Santisteban del Puerto - Jaen

Es fácil dar consejos, e incluso compartir las dificultades que cada cual encuentra en su camino. Pero lo que sí es cierto es que cada cual tiene su propio dolor de cabeza.

Aun así, aprendamos dentro de nuestras posibilidades y actitudes de los que nos llevan la delantera.

Porque yo valgo (sí querido lector a ti te digo) porque Dios te proveyó de valores personales profundos. No tiene que ganártelos.

El respeto a mí mismo se nutre de esos valores, que conoces y llevas dentro de ti. Posees esos valores. Son tuyos. Debes de nutrirlos y cuidar de ellos, ya que corres el peligro de que se deformen, amenazados como están, por una sociedad orientada hacia el éxito material.

Si logras salvar las trampas que me tiende ese éxito, o el fracaso, si no te "adornas" de éxitos, ni entras en la auto conmiseración del “fracaso” ni vives a expensas de lo que dirán los demás, conservaras el respeto de ti mismo. Darás entonces más importancia a aquellos actos que expresen tu valía -don maravilloso que te ha sido dado-, proyectándola hacia los otros. Esta es tu motivación primera, lo que te impulsa, te empeñas por pura convicción a ser mejor lo que puedes

Tu valía es tu mundo. Te comprometes y cumples con la palabra. Esto, es más importante, es crucial.

Haz como el Sol
No te aferres al pasado
ni a los recuerdos tristes.
No reabras la herida que ya cicatrizó.
No revivas los dolores y sufrimientos antiguos.
Lo que pasó, pasó...

De ahora en adelante,
pon tus fuerzas en construir una vida nueva,
orientada hacia lo alto, y camina de frente,
sin mirar atrás.

Haz como el sol que nace cada día,
sin pensar en la noche que pasó.

Vamos levántate....que afuera esta la luz del ¡Sol...!!!!!!!!

Con todo mi afecto.
Montizón.

Monti:he leido tu escrito.Que pases muy buena noche.
BARCELONA

Gracias, mi estimada BARCELONA por el detalle Es un verdadero lujo tenerte como amiga en este instrumento. No sé cuanto tiempo durará esto de la comunicación, pero estoy seguro que cuando por las razones que sean, acaben estos diálogos escritos, te hecharé mucho de menos. Digo igual de cada uno de los foristas que nos acompañan día a día en la pantalla del odenador tratando de hacer la vida más agradable con sus magníficas aportaciones de amor y vida.

Con todo mi afecto, Dios te bendiga.
Montizón.