Ugena - Toledo

Un amigo mío hace muchos años ya me contó un método infalible para averiguar el estado económico de nuestro país.
Es muy sencillo y consiste en la contabilización de tías macizas que trabajan de cara al público en las oficinas, estudios, tiendas o almacenes de España.
No hay duda, en la época del bom económico, las oficinas estaban repletas de mendas macizorras, de tías potentes que con una sonrisa y un buen par de razones que mostraban sin pudor, te enseñaban mientras te atendían sin dudarlo los motivos que llevaron a sus jefes a confiar en ellas.
Pero en una etapa de depresión profunda, ¿Qué paso con los tipazos, los cuerpos turgentes y prietos?
Pues que se debieron de ir con el crédito.
Donde antes te atendían las tías macizas, hoy te atiende el capitán trueno, menudo cambio, se ve que con la crisis ya no son necesarios sus servicios, o sea que pongan a quien pongan en ventanilla los clientes van a ser los mismos, o sea pocos o ninguno.
Total que debe de ser que cuando sus jefes pensaron a quién despedir, no lo dudaron consideraron que los servicios de las tías buenas eran completamente prescindibles, además de mucho más barato que despedir a los abuelos y abuelas de la empresa.
¿Cuándo se verán los brotes verdes?
No hay duda, saldremos de la crisis cuando los escotes y wonderbra vuelvan a los mostradores de información, mientras tanto solo habrá depresión.
Que ninguna amiga se sienta ofendida que solo es cachondeo, pero una verdad fundamental.

viciosillo.