Otro cachito de histroria local El Rey Alfonso XIII llega a la mayoría de edad en mayo de 1902. Para conmemorar este feliz acontecimiento se declaran días festivos el 16 y el 17 de dicho mes. Durante esos día se enarbolaría la enseña nacional y habría quema de fuegos de artificios, mientras la banda de música local amenizaría los festejos. El día 17, fecha del aniversario, tendría lugar una solemne misa y sería cantado un Tedeum, invitándose a las autoridades militares y judiciales, así como a los vecinos "que la Alcaldía estime oportuno". Tras la misa sería entregado un traje a doce alumnos pobres de cada una de las escuelas municipales, propuestos por los maestros. La oposición de los señores Barbosa surte efecto, y el 29 de agosto de este mismo año el Gobierno Civil suspende en sus funciones al Ayuntamiento, exceptuando a los citados señores. Ese mismo día era declarado Alcalde Don Sebastián Barbosa Rodríguez, cuya primera acción sería colocar de nuevo en su puesto al destituido Secretario Don Sebastián Feria y a los escribientes y administrativos que salieron con él. Al día siguiente, 30 de agosto, y en sesión extraordinaria, la Corporación recién constituida acuerda restituir a su fecha inicial, la que se señaló durante el reinado de Femando VII, la anual Feria, trasladándola otra vez a los días 21, 22 y 23 de septiembre y denominándola como antes se denominaba, "de San Mateos”. El sábado 1 de noviembre, se reúne la Corporación presidida por Don Sebastián Barbosa Rodríguez, el cual, tomando la palabra, dice: "Que siendo, no tan sólo una costumbre muy generalizada, sino un laudable deber de gratitud el de que los Ayuntamientos, con el fin de perpetuar la memoria de aquellos hombres que elevándose sobre el ordinario nivel de los demás, ya por su heroísmo, ya por su inspiración y arte, ya por su ciencia y saber, o ya por su magnanidad y filantropía, han otorgado a su pueblo los beneficios de cualquiera de esos hermosos conceptos de la belleza moral, denominen con el nombre del dispensador de ellos una de las calles más céntricas de la población que los recibe; y que hallándonos en este caso con respecto al malogrado Señor Don Antonio Gómez Jaldón, que como oriundo que fue de esta villa pasó en ella los primeros anos de su existencia, y durante las varias veces que representó en la Diputación Provincial al Distrito Electoral de Ayamonte, y últimamente en el Congreso Colegilador de la Nación como Diputado a Cortes al Distrito de Huelva, dispensó a esta villa innumerables servicios de todas clases, prodigando a manos llenas sus valiosas recomendaciones y personales y desinteresadas gestiones para la consecución de todo cuanto pudiera convenir a los intereses materiales y morales de esta localidad por la que siempre manifestó particularísima predilección otorgando a sus naturales, ya individual o ya colectivamente, cuantos favores y servicios estuvieron a su alcance, como lo atestiguan innumerables hechos que sería prolijo detallar, pero que se conservan en la conciencia pública con los caracteres indelebles del reconocimiento, gratitud y admiración con los que los pueblos transmiten a través de legendarias generaciones, esa grata memoria del corazón llamada recuerdo hacia aquellos que pasaron haciendo el bien; proponía a este Ayuntamiento en su propio nombre y en el del Comité Liberal de la localidad, que como digno y merecido homenaje que se tribute a la buena memoria de tan patriótico hombre público por tan relevantes y plausibles, cuanto bienhechoras acciones, acuerde variar el nombre de la "Calle de Gibraleón”, y designarla en lo sucesivo con la denominación de "Calle Gómez Jaldón", a quien sorprendió la muerte cuando en la Capital de la Monarquía se hallaba cumpliendo la misión de representar a Huelva en Cortes". Continuará... |