Riogordo - Malaga

Bien...."PODEMOS"....

Al fin los españoles, nos hemos dado cuenta, que el partidismo que existia, se tiene que extinguir.La pluralidad que se ha establecido, da que pensar, que algo está cambiando. Las elecciones generales, se presentan interesantes. Habrá que que ver. Si la tendencia, que habia, se viene abajo.¡¡O, si!! . Lo que ocurrio ayer noche, es el principio de un cambio.La única realidad que existe, es qué. Algunos han tenido que reconocer su derrota.....

Yo me apunto al cambio.....

"PODEMOS"

Saludos panzones......

Por mi parte, si algo tengo medio claro (no me creo en poder de la Verdad Absoluta) es que lo que de entrada parece un hecho positivo, en cuanto pase un tiempo (y creo que a muy corto plazo) las aguas volverán a sus cauces habituales. Eso sí, muchas caras "muy conocidas hoy" están llamadas a desparecer del espectro político. Al tiempo me remito.

Nada sé de este nuevo protagonista que ha irrumpido de repente en el mundo de la política; pero por lo que he oido del mismo, lo que me atrevo a asegurar es que no me puede inspirar confianza alguna ciertas manifestaciones suyas de hace relativamente poco, en el sentido de "alabar el camino de ETA, que pese a haber acabado el franquismo continuaron matando y asesinando, porque eran el mismo perro con distinto collar"...

Manifestaciones así creo que le quitan la ilusión a cualquiera. Eso se puede llamar "el cambio para que nada cambie". Me huelo que más que un cambio político en firme se trate más bien de un "quítate tú, que me ponga yo". Mucha utopía, mucha palabrería, mucho sacudir el árbol, pero en cuanto empiecen a cobrar sueldos de nivel europeo, es de temer que todo el sueño tan bonito e ilusionante que han vendido termine como la peor de las pesadillas.

¿Seré un simple aguafiestas, o se tratará de lucidez contrastada? El tiempo tiene la palabra. Como siempre... y ojalá me equivoque (que bien lo quisiera yo).

En un primer análisis muy superficial, se comprueba al primer golpe de vista que el número de los extremistas ha ido aumentando. Y como los extremos se tocan, al final todos van a converger en el mismo punto: completamente en el polo más opuesto a la realidad.
Este fenómeno es muy propio de ciertas edades (entre los 18 y los 25 años); luego ya, los años -y la vida- van volviendo las aguas a sus cauces naturales (salvo en los casos de mala intención congénita).

De todas formas, no hay que confundir unas elecciones al parlamento europeo con unas nacionales (sean éstas generales, autonómicas o locales). En las europeas se suele dar rienda suelta a las frustraciones de los distintos paises.

En fin, el tiempo tiene la palabra. Como siempre.

¿Soy yo solo el que está ya hasta los capadocios de esta nueva, pujante y naciente (hasta en la sopa, oiga) "casta política de nuevo cuño con ideas trasnochadas" que nos ha salido? ¿Soy sólo yo?
Y conste que lejos de mi ánimo defender a quienes hemos tenido hasta ahora, desde hace ya más de 35 años. Aquí "se lo han llevado por la jeró" hasta quienes no han estado cerca de la caja, como son en Andalucía los casos de ciertos "sindicatos mayoritarios de clase", que no han necesitado ni arrimarse al ascua para llevarse la sardina (es un decir; las sardinas no suelen entrar en el catálogo de mariscos "con pedigrée". Mariscadas millonarias -aunque en antiguas pesetas, eso sí)...
No, ya digo que no voy a intentar defender no sólo lo indefendible, sino además condenable.

Pero desde las elecciones europeas hasta la presente, en todas y cada una de las cadenas de radio y televisión, los nuevos arribistas no paran de ponerse ya un poquito (bastante) pesaditos -y pesaditas, que el surtido está bastante equilibrado-, dando la tabarra con unos temas que a la inmensa mayoría de los españoles no nos producen ni frío ni calor: nos resbalan, simplemente. Aunque ya se sabe que 50.000 vociferantes se hacen oir mucho más que 30.000.000 callados (bueno, callados no; hablando y discutiendo en un tono razonable... y de temas razonables). Esos temas nos preocupan a todos los verdaderamente indignados, pero educados y cívicos. A quienes no quemamos contenedores, ni rompemos escaparates de tiendas y bancos, no quemamos coches ni destrozamos el mobiliario urbano (que es de todos), ni nos tapamos la cara cuando hay que protestar en serio.

Me sigo temiendo que estos que han llegado nuevos, aunque van de "licenciados en Ciencias Políticas", su idea de la Política está como en una nube (pero sin el "como").
Me estoy oliendo que lo que más claro les ha quedado de sus estudios es la definición de la Política que si no la acuñó personalmente fue el que la dio a conocer, Groucho Marx (también "marxista", pero no en serio), cuando soltó aquello de que "La política es el arte de buscar problemas, contrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados.

Como vemos, muy "marxista"; no podría ser de otra forma...

De verdad que hasta cierto punto, me logra enternecer la candidez de mis conciudadanos. Candidez que muy bien, probablemente, pudiera ser fruto del cabreo, la impotencia y el hartazgo de trincones de todo signo, color y condición. Aquí se han forrado hasta los que no han estado cerca de la caja (sindicatos mayoritarios y demás).
¿Pero es que alguien esperaba cambios serios y en firme? ¿A estas alturas, todavía? ¡Si somos españoles! (Y los que dicen no sentirse tales, los peores con mucha diferencia)...


Esta fórmula del representante de "Podemos" me ha recordado lo que en el Siglo XIX contestó el alcalde de cierto pueblo -para qué dar el nombre-, a la carta enviada por el gobernador civil de la provincia, en la que le mandaba el texto de la nueva Constitución, "para que la tuviera expuesta en lugar visible": -"La nueva Constitución ha sido colocada en lugar bien visible de este ayuntamiento" -contestaba el alcalde-. "Así como colocaremos todas las futuras Constituciones que nos sean enviadas"...

Bueno, el de "Podemos"... y el resto de marginales (que no "marginados").
¿Y estos son los que aspiran a gobernar este pais? ¡Virgencita, déjanos como estamos...; que estamos muy apretados, pero al menos aún no hay muertos por las calles...

Y conste que no lo suelto en plan chirigota, ni por hacer gracia. La situación es grotesca, todo lo más, pero no tiene ni puñetera gracia (al menos, vista desde dentro)...

Aquí se nos pone al tanto de los primeros momentos de este "neoseñorito universitario, aspirante a dirigir nuestro futuro". Interesante. Muy interesante. E instructivo, para quienes no se tragan ya trolas de ningún "salvapatrias de nuevo cuño". Un personaje que, en su ego tan enormemente abultado, "no puede reconocer, estar de acuerdo, ni acatar la Constitución, porque no la votó"...


Me imagino (no sé por qué) que este periodista -Enrique Riobóo-, tras la ruptura de su relación televisivza, para él formará parte de la "casta".

Algunos momentos de "iluminación" de este personaje y sus adláteres:


Ya se ve el "talante abierto, dialogante y comprensivo" de esta nueva casta política...

Algunos asuntillos... "no del todo claros", que atañen directamente a este recién nacido partido (una cosa es predicar y otra las acciones de los propios predicadores):

Claro, otro ataque frontal de "la casta"... Pero lo cierto es que a ninguno de nosotros nos han pillado "con el carrito del helao"; por algo será. ¿Alguien más sabía de esa convocatoria? Pues entonces.

Y a continuación, una clase (una más) de "realismo económico"; que el dinero no crece y cae de los árboles; y al final, nada es gratis total: