Utrillas - Teruel

MANIFIESTO DE APOYO A GARZÓN
Nos hemos concentrado aquí hoy, precisamente el 14 de abril, para defender un sentimiento, para gritar
justicia por tantas personas republicanas que murieron asesinadas porque querían una España mejor, una
España moderna, cuando los poderes fácticos en los años 30 del siglo pasado, querían mantener al
pueblo español en la pobreza y en la ignorancia.
Nos encontramos en esta plaza hoy, no para defender a un hombre concreto en todas sus actuaciones, a
Baltasar Garzón, que como todo ser humano, puede cometer errores. Nos encontramos aquí porque
estamos de acuerdo en que lleve adelante el caso del genocidio franquista, en que es de justicia que se
sepa quienes fueron los criminales.
Y no estamos solos. Organizaciones tan poco sospechosas como Amnistía Internacional, Jueces para la
Democracia, Juristas destacados de España, Argentina y Chile, la fiscalía del Estado, la fiscalía de
Cataluña, sindicatos, partidos, e incluso diarios internacionales, pero sobre todo mucha gente anónima, de
España y del extranjero, estamos escandalizados por la situación, pensamos que es una locura que
después de más de 100.000 asesinados por el franquismo y por la Falange durante la guerra civil y la
posguerra, Baltasar Garzón sea la primera persona encausada por aquel genocidio.
Hoy el sistema judicial español, por culpa del juez Varela, está haciendo el más espantoso ridículo en el
mundo. Hay una verdadera alarma social en Argentina y Chile, que no comprenden que se pueda
procesar a Garzón por intentar en España lo que tanto ha beneficiado a sus dos países, el esclarecimiento
de los autores de las desapariciones, torturas y asesinatos.
Los que nos hemos reunido aquí no somos juristas, pero nos extraña mucho que si España pudo
perseguir a Pinochet y a los militares argentinos, que tenían leyes de punto final para blindar a los
asesinos de allí, no sea posible perseguir también a los asesinos de aquí.
Nos extraña aún más que los descendientes de los asesinos puedan procesar a un juez por perseguir los
delitos que cometieron sus antecesores. Y nos extraña sobre todo que una organización, la Falange
Española y de las JONS, que ni siquiera ha tenido el cuidado de cambiar de nombre, descendientes de los
que ejecutaban físicamente a los republicanos españoles, pueda procesar a un juez que quiere investigar
esos crímenes.
Pero lo que ya nos llena de estupefacción, es que un juez atienda sus peticiones, y no sólo no se oponga
a sus pretensiones, sino que acuse a Garzón de prevaricar.
Es difícil entender que ante una opinión dividida, ante distintas interpretaciones posibles de una ley, como
se demuestra en la respuesta pública de otros jueces y fiscales, un juez tache de prevaricadores a todos
los que mantienen una de las dos opiniones posibles.
Los que nos concentramos hoy aquí, queremos que se esclarezca todo. Ya está bien de ceder. Los
intolerantes confunden tolerancia con debilidad, y hoy esos intolerantes están dando un paso al frente,
sacando pecho, están intentando que la sociedad civil recule ante ellos. Y eso no puede ser. Sólo se
puede curar una herida cuando la hemos limpiado previamente.
Y nos dicen los que colaboraron con Franco, como si estuvieran aún en la posición de concedernos algo,
que está bien que llevemos flores a los pozos de Caudé. Pero los asesinados en los Pozos de Caudé,
más que flores necesitan ¡Justicia! Porque si nos vieran, no sólo sufrirían por las calumnias que han dicho
los fascistas contra ellos, sino por los silencios nuestros, por no haberse sentido defendidos
suficientemente, en una mala interpretación de lo que debe ser una verdadera reconciliación, que debe
producirse tras el esclarecimiento y juicio de los hechos.
Esa justicia es la que está intentando Baltasar Garzón, y nosotros estamos aquí para manifestar nuestro
apoyo al magistrado en esa tarea.

Me uno a ese manifiesto ....