Escacena del Campo - Huelva

Vuelven los grises, si si la famosa policia armada de franco solo que con 60 años de diferencia y que ahora visten de azul pero pegan igual de fuerte que entonces.

¿sera casualidad que entonces mandaba el enano y ahora mandan sus lacayos peperos? ¿o tal vez sera que la policia recibio ordenes esplicitas y concretas de la delegada del gobierno valenciano de apalear sin piedad a una treintena de chavales que solo reclamaban calefaccion para su instituto? ¿no se, no se? Tendria que reflexionar sobre ello ja,ja,ja.....y despues esta "señora" en vez de dar la cara para dar explicaciones de lo ocurrido en tan desmesurada carga policial manda al director de la policia valenciana que por cierto es el mismo que estaba en el gobierno anterior y fue nombrado por rubalcaba que todo hay que decirlo y sale diciendo que los estudiantes son <no te lo pierdas> EL ENEMIGO ¡pero bueno esto que es una guerra donde hay enemigos y aliados o este señor tiene complejo de rambo.

Si es asi como piensa gobernar marianin apaga y vamonos, Si cada vez que haya una huelga o una manifestacion va a sacar a "los grises" a la calle a repartir leña como hacia su tio paquito vamos a estar apañados.

En fin dejando un poco al lado el sarcasmo esto que a ocurrido en valencia es inadmisible e intolerable con la represion no se llega a ningun lado y esta demostrado que el soberano es el pueblo y no el aparato represor y espero que esta "señora" si tiene un minimo de etica y de verguenza dimita a la menor brevedad.

SALUD Y LIBERTAD(sobre todo de expresion) CAMARADAS

Cuando se hacen ensayos de labotarorio nunca se saben con certeza los resultados que se alcanzarán y la mayoría son imprevisibles.
Pues nada a seguir agitando el frasco de jalea que contra la agitación caduca, retrogada y de tiempos pasados; se aplicarán emplastes efectivos
contra los microbios.

Quienes son retrogrados,los que luchan por sus derechos? o quienes con sus leyes dictatoriales no hacen volver a los 50? a la calle el 11 de marzo cada dia somos mas,a la calle a gritarles el paro,los recortes,los retrocesos,el tapar el fraude que hacen los que tienen su dinero en los paraisos fiscales,que esta crisi que la pagen ellos y no los que quieren una educacion gratuita y publica.a la calle que nos tapen la boca.

Las obligaciones y los derechos van parejos, ninguno de ellos es libre ni afirmar que tengo primero unos derechos y unas obligaciones o al reves.
Pues nada a jalear la calle,pero le recuerdo que la calle no es del PSOE, ni de la Izquierda, ni del PP, ni de los Sindicatos, ni de un sin fín de individuos que pretenden adueñarse de algo que no es de nadie pero a la vez es de todos.

Que pase un buen dia y oxigine sus pulmones le vendra bien.

Que mejor sitio que la calle y las plazas y el campo para airear los pulmones ,donde los derechos y las obligaciones son de todos,pasese, y asi dijerira mejor ,quienes hoy estan en la calle.

La politica de hoy en dia se podria resumir con la ya antigua pelicula el disputado voto del señor cayo.

La televisión me sirve para casi todo: para perder el tiempo, para matar el tiempo (no es precisamente lo mismo), para recuperar el tiempo, para sentir el tiempo, para hacer tiempo, para… Parece que, como ocurre con todo, depende del uso que se haga de ella.

A veces, zapeo un poco y me encuentro con sorpresas agradables, que, de otra manera, no se me iban a presentar en mi camino.

Esta tarde había terminado la lectura de una novela clásica de aventuras y quería dejar mi mente un rato libre. La opción habría estado en el paseo, pero como la tarde estaba muy fria no fue tal cosa, la solucion estuvo en la caja tonta. De repente, me encontré en la parrilla con la proyección de una película que tendrá acaso veinticinco años o más. Era esta: “El disputado voto del señor Cayo”. La pillé muy avanzada y me quedé en ella. La he visto alguna vez más pero hacía bastante tiempo desde la última ocasión. Tuve la suerte de pinchar en la larga escena del pueblo en el que vive el anciano, por cierto interpretado magistralmente por paco rabal.

En la película se resume el espíritu, ya lejano, de la Transición política de finales de los setenta y principios de los ochenta. Pero la película es mucho más que eso, es una comparación maravillosa entre el mundo rural y el mundo de la ciudad, es la visión reducida y simplista que llevan los partidos políticos (los de izquierda por su ingenuidad y los de derechas por su imposición autoritaria y vengativa) frente a una situación y a una visión más natural y esencial de la vida, representada en el señor Cayo, y es la visión lingüística del ambiente rural frente al habla urbana.

Ya en aquellos comienzos democráticos, algunos podían intuir que los cambios tenían que ser amplios y sensatos, pensando no solo en los votos sino en la realidad sobre la que se quería actuar, abriendo panoramas y no pensando que se iba a redimir lo que acaso tenía mucho que decir y, tal vez, en el fondo, tuviera que redimir a los redentores. El honrado aspirante a diputado (el de la izquierda, porque los de la derecha no aparecen más que para asustar y dejar sus huellas violentas, aquellas que vimos todos los que conocemos esa época) pronuncia literalmente estas palabras: “Hemos ido a redimir al redentor”. Acaso por eso termina fuera de la política y dedicado a otros menesteres.

Porque el señor Cayo no tenía prisa, porque el señor Cayo en lo primero que pensó con la muerte de Franco fue en que le dieran sepultura humanamente, porque no se enteró de ella hasta pasado casi un mes y razonó que para qué necesitaba enterarse antes, porque el señor Cayo conocía los principales trucos de la vida y era autosuficiente, porque el señor Cayo podía vivir sin el diputado Víctor pero este no podía subsistir sin el señor Cayo, porque se estaba creando “la primera generación que no sabe para qué sirve la flor del saúco”, porque él era el resumen de un tipo de vida más austero, más natural y más equilibrado, porque no tenía televisión ni radio pero no sentía necesidad de ellas (acaso pensando que, para lo que hay que ver y oír, tal vez era mejor dejarlo como estaba), porque el señor Cayo era capaz de dejar alucinados a los candidatos hasta dejarlos fuera de juego, porque lo que hay que disputar no es el voto del señor Cayo sino que lo que hay que hacer es analizar sus formas de vida para dejar lo que está bien y aspirar a cambiar solo lo que mejore a todos, porque la vida es algo más que votos y la democracia, por desgracia, si es mal entendida, nos lleva casi todo el esfuerzo en conseguir precisamente esos votos, pensando que eso nos legitima para casi todo después de hecho el recuento, para…

Han pasado casi treinta años desde entonces. Mutatis mutandis, se repiten y se agudizan algunos defectos de los que se presentan en la película. Tal vez muchos, demasiados. Dos ejemplos:


b)El tipo de vida urbana, tan apabullante y casi exclusiva en nuestros días, ¿hacia dónde nos está llevando? Y se abre el objetivo de la cámara: desertizaciones, desequilibrios de población, comunicaciones, sanidad, educación, clima, costumbres, crecimientos sostenidos, ritmos de vida…

Hoy quedan pocos votos del señor Cayo por disputar. No sé si no será otro señor Cayo el que tenga que salir por las calles a disputar nuestro voto, pero camaradas yo os digo desde aqui no os dejeis atemorizar por estos gobernantes que solo gobiernan para ellos y sus intereses por los grandes bancos que nos roban y nos hacen esclavos del vil metal, camaradas leer entre lineas el resumen de esta pelicula que tiene un gran mensaje oculto el mensaje de que ellos (politicos)sin nosotros (el pueblo)no son nada no hos dejeis pisotear como estan haciendo con nosotros que no antepongan el dinero a las personas, luchad, protestad, manifestaos, gritad, plantad cara y decid basta ya, basta ya de recortes sanitarios, basta ya de recortes sociales y de derechos de los trabajadores, basta ya de represion, basta ya de recortes en la enseñanza de nuestros hijos, esta crisis la han provocado ellos por lo tanto que la pagen ellos.

SALUD Y LIBERTAD CAMARADAS

Este es el ejemplo A del mensaje anterior,que antes no a salido por un fallo mio, perdon

a)La democracia sin recuento de votos y sin expresión de voluntades no es tal. Pero, ¿qué tanto por ciento de esfuerzos se les va a los partidos políticos en conseguir esos votos?, ¿cuántas imbecilidades realizan con tal de conseguir esos votos?, ¿a qué da derecho ese recuento de votos?