Alcolea del Río - Sevilla

22/04/2013
JOSÉ GARCÍA PÉREZ

El Copo. De Cándido a Cándido, pasando por Pastrana

Debía correr septiembre de 1982, cuando fui enviado, por el PSA, a dar un mitin en un pueblecito de la sierra de Jaén. Llegado al lugar, los tres militantes del partido andalucista me comunicaron que esperaban pocos asistentes al acto porque Cándido Méndez, hoy, ayer y antaño Secretario General UGT, coincidía en horario con la pequeña matraca andalucista que un servidor iba a dar a los sufridos “hijos” de Alejandro Rojas-Marcos.



Y así fue, porque tras los esfuerzos de los miembros del comité local no llegábamos a una docena, incluidas las esposas o compañeras de los esforzados militantes andalucistas, los que nos reunimos para echar un rato hablando sobre el nacionalismo reivindicativo del notario de Casares (Málaga), Blas Infante.



Por aquellos tiempos, el que estas líneas intenta escribir era un “fiebre” en toda la extensión térmica del concepto, de tal forma lo era que, inocente como un palomo, me acerqué para saludar a Cándido en aquel lugar olvidado del mundanal ruido; y el muy “ladilla” estaba poniéndome verde; él obtuvo acta y yo, echándole valor al tsunami felipista, volví al Colegio Público.



Desde entonces, Cándido no ha hecho más que subir y subir hasta llegar a ser lo que es, un ser imprescindible dentro del sindicalismo español que consiguió, y todo, ser líder europeo de la UGT; así nos va y les va.



Pero hubo un momento en que estuvieron a punto de hacerle la cama. La alerta saltó cuando un joven Manuel Pastrana, en una magistral jugada de ajedrez, se alzó con la victoria de la FSP de UGT de Andalucía frente a la lista oficialista de Cándido; corría el año 1995; defenestró Méndez a los que deseaban arrebatarle su mendrugo de “pan”, finiquitó a la FETE y, ya más tranquilo, se sentó en el sillón en el que todavía permanece y, para que todos vieran que era lo que es, elevó a Pastrana a la Secretaría General de UGT, previo Congreso atado y bien atado.



Ahora, a estos días me refiero, el bueno de Pastrana, que está enfermo, ha saltado a la palestra porque, según dice la letrilla negra de algunos medios de comunicación, se ha atragantado con un almuerzo de mariscos en la ciudad de Durban (Sudáfrica) y por la que ha abonado más de 800 euros con su Visa Corporate Oro que poseen, además del carné, los máximos dirigentes de UGT.



Lo que no aclara la “canallesca” es si la contumaz mariscada es debida a la dieta que tiene que aguardar por su enfermedad

PRIMO ESTE HOMBRE ES UN VIVIDOR Y UN CARA como todos los sindicalistas,engañan a todo el mundo con sus hsitorias guerrilleras que ni ellos creen ni entienden,son unos mantenidos del gobierno,esto es solo la punta del iceberg,dentro de los sindicatos se ven cada cosas,mejor ni hablar y te lo dice uno que pertenecio al extremo mas radical del sindicalismo de este país,lo mejor pasar de ellos,yo creo solo en mis manos y quien se preocupa por mi,esta gente son los nuevos parasitos del proletariado.un saludo.DOMINGO RIOS MORENO.

Hola Primo a qui estoy dándole al cayo cómo se suele decir, pero dentro de lo que cabe bien, espero que también lo estéis vosotros.
Bueno primo para que nos vamos a hervir la sangre si al fin y al cabo no vamos adelantar nada so lo nos queda el placer de patalear pero nada más, luego ellos se ríen por detrás y mientra tu te cabreas ellos tiran de tarjeta pero la de “ORO” esa que en una noche se van de farra a una marisquería y se gastan lo que nosotros no ganas en un mes currando, venga mariscos que pagan los tonto que se pelean por nosotros y pagan sin rechistar todo lo que nos comemos, y luego los entrevistan en la tv y tienen toda la cara de decir que eso es normal que para eso son políticos y están en todo su derecho, pero lo que no acabo de entender que haya gente que aun les a poyen, porque solo con los privilegios que tienen, ya quisiéramos nosotros poder disfrutar de algunos de ellos otro gallo cantaría, “ ki ki ri ki “ bueno primo hasta otra aquí estamos un abrazo para todos.

Montero