Arahal - Sevilla

Nadie pudo con ellos

Por Luis María Anson



Marcelino Camacho es uno de los hombres más relevantes del siglo XX español. Inteligente, estudioso, razonador, ecuánime, destacó siempre por su valentía moral y por su honradez intelectual. Hizo frente a la dictadura en defensa de los trabajadores y de la libertad. Estuvo siempre contra el gran capital. Trabajó sin un desfallecimiento. Padeció largas temporadas de cárcel y opresión. Fue perseguido y vejado. Pero no le quedaron rastros psicológicos de las tropelías contra él cometidas. Restaurada la Monarquía de todos, que defendió Don Juan III desde el exilio, y restablecida la libertad, Marcelino Camacho fue un hombre clave en la Transición. Afirmado en sus principios ideológicos, contribuyó flexiblemente, bien ayudado por Nicolás Redondo, a hacer viable una transición sin traumas ni violencia desde una dictadura de cuarenta años, fruto de la guerra incivil, a una democracia plena derivada de la voluntad general libremente expresada. Entre mis orgullos profesionales figura en lugar destacado el que Marcelino Camacho dejara el diario entonces gubernamental y se viniera conmigo a escribir en el ABC verdadero. Lo hizo durante largos años con la más completa libertad.

Cherchez la femme de un hombre excepcional y encontraréis a una mujer extraordinaria. Josefina Samper, la viuda de Marcelino Camacho, es todo un personaje por su sencillez, su autenticidad, su fortaleza de ánimo, su pensamiento sagaz. Sin una queja, ayudó al hombre del que estaba enamorada y le acompañó en la penuria, la persecución, la cárcel, las vejaciones, la represión. Después supo estar a su lado en el éxito y el reconocimiento. Como el gran sindicalista, los trabajos y los días de Josefina se han consumido en la defensa de los más desfavorecidos sin una concesión ni una claudicación.

Siento por Nativel Preciado una vieja admiración. Es una profesional del periodismo de primera magnitud. Ha triunfado en la Prensa, la radio y la televisión. Ha escrito excelentes novelas, como Llegó el tiempo de las cerezas o El egoísta. Su nuevo libro, La era del bien y del mal es una obra singular. Conocí a Nativel Preciado cuando empezaba y la he seguido desde entonces sin que me haya defraudado nunca. Ha tenido ahora el acierto de recorrer el viacrucis laico de la familia Camacho. Acompañada por Josefina y por mi querida Yenia, la hija adorada del matrimonio, Nativel Preciado ha pisado con ellos los lugares de la pasión, los trabajos y la vida de Marcelino Camacho. Nadie pudo con ellos es un libro espejo colocado delante de un hombre, de una familia y de una época para reflejar la atrocidad de la dictadura y el sufrimiento de aquellos que luchaban, desde muy diversos campos ideológicos, por la libertad. Durante largos años, tras la guerra incivil, España fue una nación ocupada por su propio Ejército. Nativel Preciado relata la peripecia vital de Marcelino Camacho, que fue perseguido por Hitler, por Franco y por Pétain, que sufrió exilio en África, dónde se caso en Orán en 1948, que trabajó y vivió humildemente en España, que se batió como un bravo por la libertad, que fue encarcelado y humillado y que vivió después años de triunfo y esperanza. Nadie pudo con él. Ni siquiera el rencor y la venganza. Lo superó todo. No olvidó nada pero supo perdonar a cuantos le hicieron daño. Jamás miró hacia atrás como la mujer de Lot. Consiguió evadirse de la nostalgia y de la estatua de sal. Su mirada estuvo siempre clavada en el futuro. Desde una bondad profundamente sentida, Marcelino Camacho fue el abrazo permanente para todos, la palabra constructiva, el ademán solidario, compañero del alma, compañero.

No me voy a referir a los errores que tiene el libro de Nativel Preciado. Me parecen irrelevantes. Lo importante es la contribución que la autora ha hecho a la causa de la verdad, a la causa de la libertad, al reconocimiento de un hombre, Marcelino Camacho, y de una mujer, Josefina Samper, que figuran en la vanguardia de la lucha por la justicia social. Las nuevas generaciones deben leer Nadie pudo con ellos si quieren tener una idea cabal de lo que sucedió en un sector cardinal de la vida española durante la etapa atroz de la dictadura.

Una pena que ni los jovenes nos movamos (si te rebelas esta mal visto) y que muchos eso de leer... cuando hagan la película del periodico de ese dia me la descargo de cinetube