El Doctor Muerte: Aribert Heim En el prontuario del doctor Heim figuran operaciones a prisioneros sin anestesia. También se lo acusa de extirpar órganos a personas con buena salud para luego dejarlas morir en la mesa de operaciones; de inyectar veneno -y en ocasiones nafta- en el corazón de otras víctimas y de conservar algunos de sus cráneos como souvenir. Luego de vivir bajo el radar de los cazadores de nazis durante más de diez años después de la Segunda Guerra -buena parte de los mismos en el balneario alemán de Baden-Baden, donde tenía esposa, dos hijos y un consultorio de ginecología-, logró escapar cuando sus cazadores lo tenían casi cercado. Fue en 1962. Su escondite, así como su muerte en 1992, fue uno de los mayores secretos hasta ahora. |