Santisteban del Puerto - Jaen

Tolerancia cero a los predicadores, es uno de mis lemas ante la vida, nunca he confiado en ellos, y siempre me he preguntado ¿si se creerán o no? ellos mismos, lo que nos están predicando.
En sus discursos, estos iluminados nos quieren hacer creer, que ellos tienen la razón absoluta y muchos somos los equivocados.
Ellos no se tuercen somos otros los que nos desviamos del camino recto.
Ellos no toman decisiones por si solos, sus grandes decisiones son consecuencia o producto de las acciones de los otros, por lo tanto no asumen responsabilidad alguna, siempre los culpables de sus acciones son los otros.
En definitiva nos hacen coparticipes de sus santas voluntades, y son capaces de querernos hacer ver, que todo es producto de su servilismo hacia nosotros.
En tiempos difíciles como los actuales salen como setas, aunque algunos se reinventan en todas circunstancias, eso si, cambiando de pulpitos. Aunque el cambio de pulpito no es por decisión propia, sino avocados por los otros, por no hacerles caso. Ya que, para estos iluminados predicadores todos nosotros, somos su razón de ser.

Predicadores, NO GRACIAS.