Utrera - Sevilla

¡Que pena! ¿Verdad? Que lástima esos pobrecitos empresarios que ahora no ganan lo que durante tantos años se han ido llevando a costa de sus trabajadores. ¡Y es que la cosa está muy mala! Miren señores, la cosa está mal para los de siempre, para nosotros los trabajadores. Si la empresa cierra, o reduce personal, nosotros nos vemos en la calle con un palmo de narices y sin un duro y ellos se quedan con sus supercoches, sus supercasas y sus supermillones. Que para eso ellos han puesto por delante su patrimonio, dirán algunos, pues sepan que si esos individuos hubiesen creado puestos de trabajo dignos hoy en día serían unos curritos como nosotros. Si hubiesen respetado las mas simples leyes del Estatuto de los Trabajadores y de la competencia leal, esas empresas jamás hubiesen prosperado. Hablo de jornada de 40 horas, dietas correspondientes, vacaciones, pagas y pluses extras, etc., etc., todos ellos amparados por nuestros convenios. Pero no, ellos prefirieron explotarnos hasta el límite de reventar. ¿Y qué han logrado?, pues destrozar todo tipo de mercados saturándolos a más no poder y de camino conseguir que cierren las verdaderas empresas de dueños honrados que trataban a los trabajadores como personas, necesarias para su negocio, pero personas. Desde aquí quiero reseñar que no debemos dejarnos engañar por estos usureros. Hemos de reclamar nuestros derechos. Y, aunque ciertamente no és el momento de grandes exigencias, no debemos olvidar que hasta estas empresas de "pelotazo", que son mayoría, no pueden campar a sus anchas sin que nada ocurra. Y no piensen que esto es una rabieta por haber perdido el puesto de trabajo, yo continuo trabajando, pero estoy harto de oir siempre lo mismo. Cuando ha habido mucho porque hay que pensar en las vacas flacas y cuando estas llegan porque han llegado. Señores si les dejan parados reclamen sus indemnizaciones. Ese es un gasto que un empresario de verdad siempre debe tener previsto y cuando establece su negocio es absolutamente consciente de esa obligación así como de otras muchas.

YO SOY EMPRESARIO SIGO TRABAJANDO.BUENO
¿YO QUE HAGO ENTONCES QUE REPARTO TODOS MIS BENEFICIOS CON MIS TRABAJADORES NO?.EL SUPLICIO QUE HA PASADO MI FAMILIA,LOS GASTOS SIPCOLOGICOS,ESTOY CANSADO DE PREOCUPARME PARA QUE A MIS TRABAJADORES NO LES FALTE NI UN SOLO DIA DE TRABAJO.ESO NO LO DAIS POR BUENO.
LO MISMO DESCANSA UN TRABAJADOR QUE EL PROPIO EMPRESARIO?BENGA ADELANTE HAZTE UNA EMPRESA,AVER SI PIENSAS IGUAL.TE LO DIGO PORQUE HE SIDO TRABAJADOR Y AHORA SOY EMPRESARIO,Y MIS TRABAJDORES GANAN POR LO TRABAJADO,NO POR LOS BENEFICIOS DE MI EMPRESA.VENGA HOMBRE Y NO LLAMES USURERO Y MIRA POR TU EMPRESA,QUE TE LO AGRADECERAN LOS JEFES.

Ante todo disculpe la tardanza de mi respuesta. Usted no me ha entendido completamente. Aquí no se trata de que el empresario deba repartir nada suyo con nadie, por supuesto, la cuestión es que cuando una empresa se forma se hace sabiendo de antemano lo que ello implica. En lo concerniente a la relación empresario-trabajador, el trabajador está obligado a realizar determinada labor y por ello recibe su sueldo. Los trabajadores y los empresarios tienen, como usted bien ha de saber, una serie de deberes y derechos. Es tan simple como hacer cumplir todos ellos. Cuando usted contrata a una persona, la observa durante un período de tiempo hasta estar seguro de que es el trabajador que necesita, si usted obtiene beneficios con esa persona y continúa el volumen de trabajo, la mantendrá en la plantilla. En el momento que ese trabajador deje de ser productivo la empresa ha de deshacerse de él; si la culpa es del trabajador el deberá asumir su responsabilidad y si fuese porque no hay trabajo para mantenerlo, la empresa lo despedirá acatando lo que dicta la ley. Este és el problema, que cuando se debe despedir a una persona y estamos obligados a indemnizarlo, ya pensamos que el trabajador está robando al empresario. Pués eso no es así señor. Esta cuestión la sabía usted cuando formó su empresa. Mientras que su negocio ha funcionado usted ha considerado que después de pagar los gastos de la empresa todo lo que sobraba era ganancia libre y eso no es correcto; una pequeña parte se debe guardar para estos casos, y no nos llevaríamos las manos a la cabeza tan a la ligera y tan falsamente. En el ámbito más personal me dice usted que monte yo una empresa, lo siento pero yo no sirvo para eso, conozco lo sinsabores de un empresario y opté por pertenecer a la otra parte, que también tiene los suyos. Sólo decirle que yo y muchos de mis compañeros hemos mirado por nuestra empresa lo que ni el dueño en muchísimas ocasiones, y yo lo voy a seguir haciendo, a pesar que en mi empresa no nos pagan a lo que está estipulado el sueldo, las dietas, las horas extras, los desplazamientos, etc., y pensará usted: ¿y porque no se va?, pués porque todas las de mi gremio, que es la electricidad, son iguales. Por cierto, retomando de nuevo el reto de convertirme en empresario, se lo devuelvo sin acritud: pruebe usted a vivir con mil doscientos euros al mes y con la incertidumbre de que pasará el mes que viene.

Soy asalariado,pero hace unos años fuí propietario de una pequeña empresa de alimentación,la cerré porque implantaron justo al lado un mercadona.Invertí en ese negocio todos los ahorros de mi vida,entre local,muebles y genero.Tuve dos empleados con tres años de antiguedad y que despedí con la indemnización que marca la ley,estas dos personas encontraron trabajo poco después,yo también pero con endeudado hasta los ojos.Crees todavía que deben ganar igual los empresarios que los trabajadores,por favorrrrrrrrrrrrrrrr.

¿Pero ustedes no se enteran, no se quieren enterar o no saben leer? Que nadie proclama que un trabajador gane lo mismo que un empresario, es de una simplicidad aplastante; el que invierte en algo sabe a lo que se expone, pero si además lo hace en tales circunstancias que, si la cosa no funciona, se ve en la completa ruina, quizás no debería haber arriesgado tanto. Vuelvo a repetir cuando usted abrió su negocio y contrató a su personal sabía perfectamente las consecuencias que ello podía acarrearle. De todas formas si, efectivamente, usted fue honrado y cumplió con la ley, debería de enorgullecerse. A personas así no son a las que yo critico.

Simple y llanamente, el empresario y el trabajador tienen una serie de derechos y deberes que se reconocen en el Estatuto de los trabajadores y en el Convenio Colectivo aplicable a cada actividad. Los deberes del trabajador de cumplen, pero los del empresario, siguiendo las leyes que nos amparan, en la mayoría de los casos no. El empresario tiene la obligación de pagarle el finiquito al trabajador cuando se extingue la relación laboral, que casi siempre la rompe el empresario, y más en los tiempos que corren.

No hay más, es un derecho del trabajador por los servicios prestados y reconicido en el Estatuto de los trabajadores.

La mayoría de los empresarios no quieren pagar el finiquito, pero para eso está el trabajador, si no se paga, denuncia a Magistratura de trabajo y punto.