Constantina - Sevilla

Después de la acometida que antes de ayer hizo la UE contra ese pequeño país llamado Chipre, ayer ya daban marcha atrás porque el invento de la señora Merkel de meter en cintura por las bravas a los ciudadanos chipriotas no ha resultado todo lo fácil que esperaban. Es esta una marcha atrás producida por la respuesta de la gente de ese pequeño país, de algo más de un millón de habitantes, y por el resto de la ciudadanía de la Unión Europea, quiénes ante el peligro de cargar con otra medida económica con marcados tintes anti obreros, hemos decidido hacernos notar desde la particular posición de cada cual.

La nueva norma de gravar también en estos casos de rescate económico a los pequeños ahorradores no se llevará a cabo, con lo que las personas que tengan unos ahorros por debajo de los cien mil euros pueden dormir “tranquilos”. Otra cosa distinta sería el caso de aquellos ahorradores que tengan más de cien mil euros, porque a estos sí que les meterían mano en el caso de aceptarse el rescate, cosa que ayer mismo rechazó el parlamento chipriota.

Lo que queda claro ante estos abusos capitalistas, muy claro, es que ellos, con la colaboración de la derecha política y mediática europea, hacen lo que les viene en gana y le meten mano a lo que haga falta con tal de proteger sus anchas parcelas patrimoniales y de capital económico. Pero en este caso un “insignificante” país les ha plantado cara y les ha venido a decir que hasta aquí hemos llegado y que sabemos distinguir entre lo que es un préstamo normal y lo que es un préstamo trampa.

Pero ojo, que esto de dar marcha atrás en sus intenciones de meter mano a las cuentas de los pequeños ahorradores es solo un paréntesis de esta gente para ganar tiempo y montar una nueva estrategia para seguir con su objetivo de desmantelar a la clase trabajadora. Ahora bien, el que lo consigan o no va a depender mucho de la respuesta de los sufridos ciudadanos y ciudadanas trabajadores de la Unión Europea.

De momento, ayer le vieron el hocico al corderito y oyeron el aullido del lobo.