La Pobla de Montornès - Tarragona

Los catalanes merecen ser libres

Sábado 17 de Julio de 2010 8:38h

“Creemos en la España plural”. Lo dice hoy José Montilla en El País, en un artículo que dedica por entero a justificar su propósito de no ejecutar la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto catalán, una negativa que las leyes vigentes tipifican como un delito. Montilla habla hoy “cultura democrática” y habla de “reconocimiento y respeto a las distintas identidades, culturas y lenguas de España”, y lo dice él, que ha prohibido la enseñanza en español en una parte de España -emulando el sistema de exclusión lingüística impuesto por el régimen del Apartheid en Sudáfrica- y que ha desarrollado un tinglado al más puro estilo totalitario para delatar, perseguir y multar a los comerciantes que rotulan sus tiendas en español en Cataluña.

Coincido con Montilla cuando dice que la gravísima crisis que ha provocado su Estatuto “se trata más de un problema español que de un problema catalán”. Aunque a alguien le extrañe que diga esto, al cordobés no le falta razón. Ciertamente, si de algo tenemos que culparnos todos los españoles es de haber consentido demasiado tiempo tantas provocaciones y agresiones nacionalistas contra los derechos y libertades de nuestros compatriotas nacidos y residentes en Cataluña, por haber aguantado sin más los caprichos de un nacionalismo empeñado en ponernos a todos los españoles bajo su bota, tomando a nuestra democracia como rehén para conseguir el pago de rescates políticos y económicos cada vez más caros e insostenibles..

Si los gerifaltes de esa ideología ultramontana se niegan a convivir bajo las mismas reglas que observamos todos los españoles, si no están dispuestos a respetar los derechos de los propios catalanes, instaurando un régimen puramente dictatorial en Cataluña, y si además esa casta política pretende valerse de un gobierno regional -cuya autoridad procede de la soberanía nacional que reside en el pueblo español- para violar la Constitución y llevar a España a la quiebra institucional, lo propio es que se pongan en marcha los mecanismos que recoge la propia Carta Magna y se conteste con firmeza y sin rodeos a este desafío antidemocrático.

No podemos seguir consintiendo que unos chulos de tres al cuarto se dediquen a pisotear los derechos de los catalanes y también a pisotearnos y escupirnos a la cara al resto de los españoles, saltándose la legalidad a su antojo y pateando nuestra democracia ahora que ya no la consideran útil para sus mezquinos intereses. Ni Cataluña ni España entera se pueden permitir esta violación, a menos que queramos volver a vivir en una dictadura. Los catalanes merecen ser libres, y para ello urge emprender una ofensiva democrática contra el régimen dictadorial que los oprime: la Generalidad.

https://ww.outono.net/elentir/2010/07/17/los-catalanes-merecen-ser-libres/

Los separatistas catalanes, podrán ponerse tripa arriba, tripa abajo o de costado, inclusive hacer el pino en bloque, pero seguirán siendo ESPAÑOLES, MORIRÁN COMO TAL, aunque muchos les gustaría hacerse con el mando completo de una posible pequeña nacioncita que es apenas 1/14 del territorio nacional, más o menos 36.000 Km2, aunque como en el caso de Montilla, apenas es un bachiller de la nación, por tanto un negado intelectual, pero que se le va a hacer, usan los recursos de las provincias en hacer el ridículo, tratando de prender la mecha, cierto que mucha gente come casquillo, le entra al juego, quiere decir que hay mas y de peor ralea que otros.

Tendrán que esperar por centurias, para hincarle el diente a una parte territorial española y darse el gusto de cambiarle de nombre y de estatus..., siendo ellos los ovejeros de esas manadas.