La Roda de Andalucía - Sevilla

El TS obliga a la Diputación a devolver casi 6 millones de euros de los Feder


ABC Rodríguez Villalobos



Domingo, 14-12-08
ABC
SEVILLA. El Tribunal Supremo (TS) ha desestimado el recurso de la Diputación de Sevilla contra la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) por la que estaba obligada a devolver 5,9 millones de fondos europeos concedidos para la ejecución del Programa Operativo de Apoyo a la Pequeña y Mediana Empresa de la provincia por «incumplimiento parcial de las condiciones».

Según la sentencia dictada por la Sala de lo Contencioso del TS, a la que ha tenido acceso Europa Press, queda desestimado «el recurso de casación interpuesto por la Diputación de Sevilla contra la sentencia dictada por la Sección Octava de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJM, "con condena a la parte recurrente en las costas del mismo"».

Así, el texto recuerda que el TSJM ya «dictó sentencia desestimando el recurso promovido por la Diputación contra la resolución de la Dirección General de Fondos Comunitarios y Financiación Territorial del Ministerio de Hacienda, de fecha 22 de mayo de 2003, por la que se declaró el incumplimiento parcial de las condiciones impuestas a la entidad recurrente con motivo de la concesión de una ayuda con cargo al Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder)», en la que se exigía «el reintegro de 5.944.268,26 euros».

Destinatarios finales

En este sentido, concreta que la Mancomunidad del Bajo Guadalquivir «no puede tener la condición de beneficiaria de conformidad con las bases» y que «no se ha probado» la realización del «Estudio Bajo Guadalquivir» «para cuya valoración se concedió la subvención».

Además, apunta que la Sociedad Ecijana para el Desarrollo «no puede ser considerada destinataria final de la subvención al no estar participada en un cien por cien por la sociedad provincial Sevilla Siglo XXI» y precisa que en cuanto al expediente relativo al Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, tampoco puede ser objeto de la subvención «por su superior número de habitantes a los exigidos -entre 1.500 y 8.000-».

También resuelve el TS que «la sociedad Sevilla Siglo XXI es el órgano encargado de conceder las ayudas, pero no puede ser el destinatario de ellas», ya que «se trata de un ente instrumental, participado en el cien por cien por la Diputación, que no puede ser considerada como micro o pequeñas empresas de la provincia destinatarias de las ayudas».

En esta línea, insiste en que «no puede extenderse la condición de destinatario final de las ayudas al Patronato Provincial de Turismo, al no tener la condición de ayuntamiento al que se refiere la convocatoria, ni Sevilla Activa, al tratarse de una sociedad participada al cien por cien por la Diputación, que sería en definitiva la que se beneficiaría de la subvención al ser este tipo de sociedades una forma de gestión directa de los servicios».

El Pleno de la Diputación aprobó el pasado 27 de marzo del presente año con la abstención de todos los grupos de la oposición -PP, PA e IU- un expediente de modificaciones presupuestarias mediante suplementos de crédito y créditos extraordinarios en el que se incluía la partida global de más de 8,9 millones que se depositó para su devolución a la Unión Europea por unos Fondos Feder concedidos en 1998 mientras se resolvía el recurso de casación interpuesto ante el TS.

Durante sus respectivas intervenciones en la sesión plenaria, los tres grupos de la oposición argumentaron su opción de voto y pidieron explicaciones al gobierno provincial en relación con la devolución a la UE de Fondos Feder, que el PP calificó como «uno de los mayores escándalos de la gestión política socialista de Diputación».

Por su parte, el portavoz del PSOE en la Diputación de Sevilla, Francisco Díaz Morillo, achacó la devolución de los Fondos Feder a una «divergencia técnica» y confió en que el Tribunal Supremo (TS) resolviera a favor de la institución provincial en el recurso de casación interpuesto.

Pues claro si este personaje no le da a sus conciudadanos ni un soplo en un ojo. Al final tiene que devolver lo que se niega a dar.

Esto no es todo