Pezuela de las Torres - Madrid

Queridos vecinos, después de un largo viaje por las cuencas del Orinoco y Amazonas en busca de los orígenes de nuestro simpático huésped el piraho, cuyos seudónimos son ZZborriquin-el8ª Mandado hoy llamado Icoño o Ichatte como bien le denominarían en el Boulevard de Clichy. He llegado a la conclusión, que quizás mi viaje haya sido innecesario. ¿Porqué digo ésto? Él mismo nos está trasmitiendo sus orígenes, y yo cegado no supe entender sus comunicados.
Sí amigos, en un acto de generosidad suprema, para que le acojamos sin reparos, nos explica su origen:
El nos dice que con los lodos vertidos en Pezuela llega cualquier ser vivo y microscópico, hasta ¿HELEMINTOS? Y afirma ante el apunte que le indican, que incluso espermatozoides, y nos muestra en un acto más de generosidad, imágenes de los mismos. ¡Ahí es donde están sus orígenes! ¡Ciego de mí! ¡De ahí tanta inquietud mostrada por los lodos! ¡Cuánto ha tenido que sufrir el pobre en su afán de comunicación!
Ante este hito se abre un nuevo debate:
•¡De aquellos polvos vienen estos lodos!
•En un retoce incontrolado por los páramos de Pezuela hubo una contaminación con un espermatozoo procedente, y nunca mejor dicho, de los fertilizantes usados.
•Simplemente hubo un tropiezo en un paseo, quedando expuestas las zonas intimas a tierras que previamente habían sido tratadas con lodos, cuyo origen no fue controlado y procedía de alguna letrina, usada en demasía para satisfacer pasiones carnales (cuartel, convento, etc. etc.).

Ante este nuevo hallazgo el trabajo que me encomiendo es arduo. Un trabajo meticuloso y nunca mejor dicho: “de campo”. Me toca explorar, palmo a palmo todos los campos y páramos de Pezuela en busca del espermatozoo, similar al que dio origen a nuestro huésped (en français, Ichatte). Una vez hallado. determinar la letrina de procedencia, para después tratar de averiguar la parte paterna de nuestro amigo.

He de añadir que ante la información, tan generosamente mostrada por nuestro huésped, recomiendo a todas las ciudadanas de Pezuela, que en sus paseos por los alrededores, además de ir provistas de insecticidas, antivirales y bactericidas, no se olviden los espermicidas.