Olivares - Sevilla

Los comerciantes piden cambiar el PGOU para evitar a los «chinos»

Ven amenazado el comercio local con la futura apertura de un bazar de 900 metros

AMPARO BACA PÁEZ / OLIVARES

Día 01/10/2010

ABC

Olivares no quiere comercios «chinos» que arruinen a los de siempre.
Primero fue Alcalá de Guadaíra el municipio del área metropolitana en rebelarse contra la gran proliferación de los comercios chinos. En Dos Hermanas también se siguió esta estela y en los establecimientos locales empezaron a recoger firmas en contra. Y ahora es la Asociación Empresarial de Olivares quien ve amenazado su pequeño comercio ante la próxima apertura de una gran superficie comercial oriental. Por ello, aprovecharon el pleno municipal de ayer para mostrar su temor y solicitar una modificación del PGOU que blinde esta localidad, de unos 9.000 habitantes, de la apertura masiva de los bazares, tal y como acometió meses atrás Alcalá de Guadaíra.
El pleno aceptó por unanimidad apoyar esta postura y comenzar a trabajar cuanto antes para tomar todas las medidas legales posibles para controlar la apertura de este tipo de comercios multiproductos.
Fernando Balbás, gerente de la Asociación, asegura que hasta el momento el pueblo no se ha visto demasiado invadido por las llamadas «tiendas de chino», pero la apertura de esta tienda, que previsiblemente ocupará tres naves de 300 metros cuadrados cada una, supondrá un gran mazazo a la economía local.
«Esta gran superficie afectará directamente a unas 40 ó 50 empresas del municipio y a unos 140 ó 150 puestos de trabajo», explica Balbás, que ve difícil la continuidad de parte del comercio tradicional. «Esta tienda de 900 metros cuadrados puede machacar el comercio local porque tienen una serie de privilegios que la empresa tradicional no tiene», indica. Entre estos beneficios habla, por ejemplo, de «unas obligaciones fiscales por debajo de las nuestras, o libertad tanto en los días de apertura como en los horarios».
Balbás quiere dejar claro que esta actitud no corresponde a ningún movimiento xenófobao o racista. De hecho, afirma que en el centro del municipio las empresas locales llevan tiempo conviviendo con dos tiendas de estas características, aunque de menor dimesión, sin ningún tipo de problema. Pero ahora sienten que la situación se puede agravar. Temen que estas tiendas multiprecios se multipliquen y por ello han tomado distintas medidas.
Manifiesto y petición
La primera de ellas ha sido poner en conocimiento de todo el municipio, a través de un manifiesto, de la situación a la que se puede llegar. Se han puesto en contacto con el Ayuntamiento y con los distintos grupos políticos, a los que han solicitado su defensa del comercio local. También han pedido ayuda a la Cámara de Comercio y a la Confederación de Empresarios de Sevilla para que le asesore sobre las distintas acciones que pueden llevar a cabo; y se han puesto en contacto con la Federación de Industriales y Comerciantes de Alcalá de Guadaíra (FICA), quienes han cedido la documentación sobre las modificaciones del PGOU que se presentó en dicho municipio.
Fernando Balbás indica que esta va a ser la base sobre la que asienten su lucha para evitar la proliferación del comercio chino, limitando las zonas en las que se pueden ubicar y el espacio que ocupan. También van a exigir a las autoridades competentes que actúen sobre estos establecimientos con el máximo rigor posible y siempre en el marco de la legalidad vigente, así como «en tema de horarios, días de apertura, condiciones de seguridad e higiene, control estricto y riguroso de la mercancía vendida», etcétera.
El representante de la Asociación asegura, además, que este tipo de comerciantes no suele revertir su riqueza en el pueblo: «Son trabajos destruidos porque ellos no contratan a nadie del municipio, tampoco suelen consumir ni hacen vida en él».

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