Dos Hermanas - Sevilla

Sevilla
Torrijos se niega a contestar en el Pleno sobre la mariscada

Dice que «ya veré cómo y cuándo respondo» y acusa a los medios de intentar influir en la juez

ALBERTO GARCÍA REYES / SEVILLA

Día 03/11/2010 - 07.35h

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La colosal mariscada del primer teniente de alcalde de Sevilla y ex vicepresidente de Mercasevilla, el comunista Antonio Rodrigo Torrijos, con el principal imputado de este caso de corrupción, Fernando Mellet, ha provocado una reacción airada del portavoz de IU contra este periódico. Torrijos asegura que ese «homenaje» se produjo en el marco de la European Seafood Exposition y deja caer incluso que el comportamiento habitual de un cargo público que visita una feria del jamón es comer jamón. Pero la realidad le desmiente. La famosa foto está tomada el 22 de abril de 2008, según los datos registrados por la cámara en la imagen. La comitiva llegó a Bruselas esa mañana a las 9:15 horas en el Vueling directo que hay desde Sevilla. Y al mediodía, tras visitar el Atomium, el conocido «Niño Meón» y la Grand-Place, fueron a la Rue des Bouchers, la calle en la que están los restaurantes más lujosos de la capital belga. Algunos de los componentes de la expedición se fueron a la citada feria a trabajar, por lo que en la ruta turística sólo quedaron siete. Este fue, exactamente, el número de comensales que participó en la ya archiconocida sesión gastronómica. El sitio elegido fue el restaurante llamado actualmente La Bergerie - Mare Nostrum. Como se observa en el mapa, el recinto en el que se celebró la European Seafood y el lugar en el que se llevó a cabo el ágape están a una distancia considerable. Concretamente, a 7,4 kilómetros. La comida, por tanto, no se celebró «en el marco» de la feria del marisco, sino bajo el pretexto de dicha exposición.
Los participantes fueron los cinco miembros de la cúpula directiva de Mercasevilla en aquella fecha y dos mayoristas de pescados: Fernando Mellet y Daniel Ponce —los dos máximos directivos y hoy principales imputados del caso de corrupción—, Regla Pereira —secretaria de dirección ahora también imputada—, Juan Carlos Recio —actual gerente— y Antonio Rodrigo Torrijos —vicepresidente de la compañía— por parte de la lonja pública; José María Morillo y Antonio Vela en el lado de la asociación de mayoristas. Tras la gran comilona, la expedición no se planteó siquiera visitar la feria, situada a las afueras de la ciudad, en la zona norte, junto al famoso estadio de Heysel. Prefirieron subir al furgón alquilado que tenían para moverse por allí y desplazarse hasta Brujas, donde habían reservado las habitaciones, concretamente en el hotel NH.
Ya se sabe, porque ABC lo publicó el domingo, que el resto del viaje consistió en acudir dos horas al recinto ferial el miércoles 23 de abril al mediodía, vuelta a Brujas para pasear por uno de sus canales en barca y desplazamiento a Gante para conocer la ciudad y cenar en el restaurante Brasserie Pakhuis, especializado en ostras, otro ágape que costó 539,50 euros. En esa ocasión pagó el mayorista José María Morillo, como consta claramente en la contabilidad de la asociación de empresarios. De esa comida, por cierto, también existen fotos.
La polémica surge en torno a la gran mariscada. Tres comensales han asegurado a ABC que la pagó Fernando Mellet con su Visa de dirección. «Eran cinco de Mercasevilla y dos mayoristas, ¿cómo iban a pagar los empresarios?». El gerente de la citada asociación, José Ramón Rodríguez Fajó, sostiene «al cien por cien de seguridad» que «los mayoristas no pagamos esa comida» e incluso ha mostrado la contabilidad a este periódico. Pero Fernando Mellet mantiene que pagó Morillo. A través de su abogado, José Manuel Sánchez del Águila, el principal imputado reitera que él no abonó esa comida con cargo al mercado público. Pero ABC le solicitó la misma prueba que a los mayoristas —los extractos de su visa y el libro de contabilidad— y Mellet alegó que él no puede facilitar esa información. Fuentes de la dirección del mercado, entretanto, han filtrado que no hay documentación en Mercasevilla sobre este asunto. Los papeles se los ha llevado el viento.
Así que Torrijos se ampara en ese supuesto vacío. «Tanto si se pagó con dinero público como si no, me niego a que se criminalice algo que es normal», contesta con ambigüedad cuando se le pide que reconozca o desmienta la información. Ayer, ante las preguntas del PP sobre este asunto en el Pleno Extraordinario, reiteró que «ya veremos cómo y cuando respondo», para no dar explicaciones, e incluso acusó a los medios de que «con esta foto y una campaña como esta contra mí lo que se intenta es influir en la Justicia contando lo que haga falta con pruebas o sin ellas». Recuerda, además, que la foto se hizo «hace la friolera de dos años y siete meses» y que «la publican como si fuera de ayer». Olvida que fue él quien la publicó en su blog. Y que hace dos años y siete meses se estaban presentando unas cuentas a favor, con reparto de dividendos, que la auditoría que maneja el juzgado considera falsas. No obstante, él se defiende afirmando una y otra vez que es normal comer marisco en una feria del marisco, pero no desvela que esa comida se llevó a cabo a siete kilómetros del recinto ferial, donde, por cierto, no organizaba nada Mercasevilla. En esa Expo participaba con un expositor la Federación Andaluza de Empresarios de Pescados, a la que pertenecen los de Sevilla. Los miembros de la cúpula de la lonja sevillana fueron para conocer su trabajo. Se gastaron en ello 7.064 euros de los fondos públicos. Y sólo estuvieron allí unas horas de aquella «apretada agenda de trabajo» en la que, sin embargo, tuvieron tiempo de visitar los principales monumentos de Bruselas, Brujas y Gante y de degustar copiosas comidas en sus restaurantes.
Gasto en marisco, ahorro en empleo
La viuda de uno de los prejubilados de Mercasevilla, Emilia Palma, criticó ayer las «barbaridades» que asegura que realizaba la empresa, participada mayoritariamente por el Ayuntamiento de Sevilla, en la contratación de sus empleados con la excusa de «ahorrar», mientras que «se lo gastaban en mariscadas». Así, Palma ha explicado a Europa Press que «hacían contratos de 35 horas semanales para no pagar los fines de semana», con el fin, según relata, de «ahorrar dinero por un lado y gastárselo en mariscadas por otro», en referencia a la fotografía publicada por este periódico. En este sentido, lamenta que «el ahorro estaba solo en los trabajadores».

https://ww.abcdesevilla.es/20101103/sevilla/torrijos-niega-contestar-pleno-201011022203.html