Riego de la Vega - Leon

Cuando el lema es continuar recortando (visita de la Canciller Alemana a nuestro país), los ciudadanos nos echamos a temblar y nos preguntamos ¿de dónde nos van a recortar más?

Los dependientes: Una persona con un 86% de discapacidad, con padres de más de 80 años, que el discapacitado les manda a dormir en la calle, les agrede, etc…, lleva más de cuatro años esperando una plaza en residencia y ya le dicen que no hay posibilidades de que la pueda conseguir.

Una persona entubada, que no camina, que no se vale para nada de forma autónoma, primero le retiran la seguridad social a la cuidadora y después de 400€ de prestación económica se la dejan en 120€.

Están revisando de oficio el grado de discapacidad a la baja y fundamentando que se ha producido “mejoría en su discapacidad”, procediendo a la retirada de la prestación económica, de la triste pensión de PNC (364€ mes).

En nuestra Comunidad Autónoma hay más de 55.000 personas esperando la ayuda por vivienda desde hace más de cinco años y, por tanto en riesgo de no poder pagar su hipoteca y perder su hogar.

Cuando planteas que se tienen derechos, te dicen que sí: “pendientes de disponibilidad presupuestaria”. ¿Pero quién hace los presupuestos?

Somos el país con mayor tasa de desempleo de la Unión Europea, a una distancia insignificante tras de Grecia. El paro de larga duración es escalofriante y no hablemos de los jóvenes.

Los titulares de los periódicos dicen: este año se han reducido los ERES. Y yo me pregunto ¿es que quedan empresas abiertas?

Nuestra sanidad, ejemplo de eficacia hasta ahora, se la están cargando: tienen derecho a la vida quien se la pueda pagar.

No hablemos de nuestros mayores. Con pensiones irrisorias y se habla de la esperanza de vida. ¿De qué tipo de vida?

Hasta los presos prefieren quedarse en prisión, a beneficiarse del tercer grado (libertad controlada).

¿Qué sociedad estamos construyendo o deconstruyendo?

La clase media se está extinguiendo, cada vez los ricos son más ricos y los pobres más pobres.

Hay gente que lo naturaliza diciendo: “siempre en épocas de crisis los ricos se han enriquecido aún más”

Pero ante este panorama me surge la pregunta de ¿cómo las personas están viviendo determinadas situaciones extremas de sufrimiento? Y me voy a la hemeroteca y a las estadísticas sobre suicidios.

Leo que hay una media de suicidios diarios en nuestro país en constante incremento desde que se inicio la crisis actual y los recortes de los últimos años, pero de esto no se habla mucho. Querer trabajar y no poder hacerlo, querer formar parte de la sociedad y que no haya sitio para ti, que te quiten la casa y no tener dónde ir..., son verdaderos traumas que afectan cada vez a más gente, y que merman sus esperanzas de futuro. Por eso, que el caer en la desesperación hace aumentar el número de suicidios, está más que explicado.

Las cifras bailan, como siempre que se trata este tema, determinados medios hablan de un 60% de aumento y el INE de un 11,3% en el último año, de los cuales un 77% son hombres y un 23% mujeres. Cada vez más son personas entre los 25 y 35 años.

Por lo tanto, al margen de los números, queda claro que hay coincidencia en decir que es la primera causa de muerte no natural y que los familiares la atribuyen a causas económicas (desempleo, desahucios,…)

Esta es la violencia social que las personas están sufriendo: los sentimientos de culpa que generan, la impotencia, la depresión, la desesperanza, el sentimiento de no tener futuro ni para la persona en sí, ni para sus familiares que muchas veces dependen de él o de ella.

Esto es un camino directo de decrepitud social. ¡¡Algo habrá que hacer para evitarlo!!