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El ex alcalde e imputado Antonio Fernández teme una revuelta en Argentina

Miedo a una rebelión por el «caso Pinto»

La trama de las casas sociales que terminaron siendo de lujo amenaza con provocar «tiroteos y hasta muertos».

10 Noviembre 09 - Madrid - Marta Palacio Compártelo:

El llamado «caso Pinto» podría ir mucho más allá del Juzgado número 6 de Parla que lo investiga. Tanto que, según declaró al «Zigzag digital» el ex edil Antonio Fernández, imputado en el caso: «Me temo que en Argentina pueda haber tiroteos y hasta muertos».Y es que, mientras que en España la Justicia estudia si los ex alcaldes socialistas Antonio Fernández y Juan Tendero, así como la hija del primero, Patricia Fernández (ex concejal de Hacienda), pudieran haber cometido los delitos de apropiación indebida, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias en la gestión de cerca de dos millones de euros que el Ayuntamiento donó al municipio «hermano» de Pinto (Argentina), precisamente allí, en Argentina, los ánimos están más caldeados.
El problema es que desde allí ya se ha reconocido, como denunció aquí el PP, que las viviendas, que se pagaron con el dinero de los pinteños, no fueron modestas edificaciones destinadas a personas sin recursos como decía el convenio de cooperación, sino que lo que realmente se hizo fueron 18 casas de lujo cuyos propietarios son profesionales de reconocido prestigio y sueldo de la provincia de Santiago del Estero.
La solicitud a la municipalidad argentina del actual alcalde de Pinto, el también socialista Juan José Martín, de la devolución del dinero o la justificación de las cuentas ha evidenciado la falta de información y del control de las subvenciones por parte del Ayuntamiento español y ha despertado todo tipo de recelos en Argentina.
En concreto, el intendente de Santiago del Estero, Guillermo Ganon, declaró a un diario argentino que «lo único que puede ser discutible es que no hayan sido indigentes las personas a las que se les adjudicaron las casas. En realidad se planteaba una casa de tipo social y se construyó con la misma plata otra vivienda. Hemos construido el doble y con mejores terminaciones y materiales que la original. Si pecamos, pecamos por exceso, es decir, por poner más de lo que decía el plano original».
De hecho, una de las adjudicatarias es la hija del intendente Emilio Rached, con el que Antonio Fernández acordó la construcción de las 18 viviendas. Antonio Fernández acusó a Martín Nieto de «irresponsable» y de «falso» por sus declaraciones (exigiendo las cuentas y el dinero a Argentina) «puesto que conocía perfectamente el destino de las 18 viviendas». Lo cierto es que, pese a que Martín ha solicitado la justificación de las cuentas a Argentina, fue su compañero de partido y predecesor Antonio Fernández quien en 2004 aprobó la partida presupuestaria para la construcción en Argentina de las 18 viviendas.