Bollullos Par del Condado - Huelva

Ante esta masiva recogida de alimentos, opino, que tenemos como prioridad potenciar la caridad antes que la justicia. Dicho esto pienso que la mayoría del voluntariado lo hará con la máxima de ayudar al que no tiene nada que llevarse a la boca y que por desgracia en estos momentos son muchos, pero también, (y de esto no se dan cuenta) es una forma de denunciar tanta barbarie como están haciendo
Pero, ¿porque hay hambre, si vivimos en un mundo de abundancia?, deberíamos reflexionar y preguntarnos,¿ dónde está la riqueza? Y entonces nos daríamos cuenta de que está en manos de unos cuantos señores, que se enriquecen distribuyendo los alimentos por todo el planeta pero de la forma que a ellos les beneficie y a ellos les interesa que haya pobres pasando hambre, son los que le ponen precio a la vida para poder
Sigo sin comprender, que tirando cientos de toneladas de alimentos, tengamos que pedir comida para solucionar el problema a muchas personas (que en cualquier momento podemos ser alguno de nosotros) en unos días tan especiales como es la navidad. Pero la navidad pasa, y la pobreza y el hambre siguen, y al hambre no se le puede decir, espera a que lleguen otros días tan especiales, para que muevan esos corazones tiernos, y se pongan en las puertas de las grande superficies a pedirle al pueblo colaboración para que esos día los pobre tengan algo que comer, es desesperante. En mundo de abundancia
En el caso que yo pudiera pedir algo, sugeriría a estos voluntarios que sigan, como los días de navidad, reclamando alimentos pero al mismo tiempo denunciando y llamando a la gente que denuncie esta situación tan tremenda por la que estamos pasando. Hay dos caminos a seguir, uno es la caridad y esta aunque se haga de buena fe, no es la solución apliquemos el proverbio chino “si me das un pez como un día, si me enseñas a pescar comeré todos los días” y la otra es reclamar justicia para todos y aquí creo que estamos fallando, nos están recortando o mejor dicho segando todos los derechos que ha costado mucho conseguir y estamos demasiado tranquilos
Con todo esto me da que pensar que el hambre es un filón de ganancia para unos pocos, y para que sus ganancias sean rentables retienen, esos alimentos, y permiten que una parte de la población, tengan que pasar calamidades, donde hay de sobra.
Pero esa solidaridad, para mi malentendida que se manifiestan en las puertas de las grande superficies, con el único objetivo de recolectar alimentos no se dan cuenta de que estas grandes superficies son las mayores recolectoras de alimentos y que estos los distribuyen según sus intereses económicos ,son los que ponen los precios a los productos agrícolas o los traen de Argentina o donde lo compren más baratos arruinando a cantidad de familias y encima de todo esto también se han beneficiado de este “acontecimiento solidario” que a pesar de las buenas intenciones no deja de ser algo bochornoso que esté pasando esto
Termino diciendo que no podemos permitir que ni una sola persona pase hambre “apoyo” el trabajo de los voluntarios, pero tenemos que tener en cuenta que la limosna no es la solución, lo mismo que se pide pan, hay que pedir justicia. Y la justicia es otro mundo sin pobres, no es razón de la pobreza en un mundo donde una minoría secuestra los bienes que este mundo tiene Pan hay no podemos mendigar donde tenemos de sobra, unamos voluntades y reclamemos nuestros derecho. Y esa es la mejor forma donde los voluntarios empleemos nuestro tiempo en pedir un reparto más justo,