Villalba de Guardo - Palencia

LAS TAREAS EN FEBRERO

No eran muy distintas de las de enero. Si acaso, si se habían vendido las patatas se limpiaba la patatera y se preparaban las de siembra. Que solo valían para dos años y eran las más pequeñas.
Se acababan de limpiar los arroyos de riego y se daba el último repaso a los prados
Y si la leña no era suficiente se podaban algunas cercas y se preparaban los frutales con la poda, antes de que comenzasen a brotar de nuevo
Era pues un mes más bien de descanso y relajado porque a partir de él las tareas iban a más cada día
Para los niños era el final de los juegos de nieve y de hielo porque los días iban siendo más largos y el frío menos intenso Por lo general al final del mes llegaba el “Antruido”, es decir el carnaval y eran días de alegría con los “maramitas” Costumbre que yo sólo recuerdo una vez y hoy está perdida pero que era muy bonita y algún día os contaré, ya que los niños éramos bastante protagonistas
Hay una cancioncilla que los niños del pueblo aprendíamos de los meses que decía: treinta días trae septiembre, con abril, junio y noviembre. Los demás a treintaiuno, salvo febrero “el mocho” que sólo trae veintiocho y cuando es bisiesto veintinueve

REFRANES
Antes de nada deciros que hubo uno de enero que se me olvidó
El pez y el berro, cómelo en enero

(Ya sabéis que en los cuérnagos, lagunas y arroyos de las fuentes hay unos berros deliciosos y tiernos que en ensalada están muy buenos)

En febrero busca la sombra el perro
Árbol podado en febrero tendrá fruto duradero
La flor de febrero no llega al frutero
Febrerillo “el corto” ningún día se parece a otro
En febrero un rato al sol y otro al humero
Lluvias en febrero ni buen pasto ni buen frutero
Si no llueve en febrero ni trigo ni centeno
Si no llueve en febrero ni buen pasto ni buen prado ni buen centeno
La lluvia de febrero es el mejor estercolero
En febrero la castaña y el besugo no tienen jugo
Cuando llueve en febrero, se llena el granero
Mal año espera, si en febrero anda en mangas de camisa el jornalero
Por febrero sale la lagartija de su agujero