales. Se trata de la única partida presupuestaria que crece -descontando la destinada a sufragar la deuda acumulada- mientras descienden el resto de servicios. En ellos se incluye la reducción de 3.000 millones de euros el gasto en Sanidad, Educación y Servicios Sociales que, entre otras cosas, fija en 7.000 el número de profesores y médicos despedidos. Personas que pierden sus empleos y para cuya lucha Cospedal ha retirado el 75% del dinero destinado en 2012. Además se congela la oferta pública de empleo en todos los sectores de cara al 2012 y la prohibición de contratar personal funcionario interino. Los recortes afectan en todos los ámbitos salvo a los altos cargos del Gobierno autonómico. |