Santisteban del Puerto - Jaen

Cuando era chica pasé algunas temporadas con mis abuelos en Santisteban. Por lo visto sus aires eran más sanos que los de Úbeda, donde yo me criaba, porque cuando me ponía malucha (y era a menudo), decía el médico: “le vendrá bien un cambio de aire”, y a renglón seguido, maleta hecha y al pueblo. Y por esta razón viví algunos carnavales allí. Y qué miedo cogí a aquellas máscaras, criaturas envueltas en trapos, con caras desencajadas, palos o escobas en las manos, que entraban al zaguán de mi abuela y con gritos ensordecedores y chillones, repetían: ¡Que no me conoces, que no me conoces…¡ Por la noche, cuando cerraba los ojos, parecía que todas las máscaras estaban en mi cama y yo una y otra vez oía sus gritos.
El carnaval tiene que haber cambiado mucho en Santisteban desde aquellos tiempos, porque de esto hace ya muchos, muchos años.Un saludo para todos.

La ubetense