Camas - Sevilla

Canción del ERE

Tribuna Libre

Jueves, 10 de Febrero de 2011 09:37

Escrito por Antonio García Barbeito, en ABC

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Nuestro amigo Antonio García Barbeito (con ilustración tomada de Bernal) ha escrito esta deliciosa e ingeniosa pieza en ABC sobre el ERE o los ERE. "No podía imaginar el mexicano José María Napoleón que cuando le estaba escribiendo a Massiel la letra de la canción «Eres», estaba poniéndole, adelantadamente, letra a un asunto —otro más— de Mercasevilla. Porque aquí pocos son los que pronuncian, con la sonoridad de otros sitios, la letra ese del final de la segunda persona del presente de indicativo del verbo ser, y en vez de decir «eres», decimos, más o menos, «ere», y así, por ejemplo, preguntamos a alguien: «¿Tú ere de güerva?»

Por eso podrían hacer suya esta canción los muchos beneficiados por los ERE en cuestión, que van ya, cuando escribimos, por treinta y siete, otra letra este número, letra de vieja sevillana popular: «si quieres que te cuente las treinta y siete, una y una son dos, y cinco, siete, y siete son catorce, y seis más, veinte, y si sigues sumando, te sale el ERE». De momento. Podrían cantarla, claro, porque estarían locos de contento al ver cómo recibían dineros por algo no trabajado, y, enjuague por aquí, enjuague por allí, visto y no visto.

¿David Copperfield, el mago? David Copperfield al lado de algunos de los reptiles del fondo es un manazas a la hora de hacer desaparecer algo. Al pie del mago famoso se coloca cualquiera de esos que tienen las manos pringadas en el turbio asunto de los ERE de Mercasevilla y se echa una apuesta con él, una apuesta de bravucón convencido de su poder y su fuerza: «Tú, Copperfield de mierda, a ver si tienes riles, como yo, de hacer desaparecer más de mil millones de pesetas sin luces raras ni maquinarias ni trapos…» Que canten, pues, por lo mucho recibido. Que canten, porque la canción de esta gente es, sin duda, «ERE»:

«ERE, por tu forma de darme abrigo, lo que más quiero. / ERE mi ocasión, mi vejez, mi casa, mi coche nuevo. / ERE “pasta” fresca que a mí me saca de ser un tieso. / ERE pelotazo que no esperaba trincar ni muerto. / ERE ese sobre que cada vez más y más deseo. / ERE la respuesta por haber sido tan buen borrego. / ERE solución para tantos gastos como yo tengo. / ERE lo que tanto quise tener y por fin lo encuentro. / ¡Eso y más! / Esas cosas que compartimos como un secreto, / entregándonos sin temores miles de euros. / ¡Eso y más! / Esa paga que llegó a mí como un viento nuevo, / ¡eso y más!, / que callamos para vivir con el mismo cuento. / ERE el anhelo que me ha doblado de pronto el sueldo, / ERE mi razón, más del doble aún de mi emolumento. / ERE la alegría que cada día me pone en alza, / ERE el pastón que engordó mi cuenta sin dar la cara. / ¡Eso y más!» Sí, desgraciadamente, mucho más.