Paradas - Sevilla

¿Qué son los transgénicos?

Son alimentos cuyo material genético ha sido manipulados artificialmente. A ese alimento se le añaden genes de una planta, bacteria, virus o animal de otra especie con la que nunca se cruzaría de forma natural. También se puede eliminar alguno de sus genes con el objeto de conferir características diferentes a las que le son propias en función de su especie.
Por ejemplo, se pueden introducir genes de un pez lenguado que vive en el Polo Norte y que por ello resiste temperaturas muy bajas, para colocarlo en un tomate, con el fin de que este se haga resistente a las heladas.
Los transgénicos inundan el mercado mundial

Los alimentos transgénicos han invadido el mercado mundial. Hace seis años, en 2001, la producción alcanzó los 52,6 millones de hectáreas entre soja, maíz, algodón, canola, papa, calabaza y papaya.
Los principales países que desarrollan este tipo de cultivos son Estados Unidos, Argentina y Canadá quienes en el año 2000 sembraron el 98% de cultivos transgénicos a nivel mundial y de los cuales se originan muchas importaciones al Estado español.

España sigue siendo líder en la Unión Europea en el cultivo de semillas genéticamente modificadas. Concentra un 68% de los cultivos transgénicos de la UE. La superficie cultivada con transgénicos asciende a 75.148 hectáreas (53.667 en 2006). El cultivo de organismos modificados genéticamente (OMG) ha crecido en España este año un 40% con respecto a 2006, según datos de EuropaBio, asociación que agrupa a empresas europeas de biotecnología.

Las multinacionales transgénicas

Las multinacionales que controlan el 80% de la biotecnología en el mundo y que producen los transgénicos son:
-Monsanto (Estados Unidos)
-AstraZeneca (Inglaterra / Suecia)
-Novartis (Suiza)
-Dupont (Estados Unidos)
-Aventis (Francia)

Los efectos negativos de los transgénicos

Se ha evidenciado que los trangénicos pueden llegar a producir efectos negativos en la salud, el medio ambiente y la economía.

- Riesgos en el medio ambiente: La disminución de la biodiversidad. Transferencia horizontal (polinización cruzada). Los cultivos resistentes a herbicidas pueden producir supermalezas al cruzarse con variedades silvestres. El uso de plantas que producen insecticidas, en donde se ha insertado el gen de una bacteria, por ejemplo el Bacilo Thuringiensis (Bt) aumentan el riesgo de resistencia a estas toxinas. Las plantas que producen sustancias tóxicas como los plaguicidas pueden presentar riesgos a otros organismos del ecosistema. (como eliminar insectos beneficiosos)

- Riesgos en la salud: Resistencia a los antibióticos. Generación de alergias. Efectos tóxicos Problemas neurológicos y cardíacos. Daños inmunológicos

- Riesgos en la economía: Los campesinos dependen totalmente de las empresas productoras de semillas trangénicas que tienen el monopolio de dichas semillas además de poseer el 60% del mercado de plaguicidas y el 23% del mercado de semillas naturales. Los campesinos no pueden utilizar las semillas más de un año ya que está prohibido por ley y por si esto fuera poco a las semillas se les introduce un gen llamado “terminator” para inutilizarlas. Evidentemente, esto destruye la economía de los campesinos que sufren una gran indefensión frente a las multinacionales.

Siete propuestas de urgencia para defendernos de los trangénicos

1) El gobierno andaluz debe inciar una campaña de información veraz sobre los trangénicos y sus impactos.
2) Establecer el principio de precaución ante los trangénicos, ya que la no evidencia de riesgos no significa la ausencia de estos.
3) Crear una Política Nacional Ambiental y una Política de Biodiversidad que permita la conservación y recuperación de la diversidad biológica de Andalucía.
4) Impulsar la agricultura ecológica como una alternativa ante la invasión de la “biotecnología moderna” en el área agrícola.
5) Cumplir y respetar los derechos de los consumidores en materia de información y elección de los productos que desea consumir.
6) Andalucía debe adoptar una moratoria indefinida sobre los alimentos trangénicos.
7) El gobierno andaluz debe conformar un equipo multidisciplinario entre campesinos, ecologistas, consumidores, profesionales, universidades y otros para analizar y evaluar los daños que los trangénicos producen a los diferentes sectores de la vida nacional.