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Miembros del PSOE y de las Juventudes Socialistas de Melilla, imputados en un delito electoral por falsas promesas de trabajo a votantes moros

El auto del Juzgado de Instrucción número 4 es claro: varios miembros del PSOE y de las Juventudes Socialistas de Melilla tendrán que ir a declarar el día 24 como imputados por un delito electoral y contra la Administración Pública. El auto recoge que se remitieron “cartas falsas” a la ciudadanía con efecto “llamada” o en confirmación con las “promesas” realizadas, así como la “alteración o incumplimiento de los criterios establecidos para la atribución de puestos de trabajo derivados de los planes de empleo al objeto de otorgar preferencia a las personas que votaron” a la coalición CPM-PSOE “o a quienes prestaron servicios para la misma”.

En total son nueve imputados los que tendrán que acudir a declarar el próximo día 24, a partir de las 09.00 horas, ante “la existencia de un entramado conformado por diversas personas que han pretendido la obtención ilegítima de votos a favor de la coalición CPM-PSOE”.

En concreto, tendrán que ir a declarar la ex secretaria de Movimientos Sociales de Juventudes Socialistas de Melilla (JSME), Ikram Aanán; el secretario de Transportes del Partido Socialista de Melilla (PSME-PSOE), Gabriel Jiménez; el secretario de Organización de JSME, Sergio Martínez; el secretario general de JSME, Amín Mohamed; el secretario de Innovación y Nuevas Tecnologías del PSME-PSOE, Yeray Díaz; la directora del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), Rabea Aomar); así como A.A.M. y F.B.M. Todos están imputados por delito contra la Administración Pública, delito electoral y delito de falsedad documental.

Entre los fundamentos jurídicos del auto dictado por el Juzgado de Instrucción número 4 de Melilla se establece que, para la obtención “ilegítima” de los votos, se dieron “varias fases”. Entre ellas, la solicitud del voto mediante “dádivas, promesas o remuneraciones directas, consistentes en la promesa/concesión de un puesto de trabajo en los planes de empleo dependientes de la Delegación del Gobierno” y el “incumplimiento de los trámites establecidos para el voto por correo mediante su manipulación directa”.

También recoge el auto que se remitieron “cartas falsas” a la ciudadanía con efecto “llamada” o en confirmación con las “promesas” realizadas, además de la “alteración o incumplimiento de los criterios establecidos para la atribución de puestos de trabajo derivados de los planes de empleo al objeto de otorgar preferencia a las personas que votaron” a la coalición CPM-PSOE “o a quienes prestaron servicios para la misma”.

Todos los delitos tienen “carácter de delitos conexos”, ya que, tal y como señala el auto, son cometidos “por dos o más personas en distintos tiempos y lugares con previo acierto para ello, guardan analogía o relación entre sí”.

“Casi un golpe de Estado”

Al respecto de este sumario, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, aseguró en una entrevista concedida a Onda Cero, en la que también participó este Diario, que en marzo de 2008 se produjo en Melilla “casi un golpe de Estado” cuando “se iba a subvertir el orden democrático, comprando una serie de votos y a la Administración”.
Estos hechos, tal y como recordó el jefe del Ejecutivo local, dieron lugar a que se “multiplicara por tres la media nacional del voto por correo en Melilla”. “Luego nos enteramos de que se habían enviado cartas diciendo a la gente que había sido preseleccionada y, presuntamente, se les pedía el voto por correo”.

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