Vilches - Jaen

Según Manos Unidas, las situaciones de pobreza y sufrimiento extremo de los países del Tercer Mundo, hacen que muchas personas jóvenes envejezcan prematuramente, mermando sus capacidades y haciéndoles aún más difícil sobrevivir.

Con la campaña de este año, Efectos de la pobreza, Manos Unidas quiere hacer visible cómo las situaciones de pobreza afectan a la situación física de las personas.

En el siguiente enlace puedes acceder a un simulador en el que subiendo una foto de tu rostro, puedes ver reflejado en tu cara los efectos del hambre, la explotación, la enfermedad y la injusticia.

https://ww.manosunidas.org/efectosdelapobreza/?p=app

¿No recuerdan, ingleses, las masacres de Kenya, los despojos de Rodhesia?
¿No recuerda, franceses, cuánto robaron de Dakar y de Costa de Marfil?
¿No recuerdan, alemanes, los campos de concentración de Nabimia y los cráneos del pueblo hebreo?
¿No recuerdan, belgas, sus atrocidades en el Congo?
¿No recuerdan, portugueses, sus excavaciones depredadoras en busca del oro de Angola, sus cacerías de esclavos de Mozambique?

Desde mi punto de vista, habría que añadir: ¿No recuerdan, españoles, la colonización de Latino américa y el Protectorado del Norte de Marruecos? (Éste último, otra forma encubierta de colonización).

El vídeo muestra otra realidad sangrante, que no nos gustará a los europeos que nos la recuerden, seguro. Es para pensar, y mucho.

Si los parlamentarios cumplieran con su obligación, como lo hace el del vídeo, la política sería algo serio, creíble, responsable y transcendente, que tendría como primera consecuencia el empoderamiento de la ciudadanía.

Copio y pego:
"Un parlamentario de Cataluña pone "a caldo" a dos banqueros. Aunque habla en catalán, tiene la traducción al castellano. "Chapeau" a la contundencia de las preguntas como también a la forma de exponerlas.

Tan importante es la contundencia de las preguntas y la tranquilidad con que las formula el parlamentario catalán,como la actitud de los dos "marmolillos" que asisten impertérritos, fríos y silenciosos al acoso al que los somete. Lo más lamentable es que esos dos no son más que una pequeña muestra de una buena parte de los banqueros y políticos que están arruinando el país y enriqueciéndose, llevándose encima el producto de su latrocinio lejos de aquí, a paraísos fiscales, que eso si que lo saben hacer muy bien".

Otra realidad muy sangrante: La desesperación del inmigrante.

¡¿Cómo estarán en su país para jugarse la vida de esta manera?!

La explotación infantil es otra cruel y brutal realidad.

El corto Un día de campo compara la vida de los niños de los países pobres con la de los niños de los países ricos.