Talavera de la Reina - Toledo

(Aceptamos pulpo como animal de compañia. Caminamos hacia la Idiocracia?)

Matrimonio:

Etimología

Retrato del matrimonio Arnolfini, por Jan van Eyck.
El origen etimológico de la palabra matrimonio como denominación de la institución bajo ese nombre no es claro. Se suele derivar de la expresión "matris munium" proveniente de dos palabras del latín: la primera "matris", que significa "madre" y, la segunda, "munium", "gravamen o cuidado", viniendo a significar "cuidado de la madre", en tanto se consideraba que la madre era la que contribuía más a la formación y crianza de los hijos. Otra posible derivación provendría de "matreum muniens", significando la idea de defensa y protección de la madre, implicando la obligación del hombre hacia la madre de sus hijos.4 5
Para efectos de mayor comprensión de la expresión "matrimonio" en su aspecto etimológico es importante tener presente que, en muchas de las lenguas romances, es válido el concepto del contrato de matrimonio considerado por el Derecho Romano, que tiene su fundamento en la idea de que la posibilidad de ser madre, que la naturaleza da a la mujer núbil, la llevase a procrear una familia.

EL MATRIMONIO:

REFRENDO A PEPE EN LO QUE VEO ESCRITO Y RESPETANDO (QUE QUEDE CLARÍSIMO A LOS DEMÁS, PUES CADA UNO ES CADA UNO Y LOS DEMÁS SON LOS DEMÁS E IGUALES ANTE LA LEY).

Desde el infinito de los tiempos la naturaleza nos está demostrando que es sabia. Ella misma tiene sus leyes con sus correspondientes excepciones. En el sentido biológico nos definieron como matrimonio “La unión de un macho y una hembra y con la finalidad de la procreación”. Esto ha sido, aparte de natural, consubtancial con la existencia, y corroborado por todos los sistemas de creencias religiosas que han existido desde los albores de la humanidad.
Como estamos en el mundo occidental, nuestra religión, en sus textos sagrados, nos lo dice muy claramente: ”Matrimonio, es la unión carnal y espiritual de un solo hombre y una sola mujer con la finalidad de la procreación y santificada por la iglesia”.
Ahora, desde el punto de vista de los descendientes, el vástago común, debe tener en su aspecto biológico y social, unos ejes de referencia, o sea, un macho y una hembra progenitores, necesarios a todas luces, para tener una existencia normal y centrada en su vida personal.
A mi juicio, la falta de ellos, está comprobado, origina trastornos psiquiátricos, biológicos y psicológicos de todo tipo, en su triple faceta: espiritual, anímica y social, que ya lo decía Platón en la antigüedad. Si le falla uno de esos ejes de referencia o se le priva apostamente de éstos a una persona, ¿qué se puede esperar o en qué degenerará ésta?, sencillamente, en ser trastornado, como harto se está demostrando. Y si ahora, a la falta, que es grave de por si, añadimos otro progenitor referente del mismo sexo y, a lo mejor, con relaciones, falsamente sexuales, ¿qué puede ocurrir?, lo obvio, que trastornaremos al niño en su papel de hijo y como papel social en la vida.
Ahora ya, centrándonos en la unión de dos personas del mismo sexo, (dejando claro que no tengo absolutamente nada contra estas personas en ninguna de sus manifestaciones privadas o públicas, que no alteren el los modos y modales correctos de la convivencia, puesto que así ha sido desde milenios), ¿qué finalidad tiene esta falsa y artificial unión?. Si el origen del matrimonio es la procreación, aquí, en este caso, falla, su concepto, esencia, objeto, situación y finalidad como ente biológico, moral y social. Por lo que esta unión artificial y antinatural, es una aberración en si misma en todos los aspectos, ( moral, sexual, psicológica, sociológica y ética).
Para terminar, entonces me pregunto, ¿si no tiene todas estas finalidades o requisitos como entidad, ¿por qué ahora se realza, se reclama, se insiste, se proclama, se refuerza y, hasta desde los estamentos oficiales, se impulsa esta creación aberrante?. La explicación es muy sencilla y, al mismo tiempo, atroz: Que al constituir un grupo sociológico de moda, (consecuencia de un mundo lleno de toda clase de libertinajes), es una nueva fuente de votos que hay que promocionar, más, cuanto ésta masa social está en contra de la oposición de turno a la que hay que combatir. Atrayéndoles, se mata dos pájaros de un tiro y se refuerza el poder. Y hay gobiernos o partidarios que siguen demostrando que está a su favor dándoles millones y todas las prebendas que sean necesarias con tal de seguir en la poltrona. Ese el único, ladino interés que explica todo, aunque haya que destrozar la sociedad española, en esta ocasión, ética y moralmente. ¿Y usted, amigo lector, qué opina?. No es lo mismo una pareja de hecho, derecho, tordido, recto...etc, (a las cuales mis respetos y con todos sus derechos del código civil o ley sustitutiva vigente) que el matrimonio. Y QUE CADA UNO SE LAS APAÑE COMO DIOS LES DIÓS A ENTENDER.

Año 2505:

Estimado Saladino: Si nos fijamos de la naturaleza como usted dice, ¿de qué especies nos fijamos? ¿debemos aparearnos libremente con quién se nos cruce por la sabana o sólo con nuestros maridos? ¿Podemos masturbarnos en público como hacen algunos primates? ¿debemos aparearnos con el macho que salga victorioso de darse cabezazos con otros machos?

Por otra parte, y ya que menciona usted a Platón, ¿este no era el que idolatraba la institución del amado? ¿debemos seguir sus enseñanzas como cuando permitía a los gobernantes engañar al pueblo?

Si nos fijamos en los humanos,violetcaronrose, son capaces de hacer demagogia hasta la extenuación para convencer a incautos poco ilustrados.

Efectivamente, don pepe, no hay más que leer el último comunicado de la Conferencia Episcopal para ver lo que es demagogia o la parrafada de Saladino por ejemplo. Lo que no saben es que cada vez hay menos incautos y que cada vez estamos más ilustrados. Por eso, ahora una persona se puede casar con la persona que ama, quiere o desea.

Cada uno afrontará en su vida el peso o el acierto de sus propias decisiones, todo es experiencia y conocimiento.

Todo el mundo tiene derecho a muchas cosas, pero respetando a los demás. Nadie se opone a las parejas de echo ajenas sean como sean.

La decisión sobre la palabra matrimonio es como si aceptamos la independencia de Cataluña sin consultar al resto de España que es donde reside la soberanía. No nos han preguntado a los españoles sobre esa decisión sobre la palabra, por tanto es unilateral, cuando muchos de los matrimonios 'tradicionales' (millones católicos en España) no sienten que esa palabra pueda ser tan 'extensa' en su aplicación.

Algo más:
Todo niño tiene derecho a ser criado por su padre y su madre biológicos y a conocer sus raices biológicas.

Falso, el matrimonio atañe a los que se casan. La independencia de Cataluña atañe a todos los españoles. De unilateral, nada, se aprobó en el Parlamento que eligieron la mayoría de los españoles. Si no les parece bien, el gobierno en el poder puede cambiar la ley. Tiene mayoría para eso y para más. Probablemente se llevara usted una sorpresa si preguntaran a los españoles, desde luego, el grado de aceptación social es absoluto, mal que les pese a unos cuantos.

El matrimonio católico es una institución católica, el matrimonio civil es una institución sujeta a las leyes civiles, que entre todos nos damos, acordamos y votamos en el Parlamento. Insisto, pídanle a Rajoy que cambie la Ley si no les gusta.

Algo más: Echa usted por tierra la institución de la adopción, una institución tan antigua como el matrimonio.

Por cierto, sus parejas de echo, son "de hecho" y ya no tienen porque serlo, ahora, pueden ser un matrimonio como el suyo.