Tremor de Arriba - Leon

ESTO SE ACABO, LA PUNTILLA QUE LE FALTABA A TREMOR, LO POCO QUE QUEDABA SE VA. BRUSELAS YA NO PAGA PERDIDAS, EL CARBÇON NACIONAL NO RESULTA RENTABLE, SE ACABO LA TETA DE QUE MAMAR, Y COMO SIEMPRE LOS POBRES TRABAJADORES PAGAN EL PATO, Y LOS CACIQUES Y EMPRESARIOS SE ESCUDAN EN ELLOS Y LOS UTILIZAN EN SU BENEFICIO, JUEGAN CON LAS FAMILIAS Y SU SUSTENTO.

TREMOR ESTA YA MUERTO QUE IMPORTA ESTO ES SOLO EL REQUIEN.






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La humedad y el frescor que desprende una de las cuatro entradas del pozo Casares, en la localidad berciana de Tremor de Arriba, hace imaginar una pequeña percepción de lo que pueden vivir y sufrir los mineros que allí abajo trabajan, pero nada comparable a la realidad que soportan a diario en un inmenso laberinto de túneles unidos por raíles y cintas que transportan el carbón. Sin embargo, lo lógico es entrar, cumplir con la jornada diaria, y salir a ver de nuevo a la familia y amigos.

Pero este viernes es diferente en el pozo. En total, 13 mineros cumplen ya su quinto día de encierro, a casi 250 metros verticales de la superficie, en la quinta planta, donde la humedad es muy alta y se introduce por el cuerpo que causa una sensación que parece alcanzar los huesos. Protestan por el abandono que, según ellos, sufren por parte de la Comisión Europea, el Gobierno y los sindicatos. Por ello aseguran rechazar las recomendaciones de las centrales sindicales en Madrid de que abandonen la protesta, y dicen que sus únicos interlocutores son sus “compañeros” delegados, cuatro en total, que trabajan junto a ellos en la mina. Para ellos, es “triste y penoso” que tras cinco días “nadie haya tenido la dignidad” de ir a visitarlos.

Los españoles Ángel Morato, Manuel Ramírez, Constantino Chico; los portugueses José Luis Félix Tafulla y Pedro Leite; y los polacos Jan Anfreij, Roman Karawoki, Darius Sajdek, Zenon Barcik, Piotr Powel, Augustin Korpok, Wieslaw y Dominik Dziubuj, éstos dos últimos padre e hijo, se encuentran “bien, con fuerza para seguir y muy unidos”. Junto a ellos estaba hasta ayer el caboverdiano José Antonio Duarte, quien se vio obligado a subir por problemas respiratorios.

Los 13, “unidos”, amenazan con recrudecer la protesta ahí abajo si la Comisión Europea no firma el Real Decreto por la Garantía de Suministro, porque creen que se les “está tomando a broma y esto no es un juego de niños”, señala el español Constantino Chico, quién retiene su ira contra los culpables de la situación por la presencia de los medios de comunicación.

A pesar de ello, alguno, como el luso Pedro Leite, se atreve a decir que le “zamparía dos 'hostias' con una piedra de carbón a Zapatero si le tuviera delante”. Y es que es al presidente del Gobierno al que más acusan los trabajadores de la situación, porque creen que miente y que no ha pagado el dinero pactado a los empresarios Vitorino Alonso y Viloria, compañía esta última a la que pertenece el pozo Casares, en el que trabaja un centenar de mineros y que extrae anualmente 100.000 toneladas de carbón, mucho del cual, el de tipo térmico (el más fino), se encuentra apilado en Tremor a la espera de darle una salida.

Los trece mineros encerrados en el pozo ‘Casares’ en Tremor de Arriba. (Foto: Ical)

Una de las formas de acentuar la protesta sería “parchear los túneles y atar las carras en los que bajan la comida todos los días”. “Y nos quedamos aquí hasta que vengan a buscarnos. No nos importa nuestra salud ahora mismo, sino el futuro que depende del trabajo”, advierte Leite, quien ha vivido en Bembibre la mitad de su vida a pesar de sus 35 años. No quieren sólo que se les abonen las dos nóminas que les deben, sino la firma del Real Decreto “que daría estabilidad en el futuro”, porque en caso contrario, añade, “dentro de dos meses habría que volver a entrar a un encierro”.

Otra de las advertencias que hacen es que a harán lo que sea necesario si “a alguien se le ocurra quemar carbón en El Bierzo que no sea producido en El Bierzo”. “Esperamos que no traigan carbón de otro sitio, porque si esta comarca se contamina, que sea con carbón de aquí”, reitera Leite.

Numerosos apoyos

Cuentan con el apoyo de la comarca, de la población, de la Hullera Vasco Leonesa, de sus familiares y amigos y, por supuesto, del resto de compañeros de la mina, que estos días protestan de otra manera, cortando las autovías A-6 y A-66 (Ruta de la Plata) y la N-630 en Villamanín. Todos los días reciben la prensa para conocer cómo repercute su encierro en la superficie: “Ahora ya no vamos a cesar. Ahora seguiremos para adelante con todas las consecuencias, y más cuando los demás compañeros están haciendo un esfuerzo cortando las carreteras. Nosotros no somos marionetas de nadie y este encierro no es plato de buen gusto”, destaca Constantino Chico, quien manifiesta que con el retraso de la firma del convenio las administraciones “están echando tierra encima de la mina y la situación no tiene ni pies ni cabeza”.

Este joven astorgano, de 34 años y 13 de experiencia en la mina, recorre todos los días el trayecto desde la villaromana y recuerda con anhelo que es el único que hace ese camino, cuando hace años viajaban hasta 13 personas en una furgoneta a trabajar a este pozo. “Somos bastante claros y sencillos en lo que pedimos. No es tan difícil. Tanto político y no son capaces. Sólo queremos que cuando vayamos al banco tengamos dinero para vivir, criar a los hijos, comprarle lo necesario para que vayan a la escuela…”, sostiene.

Llama la atención el gran número de polacos encerrados, que podrían haber sido más si a dos de ellos no les hubiese coincidido de vacaciones esta situación. La mayor parte de ellos ya trabajaron en esta profesión en su país de origen y recuerdan que “dejaron cerrar las minas”, aunque no aclaran si sucedió algo similar al conflicto actual. En todo caso, coincidieron en reclamar la firma del Real Decreto por parte de la Comisión Europea porque si no es así no saldrán del pozo.

Modo de vida

Durante estos cinco días y probablemente los siguientes, los 13 mineros viven abajo una cruda realidad, después de haber picado carbón en mínimos túneles de 33 centímetros de altura. En estos días, consumen el tiempo dando paseos por el laberinto de minas del pozo, juegan a las cartas, hacen trucos de magia…, pero sobre todo debaten, opinan y analizan lo que leen todos los días en la prensa. Para dormir, no existen comodidades: un tablón y una manta por la que transpira la intensa humedad. “Rechacé el saco de dormir que me ofrecía mi mujer porque si queremos comodidad nos vamos a un hotel. Aquí estamos para lo que estamos con todas las consecuencias”, aseveran.

Reconocen que alguno toma medicamentos, pero ante todo quieren transmitir tranquilidad a las familias porque por lo general, insisten, están bien y con fuerza. El portugués Pedro Leite, que con un perfecto castellano es el de los que más habla, muestra la peculiar ‘alcoba’ de la que disponen los mineros. Visiblemente emocionado, suelta unas lágrimas ante su tabla y manta donde tiene dos fotos con su familia y un reloj para conocer la hora: “El tiempo es muy largo aquí abajo, pero intentamos hacer cosas para que pase lo más rápido posible. También sabemos qué hora es, más o menos, cuando oímos el ruido de las carras que bajan a traer la comida”.

Los 13 de Tremor agradecen reiteradamente al Ayuntamiento de Igüeña que les haya facilitado las mantas y la comida durante todos los días, ya que se trata de un municipio especialmente minero y este encierro está causando una gran unión en la zona. Lo demuestra el hecho de que, en la entrada del pozo, hay permanentemente familia y amigos de los encerrados, pero también vecinos de las localidades cercanas que se acercan y preguntan por ellos.

y las electricas nos ponen el precio que les da la gana en la factura de la luz que es lo mas j.dido, ya que pagamos y nos contaminan que lo hagan con nuestro carbon y si no que se vayan a contaminar a los paises donde compran el carbon.

Desde fuera una visión.
Solo queda la lucha, si algo conseguís será así. Pero ya sois pocos, primero durante años desmantelaron el sector, cierres programados, prejubilaciones, quitaron la fuerza, ahora quedáis pocos, os volverán a engañar, tal caso os darán un poco de tiempo, pero eso esta sentenciado. Europa no paga a sectores deficitarios, paso con la industria, astilleros etc.

Verdad es que las eléctricas hacen lo que quieren, y el gobierno se pliega como siempre a los poderes económicos y facticos, a los lobbies. Lo malo es que ya no podemos pasar sin electricidad. Europa ya no produce, importa, es mas barato, el tercer mundo con su mano de obra abundante ofrece el producto tirado. Ya no importa que se pierdan empleos, ni mueran sectores, no importan los pueblos mineros; quedaran vacios como tantos agrícolas en España, al menos tuvieron su tiempo de oro, otros ni eso. Las reservas quedaran hay, si algún día se tornara difícil y se acabara el carbón barato, el petróleo, se volverá a ellas, mientras…el contaminar tiene mala prensa, es mejor importar gas de países subdesarrollados, es mas barato y limpio, cuando eso se acabe, ya veremos, mientras lo minero da sus últimas boqueadas como un moribundo mal asistido, el oficio de minero en este país esta muerto.
Solo queda morir en pie con dignidad, eso me temo.