Pegalajar - Jaen

Noticia recogida del diario Jaen del dia 22/03/2010.


La aldea de La Cerradura entra en su cuarta semana sin agua.

Situación paradójica. Pese a las cuantiosas lluvias del invierno, por los grifos de la pedanía de La Cerradura, perteneciente al municipio de Pegalajar, no sale agua desde que comenzó el mes. El problema entra en su cuarta semana y los vecinos exigen soluciones.

Los residentes en el núcleo de La Cerradura contemplan, atónitos, cómo transcurren las jornadas sin que se arregle el problema de suministro de agua. Lo más preocupante, dicen, es que no existe plazo para que el servicio se restablezca con normalidad, por lo que lo más probable es que la situación se prolongue también en Semana Santa.
Durante el pasado fin de semana las autoridades enviaron un camión cisterna que quedó estacionado en la plaza de la pedanía para abastecer a la población. Sin embargo, los afectados consideran que no es una fórmula para atajar la cuestión ya que llenar el líquido allí es como hacerlo en una fuente cualquiera.
Enrique Escobedo, el cronista oficial, señala que la única novedad es que se les ha comunicado que la incidencia que motiva los cortes está localizada en el arroyo Bercho y que, supuestamente, se procederá próximamente a solventar la cuestión. Las viviendas que se han visto más afectadas son de la parte alta.
La falta de flujo condiciona el día a día de los habitantes de La Cerradura, que tienen casi imposible realizar actividades cotidianas como ducharse o poner una lavadora. Además, para el consumo humano se ven obligados a recurrir a los nacimientos del entorno, como el emplazado en las cercanías de la ermita, o a los pozos. Conforme pasa el tiempo el malestar se acrecienta.
Todas las personas consultadas coinciden en la circunstancia de que, aunque había precedentes de cortes, hasta ahora no se tenía constancia de uno tan prolongado como el actual. Los vecinos consideran que la situación supone que vivan “como hace cuarenta años”. Los damnificados consideran que si los responsables de la Administración no intervienen con celeridad el perjuicio será aun mayor, ya que durante los periodos festivos, como la Semana de Pasión, y, sobre todo, en verano el número de residentes en La Cerradura se incrementa considerablemente. También existe descontento por el impacto que tiene el asunto en la hostelería, una de las bases de la economía local.
El alcalde pedáneo, Antonio Ruiz, explica que, hoy, está previsto un análisis del manantial de La Pileta. Si es apto para el consumo humano se clorará para abastecer a la ciudadanía en tanto se resuelve el problema en la red de distribución. El representante precisa que ante el mal estado que presentan las tuberías habrá que plantearse su sustitución por otras nuevas. Ruiz indica que se trata de una conducción con alrededor de cuatro décadas, que cubre los alrededor de cinco kilómetros que separan Pegalajar de La Cerradura. No obstante, la obra en cuestión tiene un coste considerable

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