Riogordo - Malaga

Las tenemos a miles. Es decir, que aquí mismo, en España, hay montones de gente atacada de gilipollez. Pero una gilipollez muy selectiva, sectaria y calculada, hacia todo lo que huela a tradición, costumbres y -por qué no decirlo- cultura. Gentucilla que ronda la treintena (ni la niñez ni la madurez), que no han tenido que dar un palo al agua en su vida, ya que han vivido siempre mantenidos; que no han estudiado porque no les ha dado la gana ("hoy todos pueden y la mayoría no quieren; cuando casi nadie podía, todos queríamos") y que -su número aumenta- "aspiran a vivir de los padres, hasta que puedan hacerlo de sus hijos". Esta coletilla, hace años tenía gracia porque sonaba a chiste o chascarrillo; hoy se ha convertido en un hecho palpable.
Y toda esa ganadería, se proclaman ateos (con respecto al cristianismo en general, y al catolicismo principalmente)... pero defensores, cuando no neoconversos, a otras tendencias -llamémosles- religiosas. Aquí, ni cuando más oscurantista era la vida, se sermoneaban semejantes disparates desde los púlpitos:¿Esto es lo que defienden hoy los "guays, enrollados y progres"?... ¿Pero de qué leches pretenden darnos lecciones, los que no tienen ni barba cerrada)

Mira por dónde, de todos lados se aprende... Gracias a este predicador, santón o como se le llame, me he quitado una espinita que tenía. Yo nunca he visto "Bob Esponja", ni tengo la mínima idea; tal vez será que ya no tengo edad para ver series de dibujitos animados. Pero este de la chilaba, me ha echado una mano y ya sé de qué va. Lo que no sospechaba es que una serie de dibujos animados diera para tanta "filosofía"...

Contradicciones gilipollescas, estupideces variadas... y desubicación clara y anacrónica. Todo esto, junto en una sola persona, explica la situación en la que ha dejado a su partido (PSOE):

Al final, simple victimismo para tapar y encubrir su propia inutilidad e incompetencia:

Aunque no conozcamos a ninguno especialmente "tocado por la varita mágica de la suerte", al menos entre nuestros conocidos más cercanos, pues al parecer, los hay. Pero eso sí, todos, además de vivir (de habitar) muy lejos de nosotros, tiene que tener unas "dedicaciones especiales" (la política principalmente) y unas "relaciones señaladas" (como ún sindicato mayoritario, pongo por caso). Y así, la verdad, hay muy poquitos en nuestro entorno cotidiano y habitual:

Trastorno bipolar "de libro": Látigo para fustigar sin piedad a todos los contrarios "políticos" (al menos, es la excusa), pero guante de seda y buenismo total, en cuanto a las "pequeñas corruptelas" de su mismo bando. Claro que esta tipa tiene ya cierto grado de "experiencia familiar", como ya se vió hace poco más de un año, en el municipio de Rivas-Vacia Madrid:

Cualquiera que sea -no digamos ya si "aspira a ser"- personaje público (sobre todo si se piensa dedicar a la política), debería tener muy presente (desde bastante antes de darse a conocer) el axioma de "la mujer del César": "No sólo tiene que ser honesta, sino que además, debe parecerlo". Porque en caso contrario, sobre todo si te has dedicado a "no dejar títere con cabeza", te vas a tener que tragar cada sapo "que no se lo salta un gitano con alpargatas nuevas". ¡Y por "méritos" propios!

Lo suscribo plenamente. ¿Cómo no, si es lo que digo yo, personalmente?
Estos cenutrios deberían hacérselo mirar, porque su caida (la pérdida contínua de votos) no es nueva. Ya le ocurrió a IU (ahora sus "socios"), que por culpa de soltar siempre el mismo disco rayado, sin querer darse cuenta de que los tiempos han cambiado, aunque ellos sigan anclados en ideras más que caducas, muertas y enterradas; desde hace al menos 80 años.
Y lo peor es que como "payasos", ni tienen ni put. gracia:

"Retratando" al mastuerzo polifemo "que no se sabe para dónde mira, ni qué leches ve" (Fernando Trueba). Prototipo de espécimen que practica, con más frecuencia de la debida, todo un cúmulo de contradicciones gilipollescas:

Lo que son las cosas: yo, que me siento porque lo soy -además de no quedarme otra- español, andaluz, malagueño y panzón (esto último es más bien por sentimiento que por biografía); a mí, que de vez en cuando pienso (ejercicio muy recomendable, si no se abusa), he acabado por llegar a la conclusión de que semejante "caricatura de ser humano" (como tantos más), tiene semejante cacao mental porque no ve nada claro, fijo ni seguro. Así que no me extraña lo más mínimo. Pero si a toda esta patulea les cortaran el "suministro", lo mismo se ponían las pilas... y hasta serían capaces de hacer una obra cinematográfica de valía y mérito.
Por mi parte, si soy el ministro, sin decir palabra alguna, cojo el premio y hago "mutis por el foro". Si se corta el chorreo se acaban muchas tonterías. Todas, del tirón.

El Trueba, tan "guay", enrollado, progre y tal, ahora resulta que no entiende por qué cae como un escupitajo en un ojo...
Este tipejo tiene las entendederas como la vista: despistadas totalmente.

¡Anda, la leche...! ¡Ahora sale con que "lo decía en tono humorístico"...! Pues mira (es una forma de hablar), si el sentido del humor sabes que lo tienes como la vista ("y tú lo sabes"), dedícate a hablar en serio, porque para decir y soltar gilipolleces, ya "pueden" hacerlo otros.
Pero vamos, que una vez metida la pata hasta el corvejón, difícil arreglo tiene eso (¡que se te ha entendido todo el inglés!):

Para semejante "arreglo", mejor lo hubiera dejado como estaba. Si el humor es incapaz de hacer gracia (simplemente porque no la tiene), se queda únicamente en "malafoll´ª" gratuita. Y ahora, recurre a la tan manida "libertad de expresión"...

Ya sabemos cómo se les llama a quienes tienen "contradicciones gilipollescas". Y aquí, en nuestro pais, en España, los tenemos a porrillo. Y desde que irrumpieron los de la "neocasta", su número ha aumentado casi hasta el desbordamiento general...
Pero a lo que iba: Estoy ya hasta los "cojodorcios" (y sospecho que no soy el único, precisamente) de "libertadores de impresentables", que exigen (presidiendo las manifas) "libertad, igualdad y fraternidad" con los ilegales (aunque se les llame "indocumentados"; los indocumentados -por no haberse "documentado" previamente- son los "exigentes de derechos humanos", que en cuanto acaban de gritar en la manifa, se van a sus chalets (vigilados por personal de seguridad y cámaras de videovigilancia); y la "morralla", pa los otros. ¡Anda ya y que os den...!

Los puntos, sobre las "íes":¿Cree alguien que por más claro que se lo digan, les va a servir para algo?... Hoy por hoy, la verdad, para nada. Ya se sabe lo que pasa "cuando un tonto agarra un camino"... (que el camino se acaba, pero el tonto sigue). Pos eso.

Está visto que (no sólo en España, sino en prácticamente todo el mundo civilizado -aspirantes a seres humanos aparte-) uno de los mayores problemas del mundo de hoy es el exceso de tiempo libre. Por eso hay tantas "comidas de coco, comidos del tarro" y cenutrios cretinos diversos (y "diversas", por supuesto).
Sólo así se explica tanta gilipollez "ideológica" (que proviene de "idea"; y para tener esto, es imprescindible poseer un cerebro medio bien acondicionado):

Lo que pretenden esta gente tan "rarita": que incluso para estornudar, tengamos que nombrar a... toda esta patulea, que no saben ni lo que son en realidad:

Quien tenga problemas, que los solucione; pero que se dejen ya de tanto dar la vara y marear la perdiz, que tanta estupidez ya, cansa:

Poniendo las cosas en su sitio: Hispanoamérica, sí. E incluso Iberoamérica (por incluir Brasil y demás antiguas colonias portuguesas); ¿pero Latinoamérica, de qué...? Una estupidez, largada por un "pelota" colombiano a Napoleón III, para "meter con calzador" a Francia:

Hay que ver... Con lo fácil y práctico que es respetar y dejar vivir a los demás, hay quienes no lo entienden. Y para colmo, ni son naturales de aquí. No todos, por supuesto; pero el que nace para pegar cornadas a diestro y siniestro, es muy difícil (imposible, diría) que sirva para vivir en sociedad. Y lo que está muy claro es que quien venga, tendrá que aceptar nuestras costumbres y modo de vida; que lo comparta o no, será su problema en todo caso...

Una cosa es analizar en profundidad la Historia y, otra -totalmente distinta- es negarla por sistema, intentando crear otra paralela para acomodarla a la conveniencia de los que no tienen la más mínima idea de la misma. Aquí, y también fuera de España: