Cubas de la Sagra - Madrid

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; la ministra de sanidad, Ana Mato; el ministro de justicia, Alberto Ruiz-Gallardón; el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo; y algunos líderes autonómicos de la derecha como Javier Arenas, Alberto Fabra o Rita Barberá se han significado hoy acudiendo al funeral de Manuel Fraga Iribarne. Todos ellos han reconocido su filiación y su lealtad al movimiento.

El fallecido líder de la represión franquista, ha sido calificado por el arzobispo de Santiago, Julián Barrio como “una persona de bien”, ante la inoperancia de la justicia. Además, el religioso, ha invocado la misericordia de Dios para que sea “compasivo” con el líder de la represión franquista, quien según el arzobispo “siempre defendió los grandes valores de la civilización occidental de Europa”. En la homilía pronunciada contra el sentido común por el arzobispo, éste ha enviado a Fraga “el agradecimiento, afecto, estima y oración” de todos los presentes”. El arzobispo lanzó más intentos de tapar la verdadera historia de Fraga diciendo sobre él que “sirvió a España con dedicación generosa y honradez admirable.

El funeral de Fraga, ese represor franquista y enemigo de las libertades individuales ha estado decorado con la actuación de alrededor de300 “gaiteiros” que, desde la Plaza del Obradoiro, han despedido a “Don” Manuel con el viento fresco de sus gaitas.

Miles de curiosos se pasaron por la Plaza del Obradoiro para confirmar que “Don” Manuel, efectivamente, se ha muerto.

Los llantos de sus familiares y devotos no pudieron silenciar los llantos de cuantas personas y familias fueron reprimidas directa o indirectamente por este personaje histórico cuyos actos nunca fueron medidos por la justicia.

Campaña de amnesia

Simultáneamente al homenaje al líder de la represión franquista en que se ha convertido el funeral de Fraga, se celebró en la alameda compostelana la manifestación “Programa Festivo y Popular de despedida de Fraga”, bajo el lema “Fraga fue un fascista”. A diferencia de la homilía del arzobispo, la marcha cívica y festiva transcurrió bajo el control de la policía, que desplegó un fuerte dispositivo por toda la ciudad.

Estos actos de celebración por el fallecimiento del represor franquista pretenden criticar lo que Candidatura do Povo califica de “campaña de amnesia”, que se viene reproduciendo desde su muerte al obviar en las alabanzas a Fraga su participación necesaria y decisiva en el aparato de represión de la dictadura franquista.