Alcolea del Río - Sevilla

Furgón de cola.

Yo tenía una caricia adquirida a precio de saldo, un alfajor revenido y agriado del año pasado, un mechero de yesca con rueda desdentada, un almanaque del Cristo de barba en Enero esperando actualizar el calendario…. yo tenía un ciempiés con muletas una oruga de plástico, una hormiga de encina tallada debajo del armario, una bota sin espuela una vela sin barco, una tierra sin profeta un poema sin rima ni poeta… yo tenía un belén de escayola y la mula bufando, un ajedrez de alabastro con rey blanco pasando de largo, una sotana airosa colgada de un clavo, un ramillete de rosas agostadas pacientes de hartazgo…. yo tenía silencios trenzados con palabras rotas, diccionarios bilingües de pausas, quizás una nota, anaqueles de estampas de memorias y de historias, una mesita cuadrada que aspiraba a redonda, una silla baja de enea cubierta de ropa….
Me hizo un favor, me hizo su esclavo… ya no quiero favores, ¡ ya pago al contado ¡, y si quieren los míos los tienen sin interés ni embargo, no esperen de mi pedir algo a cambio, si no puedo lo digo y si puedo lo hago…. me subieron a la cumbre y de allí me tiraron, me llenaron de besos de esos que no se llegan a darlos, me cubrieron de regalos con el fin de hacerme manejable y barato, me pedían discreción y buenas palabras a la par que sus vicios obscenos hablaban, como sí como no, poco caso les daba….
Yo tenía mi primera forma de ser pendiendo de un perchero, una idea muy vieja de toda la vida que ya no servía, una mesita de día atrapando la noche, un candelabro de pie sin horma ni calzado, una maleta de palo y piel de cortina, una montaña de libros diversos de cuando leía….
Me pusieron esposas de carne, grilletes de sangre, un leal manijero, para la cena ya era muy tarde, mejor la merienda,…me asignaron un número por toda naturaleza, un camastro vencido, un pijama picasiano a cuadros y curvas, un punto y final y dos rayas, una toalla que un día fue blanca, unas migajas de pan y un vaso con agua salada…..
Al pasar de los años me habitué al paisaje, me acostumbré a negarme al alba, el sol, la luz y el aire, me deshice del hablar del sentir del pensar que juzgué como lastres y al final conseguí que me cambiaran el número por “ Nada y Nadie “.

Saludos a todos
Manuel Navarro

La verdad que es buenisimo MANUEL se ve que tus escritos no estan carentes de personalidad te felicito.DOMINGO RIOS MORENO..

!magnifico y duro a la vez¡

Saludos

Te felicito manuel,manuel,sublime tu escrito,como dice publio, tan bello y tan duro a la vez,desgraciadamente muy real,enhorabuena manuel!!

Conmovedor .
Reflexivo y sereno, llamando a las cosas por su nombre, como solo en la madurez emocional puede hacerse.
Valiente.
Sin pudores, ni máscaras innecesarias, que solo al de enfrente engañan.
Autentico.
Florituras y adornos no hacen falta, cuando la verdad, con toda sencillez,
se pasea por una página.

Muy bueno Manuel.
Gracias.
Pepi Valero