Desciende la mortalidad por enfermedades del corazón El número de muertes por patología coronaria se ha reducido a más de la mitad en muchos países de la Unión Europea, entre ellos España, donde en el descenso durante los últimos 30 años se traduce en un 36% en hombres y un 39% en mujeres. Así lo revela un artículo que acaba de publicar la revista 'European Heart Journal'. Probablemente, argumentan los expertos, esta disminución se deba a que los tratamientos han mejorado y a que el consumo de tabaco, uno de los principales factores de riesgo, está minorando, "aunque este hábito aún sigue siendo bastante alto en el mundo". Sin embargo, la buena noticia no deja de estar 'sujeta' a algunas reservas, apuntan los responsables de este estudio epidemiológico, realizado por un grupo de investigadores de la Fundación Británica del Corazón, de la Universidad de Oxford (Reino Unido). Las enfermedades cardiovasculares continúan siendo la primera causa de muerte en los países desarrollados y, además, no hay que perder de vista que la carga de otros desencadenantes, como la obesidad o la diabetes, está incrementando significativamente. De alguna manera, "el beneficio del menor consumo de tabaco se ve anulado por la creciente tasa de otras condiciones". Por esta razón, remarca la principal autora de la investigación, Melanie Nichols, hay que "seguir centrando esfuerzos en la prevención primaria, incluyendo la reducción del tabaquismo, mejorar la dieta y los niveles de actividad física". En el desarrollo de patologías cardiacas "hay una parte genética, el 20%, y el resto, el 80%, se debe a factores que se pueden controlar", señala Julián Villacastín, director del Instituto del Corazón del Hospital de Clínico San Carlos de Madrid. Después de analizar la información de la base de datos sobre mortalidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en los últimos 30 años (1980-2009), Nichols y su equipo observaron algunas diferencias entre países, sexos y grupos de edad (menores de 45, entre 45-54, entre 55-64 y 65 años y más). "Mientras hay naciones donde la tasa global de mortalidad por problemas cardiacos parece haber disminuido, en un pequeño número de países esta carga ha empezado a aumentar en el subgrupo de población que no alcanza los 45 años", señalan los autores, asociados también a la Universidad de Deakin (Australia). Por suerte, no es el caso de España, donde el 8%-10% de todas las muertes en las últimas tres décadas corresponden a problemas cardiacos. En Eslovaquia, por ejemplo, uno de los países con peores cifras, el porcentaje oscila entre el 28% (hombres) y el 36% (mujeres). En los hombres españoles, entre 1980 y 1984, se registraban 114 muertes por cada 100.000 habitantes por culpa de las enfermedades cardiovasculares y entre 2005-2009, 74, lo que equivale a una reducción del 36%. En las mujeres, el número de fallecimientos por cada 100.000 habitantes pasó de 51 a 31, es decir, un 39% menos. |