Foro- Ciudad.com

Yebra - Guadalajara

Poblacion:
España > Guadalajara > Yebra
19-01-10 17:05 #4418347
Por:No Registrado
ATC
https://ww.emplazamientoatc.es/NR/rdonlyres/B40A3E04-A4C2-40CF-B0C4-F65FD9EC5D75/0/CRITERIOST%C3%89CNICOSBASICOSDEEMPLAZAMIENTOS_aprobado_27nov.pdf

CRITERIOS BÁSICOS PARA LA SELECCIÓN DEL EMPLAZAMIENTO
La instalación ATC se ha concebido como una instalación industrial que no
demanda unas características específicas del terreno en el que sea ubicada, dado
que su diseño de detalle se podrá adaptar a las singularidades del emplazamiento,
teniendo en cuenta el marco normativo expuesto anteriormente.
En general, las características del emplazamiento junto con los parámetros de
diseño de la instalación conforman el conjunto de factores que han de ser tenidos
en cuenta en el Estudio de Seguridad y en la Evaluación de Impacto Ambiental de
la instalación, los cuales deberán ser evaluados por las autoridades competentes
durante el proceso de licenciamiento para las distintas autorizaciones de la
instalación.
En virtud de las condiciones establecidas en la apreciación favorable del CSN para
el diseño genérico del ATC, los criterios que debe cumplir un emplazamiento
abarcan todos aquellos factores que guardan relación con los estados de
operación de la instalación junto con las potenciales condiciones de accidente.
También se incluyen aquellos que pudieran conducir a la necesidad de adoptar
medidas de emergencia y todos aquellos sucesos naturales e inducidos por el
hombre que puedan ser importantes para la seguridad de la instalación. Por ello,
los factores a evaluar se pueden dividir en tres grandes bloques:
- Sucesos externos de origen natural o inducidos por el hombre, con
frecuencia e intensidad en la región el emplazamiento suficiente
como para afectar eventualmente a la seguridad de la instalación.
-6-
- Características del emplazamiento que puedan influir en la potencial
transferencia del material radiactivo al medio ambiente y a las
personas.
- Datos relativos a la densidad y distribución de la población junto con
otras características que puedan afectar a la implantación de medidas
de emergencia y la necesidad de evaluar los riesgos para losindividuos y la población.
Atendiendo a esta clasificación preliminar y para una instalación del tipo ATC,
parece claro que dichos factores, y en particular los del primer bloque (impactos
que se pudieran producir debido a sucesos externos), pueden servir para valorar a
priori los emplazamientos candidatos para el ATC, tomando como criterios de
referencia los siguientes:
• Emplazamientos con riesgo potencial debido a terremotos, fallas
activas, volcanismo reciente, etc.
• Emplazamientos con potencial ocurrencia de sucesos meteorológicos
extremos (tornados, huracanes, etc.).
• Emplazamientos sometidos a riesgo de grandes inundaciones por
precipitaciones extremas, áreas que puedan ser afectadas por
ocasional rotura de presas, deshielos anormalmente intensos, etc.
• Emplazamientos con inestabilidades geotécnicas o en áreas que
puedan ser afectadas indirectamente por estas (deslizamientos delterreno, taludes, colapso, subsidencia, etc.).
• Emplazamientos con riesgo apreciable debido a posibles accidentes
catastróficos inducidos por el hombre (provocados por proximidad a
aeropuertos, estaciones y nudos importantes de transporte, y en
general áreas industriales o tecnológicas que puedan presentar algún
riesgo de explosión química o fuerte descarga energética.).Por otra parte, también hay que tener en cuenta la exclusión del territorio sometido
a protección por su interés patrimonial, tanto los espacios naturales protegidos
como las áreas de valor cultural e histórico:
• El emplazamiento se ubicará fuera de las áreas que forman parte de
la red europea de Conservación de la Naturaleza Natura 2000. En el
caso de España ésta incluye los Parques Nacionales, Parques
Naturales y otras figuras equivalentes cuya gestión corresponde a las
Comunidades Autónomas, los Lugares de Importancia Comunitaria
(LICS) las Zonas de Especial Protección de Aves (ZEPAS).
•El emplazamiento se ubicará preferentemente, como cualquier otro
tipo de instalación industrial, en áreas que, aún no estando
sometidas a legislación conservacionista, no se encuentren situadas
en la proximidad de espacios con hábitat de especies animales y
vegetales en peligro de extinción. También quedará fuera de zonas
protegidas del Ministerio de Defensa, Montes de Utilidad Publica y
terrenos que formen parte de la Red Española de Vías Pecuarias.
•Se evitará la localización del emplazamiento en zonas donde se
conozca o deduzca la existencia de elementos de interés patrimonial
(histórico, arqueológico) que puedan ser afectados por estar en la
zona de influencia de la instalación o de las obras para construcción
de la misma. Así mismo se tendrán en cuenta los acuerdos europeos
sobre protección del paisaje (Convenio Europeo del Paisaje) y las
figuras de protección desarrolladas en la legislación autonómica.
Finalmente se pueden citar un conjunto de criterios, relacionados con la viabilidad
socioeconómica de la instalación, referidos a las características del territorio que
muestren la disponibilidad de espacios, la accesibilidad, la existencia de
infraestructuras necesarias y adecuadas para la construcción y posterior operación
de la instalación, de acuerdo con los siguientes criterios:
• El emplazamiento no se encontrará cerca de zonas de interés estratégico en
explotación o con posibilidad de explotación futura.
• Los transportes al emplazamiento tendrán lugar por vía terrestre (ferrocarril o
carretera), desestimándose por ello todos aquellos emplazamientos que
-8-
requieran necesariamente que el transporte tenga lugar por vía aérea o
marítima.
Este conjunto de criterios constituye una base cualitativa a partir de la cual se
puede valorar la exclusión de aquellos emplazamientos que presenten alguna de
las características mencionadas. Cabe añadir que, con relación a los fenómenos
externos considerados, la valoración que puede hacerse en una etapa como la
actual es puramente referencial, ya que la exclusión de un emplazamiento en virtud
de los fenómenos externos habría de ser evaluada a partir del correspondiente
análisis de riesgos específico del emplazamiento debidamente caracterizado.
Puntos:
19-01-10 17:29 #4418548 -> 4418347
Por:No Registrado
RE: ATC
Tragedias en Almacenamientos * En septiembre de 1987, los habitantes de Goianía, una ciudad brasileña, encontraron una máquina desconocida abandonada en un vertedero. La abrieron y hallaron en su interior un polvillo azul. La tradición de la pintura corporal debió marcar el comportamiento de los brasileños, pues muchos de ellos se embadurnaron con él. Un mes después se empezaron a producir las primeras muertes. Aquel polvillo era Cesio 137, un material altamente radiactivo que debería haber estado almacenado bajo estrecha vigilancia. El Gobierno brasileño se vio obligado a poner a toda la población bajo control radiológico. Casi 300 personas se vieron afectadas. Los que murieron a causa de la radiación fueron enterrados en ataudes de plomo de 608 kilos bajo varias capas de cemento.
* Al menos tres cementerios de residuos de baja actividad de los Estados Unidos y el de Carísbad (Nuevo Méjico) para deshechos altamente radioactivos han sufrido fugas y problemas geológicos.
* En los almacenes radioactivos rusos también se han producido accidentes muy graves. El vertido de residuos al río Tetcha, durante el periodo 1948-1951, supuso la contaminación de 124.000 personas, y la evacuación de otras 7.500, que ocupaban suelos altamente contaminados.
* El accidente más grave se produjo el 29 de septiembre de 1957, en la planta de almacenamiento de Kishtim, cuando al explotar un contenedor con 160 m3 de residuos, contaminó con unos 2 millones de curios una superficie de 1.000 km2. El accidente obligó a la evacuación inmediata de 10.700 personas. El secreto oficial ha impedido conocer el número de víctimas del accidente (16). Los materiales radiactivos acumulados en el lago Karachai se dispersaron con la sequía de 1967; como consecuencia, 1.800 km2 resultaron contaminados. Todavía en 1991, permanecer una hora en esta zona suponía recibir una dosis radiactiva mortal.
*El 20 de abril de 1973 nadie prestó ninguna atención particular al tanque 106 T en el área 200 Oeste de la Reserva de Hanford (EE.UU.). Construido con hormigón reforzado con un alineamiento de acero al carbono en su fondo y en los lados, es cilíndrico de forma, de unos 23 metros de diámetro y 10 de profundo y está hundido en el suelo con unos dos metros de tierra sobre su techo en forma de cúpula.
En abril de 1973, el tanque 106 T contenía residuos radiactivos de alta actividad procedentes de la planta de reprocesado de combustible Purex con alrededor de 1,5 millones de litros, principalmente en forma líquida. Entre el 20 de abril y el 8 de junio, el tanque 106 T dejó escapar al suelo, más o menos 435.000 iltros de liquido absolutamente radiactivo conteniendo aproximadamente 40.000 curios de cesio-137, 14.000 curios de estroncio-90 y 4 curios de plutonio.
La fuga era la decimoprimera registrada en Hanford, no sería la última.
* En noviembre de 1978 el biólogo disidente soviético Jaurés Medvedev informó de una supuesta catástrofe producida en la región soviética de Cheliabinsk, en los Urales del Sur, como consecuencia de haberse producido criticidad en una planta de tratamiento o almacenamiento de residuos radiactivos. La catástrofe habría tenido lugar a finales de 1957 o principios de 1958, habría producido la muerte de centenares de personas y habría contaminado una extensa área. Informes de la CIA confirmaron, sin mayores precisiones, esta catástrofe, sabiéndose también que los Estados Unidos no tuvieron interés en señalarla, en su día, para no alertar contra su propio programa nuclear.
* A comienzos de abril de 1993 se desencadena un grave accidente en el depósito de residuos radiactivos de Tomsk. El 18 de julio del mismo año se produjo otra fuga radiactiva en la planta de Tcheliabinsk, que también procesa residuos radiactivos; el 2 de agosto, otro accidente en el almacén de Tcheliabinsk 40. La lista de accidentes en depósitos de residuos radiactivos se incrementa peligrosamente. Las estimaciones de sus consecuencias son sobrecogedoras: 450.000 personas contaminadas, de las cuales más de 50.000 habrían recibido dosis considerables...

La carretera no aporta más seguridad a los transportes de substancias radioactivas.
He aquí algunos ejemplos que ratifican esta afirmación:

* El 19 de diciembre de 1980 se produce un accidente en un transporte de plutonio y otros materiales radioactivos por la Autopista 25 (Estados Unidos).
* El 2 de noviembre de 1982 un camión militar con un misil Pershing- 1 sufrió un accidente en Walprechtsmeier (Alemania): un ciudadano murió, dos soldados resultaron heridos y mil doscientas personas fueron evacuadas.
* En septiembre de 1984, otro transporte sufría un accidente en las carreteras alemanas, esta vez con un misil Pershing- II. El 20 de junio de 1985, dos camiones con cabezas explosivas colisionan en Helensburgh (Escocia).

* El 10 de enero de 1987 se produce un accidente en una caravana con diez camiones, cargados con armas atómicas, cerca de Salisbury (Gran Bretaña).

* Nuevamente el 5 de mayo de 1987 un transporte con un misil Pershing del ejército norteamericano sufría un accidente en Heilbronn (Alemania).

La lista es interminable. En definitiva, el transporte de material radioactivo multiplica el riesgo al que ya estamos sometidos por la actividad de las centrales atómicas.

En España hay una "larga ruta radiactiva".
Si los transportes de materiales radiactivos, combustible y residuos de las centrales nucleares, son inseguros,
las largas distancias que han de cubrir multiplican el riesgo.
Actualmente, el combustible nuclear es desembarcado por el puerto de Algeciras, en el extremo Sur de la península y se transporta hasta la factoría de la Empresa Nacional del Uranio (ENUSA), en Juzbado (Salamanca). Desde allí se transporta a las centrales nucleares, que se encuentran en las provincias de Guadalajara (Zorita y Trillo), Burgos (Santa María de Garoña), Tarragona (Vandellós II, y Ascó I y II), Valencia (Cofrents), Cáceres (Almaraz I y II). De estas ubicaciones, colocadas en la mitad septentrional de la península, los residuos generados son transportados al cementerio nuclear de El Cabril, en Córdoba. En total, 8.000 km de una ruta radiactiva e insegura.
Ni tan siquiera los contenedores y bidones de material radioactivo pueden soportar un accidente en el transporte. Las pruebas a que son sometidos resultan claramente insuficientes.

Los bidones para residuos radioactivos padecen un ensayo de caída libre, desde una altura de 1,2 metros, y uno de impacto, dejándolo caer desde 9 metros sobre una superficie plana. Sin embargo, un accidente a 80 km por hora equivale a una caída desde más de 25 metros. ¿qué sucedería en caso de que el impacto se efectuara sobre aristas o salientes? ¿y en caso de choque frontal?.

Los ensayos térmicos consisten en exponer los bultos a temperaturas superiores a 800º C durante 30 minutos. Sin embargo, si un transporte radioactivo se incendia, apagar el fuego no resulta fácil. Recordemos que el grupo más importante de las primeras víctimas de la catástrofe de Chernobil fue, precisamente, el de los bomberos, V. Právik, Kibénok, Ignatenko, Vaschuck, Tischura, Titenok... pagaron con sus vidas el intentar sofocar a un incendio radioactivo.


En España el promedio de residuos de baja y media actividad generados mensualmente es de 82.885,7 litros (equivalentes a 376,75 bidones de 220 litros), que permanecerán peligrosos y radiactivos durante 300 años. Estos residuos están siendo transportados paulatinamente, en camiones con unos 45 bidones, al cementerio radiactivo de El Cabril, en la serranía de Córdoba. Los bidones almacenados en las centrales nucleares supondrán 1.225 viajes; los residuos producidos cada año aumentarán en 100 viajes esta peligrosa circulación.

Es inevitable que las carreteras que lleven al cementerio nuclear se conviertan en lugares de alto riesgo.
Lo lógico es que tan peligrosos transportes no se realicen, y que los residuos se queden donde están.
Puntos:
19-01-10 17:40 #4418634 -> 4418548
Por:No Registrado
RE: ATC
Residuos radiactivos La industria nuclear considera residuo radiactivo a cualquier material que contiene radionucleidos en concentraciones superiores a las establecidas por las autoridades competentes y para el cual no está previsto ningún uso.
Los residuos radiactivos se pueden clasificar de muy diversas maneras en función de sus características, como por ejemplo, su estado físico (es decir si son gases, líquidos o sólidos), el tipo de radiación que emiten (alfa, beta o gamma), el periodo de semidesintegración (vida corta, media o larga), y su actividad específica (baja. media, alta).
Es normal verlos clasificados en residuos de baja, media y alta actividad y, aunque en algunos países se gestiona cada tipo por separado, en España se hacen sólo dos categorías: los de baja y media actividad por un lado y los de alta por otro.


Alta:
Los residuos de alta actividad constituyen el 1 % del total, pero contienen el 95% de la radiactividad generada. Son el combustible gastado de las centrales nucleares y las cabezas nucleares procedentes de las bombas y misiles atómicos. Son los más peligrosos y los que poseen vida más larga.

Emiten radiaciones durante miles y miles de años y tienen una toxicidad muy elevada. En España son generados principalmente en las centrales nucleares (de las que ahora hay 9 en funcionamiento), ya que el combustible de uranio empleado en éstas se convierte, tras su utilización, en residuo radiactivo de alta actividad.

Entre estos residuos se encuentra el plutonio-239, un isótopo radiactivo creado por el hombre para la fabricación de bombas atómicas (no existía previamente en la naturaleza). De tremenda toxicidad, un sólo gramo de este elemento es capaz de causar cáncer a un millón de personas. Este isótopo emite radiactividad durante cerca de 250.000 años, lo cual supone 25 veces más tiempo que la Historia conocida de la Humanidad.

Estos enormes períodos de actividad nos obligan a pensar en otras escalas de tiempo y en las muchísimas generaciones, aún por venir, que tendrán que soportar el legado irresponsable de los residuos radiactivos. Esta escala de tiempo es tan alucinante que podemos considerarla una eternidad. Podemos compararlo con otros tiempos: la historia de la cultura de la humanidad no tiene más de 10.000 años, la Montaña de Yucca, en el desierto de Nevada (EE. UU.), donde ya se depositan residuos de alta actividad, era un volcán activo hace 20.000 años, hace 5.000 años el Sahara era un vergel, hace 10.000 años había volcanes activos en el centro de Francia y hace 7.000 años no existía el canal de La Mancha.

¿Quién puede, pues, garantizar que estas peligrosas sustancias estarán confinadas durante todo este tiempo?. Incluso parece dificil que las generaciones futuras no acaben olvidándose al cabo de unos siglos de su existencia.
Puntos:

Tema (Autor) Ultimo Mensaje Resp
PICOLO Por: yebranos0 09-04-10 15:29
NO NO Y NO
3
cuatro largos añossss¡¡¡¡ Por: f.c 16-02-10 21:56
f.c
8
YA LO DIJO QUEVEDO Por: 123454321 19-01-10 18:45
No Registrado
9
necesito un fontanero Por: No Registrado 26-01-09 01:00
No Registrado
7
Simulador Plusvalia Municipal - Impuesto de Circulacion (IVTM) - Calculo Valor Venal
Foro-Ciudad.com - Ultima actualizacion:07/08/2020
Clausulas de responsabilidad y condiciones de uso de Foro-Ciudad.com