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DE MOMENTO, EL JUEZ CARECE DE PRUEBAS CONTRA ÉL
La UMP califica de 'ridícula Justicia-espectáculo' la acusación contra Sarkozy

05 JUL 2012 | CARLA SARABIA. París

El expresidente de Francia puede ser llamado a declarar en los próximos días. Buscan pruebas que lo relacionen con el caso del escándalo de financiación electoral ilegal.


Las reacciones ante la investigación judicial del escándalo L’Oréal que afecta al ex presidente de la República Nicolas Sarkozy se suceden en Francia. Los políticos y los medios de comunicación están manifestando su opinión al respecto, a la espera de conocer si finalmente el juez Jean-Michel Gentil convocará al ex presidente para que preste declaración.

Los registros efectuados en el domicilio parisino y en los despachos de Sarkozy revelan una “Justicia de espectáculo totalmente ridícula”. Así de crítico se mostró el diputado de la Unión por un Movimiento Popular (UMP) Christian Estrosi. El ex ministro de la era Sarkozy calificó de “mediocridad” el hecho de que la Justicia haya esperado a que “Sarkozy se vaya de vacaciones para ir a registrar a sus espaldas”. Este comportamiento “cuestiona”, en palabras de Estrosi, “la realidad de la Justicia de este país”. En defensa del ex presidente, el diputado del partido de la oposición afirmó que “Sarkozy es un hombre íntegro y totalmente transparente”.

Entre otras reacciones, el ministro del Interior, Manuel Valls, afirmó por su parte que “Sarkozy ya puede ser juzgado como cualquier otra persona”. “Este asunto nos afecta a todos”, declaró Valls, que considera que “la Justicia debe cumplir con su obligación”. “Vivimos una crisis económica, pero también moral”, aseguró el ministro.

Desde las filas de la oposición se han tomado el asunto con bastante indignación, puesto que se trata de la primera vez que se registra el domicilio de un ex jefe de Estado, precisamente cuando François Hollande y su equipo no atraviesan sus mejores momentos en cuanto a popularidad se refiere. El diputado de la UMP Eric Ciotti explicó que el ex presidente “no tiene nada que temer” en el affaire Bettencourt. “Está tranquilo y sereno porque el tiempo y la evolución del proceso demostrarán la ausencia de implicación”, aseguró Ciotti en la línea de lo que ya argumentó el abogado de Sarkozy, Thierry Herzog.

Por otro lado, el asunto ha planteado la cuestión de la imparcialidad de los jueces y su relación con la política. Sobre este punto, el periodista del semanario L’Express Christophe Barbier defiende la labor política de los magistrados porque considera que son los encargados de que “se respeten las reglas de la República”.

Tras la inspección judicial realizada el pasado martes, la Policía de la Brigada Financiera no se llevó ningún documento del domicilio, del despacho de abogados, ni de la actual oficina de Nicolas Sarkozy. Sin embargo, el juez sí posee su agenda del año 2007.

Inexistentes

La Justicia está examinando si hay pruebas que demuestren la presunta implicación del ex presidente en el caso de la supuesta financiación ilegal de la campaña electoral. Concretamente, se investiga si es cierto que recibió 150.000 euros de donaciones de parte de la heredera de la firma L’Oréal, Liliane Bettencourt, para su campaña. La defensa insiste en que la investigación en curso “demostrará” que el ex jefe del Estado no está implicado en uno de los mayores escándalos políticos del país.

En cuanto a los riesgos a los que se enfrenta, desde que concluyó su inmunidad presidencial Nicolas Sarkozy puede ser juzgado. El juez podría, por tanto, convocarle para declarar como testigo o como imputado en los próximos días. Pero, para que pueda ser condenado, la Justicia deberá encontrar primero pruebas concretas contra el ex presidente francés, que hasta el momento son inexistentes.