EL LEGADO HISTÓRICO-CULTURAL-RELIGIOSO
EN EL QUINTO CENTENARIO DE LA CONSTRUCCIÓN DE LA CAPILLA DE LA ASUNCIÓN DE VILLAESCUSA DE HARO.
El hecho de que se pueda celebrar el quinto centenario de cualquier acontecimiento, pone en evidencia la importancia del mismo, pudiendo bien ser considerado como un suceso histórico relevante, pues en caso contrario, la flaca memoria humana lo hubiera dado, hace tiempo, por no ocurrido.
Cuando las páginas que describen el acontecimiento cuyo centenario se desea celebrar, no han sido escritas por ningún apasionado cronista o historiador, sino que han quedado impresas en lienzo, en piedra, en madera, en bronce, etc.; tienen con ello la gran ventaja de que su lenguaje, su arte, hablan por si mismos a quienes lo desean contemplar. Pasan años, generaciones, siglos, y siguen admirando a tantos.
Es un legado de incalculable valor el que recibimos de nuestros antepasados: Valores acrisolados, mamados generalmente en el seno de la propia familia, y pulidos con la convivencia, lenguaje, historia de lo vivido, tradiciones, monumentos..., todo ello conforma el patrimonio, a veces intangible pero real, de un pueblo, y deja en sus habitantes la impronta de una cultura singular. Es como el sello de identidad que en este caso llevaría consigo el hecho de ser y llamarse Villaescusero, pues de Villaescusa tratamos en este caso.
Es también, consecuentemente, una gran responsabilidad la que cada generación asume de conservar, y si fuera posible ampliar o mejorar, el legado histórico, cultural, religioso, etc., que recibidos de los antepasados son dignos de quedar ligados a la historia del pueblo.
Ha quedado constancia de como a lo largo de los siglos se han ido derruyendo muchos monumentos que hoy calificaríamos de incalculable valor, con motivos muy diversos, pero que convergen en dos:
1.Guerras entre propios y contra extraños.
2.Escasez de medios durante épocas muy prolongadas.
Sin embargo contemplamos con orgullo las huellas que han llegado hasta nosotros, las obras monumentales que se han conservado, demostrándose en las últimas décadas el enorme atractivo que suscitan en cuantos nos visitan y que para España se han constituido en fuente de riqueza material por los ingresos que el turismo reporta. Esto ha dado lugar a que desde muchos estamentos se realicen esfuerzos considerables en la conservación de este patrimonio.
La conmemoración del V Centenario de la Capilla de la Asunción debe contribuir a dar un impulso a Villaescusa de Haro.
IMPULSO DE CARÁCTER MATERIAL.-
Porque sean muchas las personas que nos visiten con ocasión de esta celebración, aumentando el turismo y comercio, además del efecto multiplicador, si es conocido por más gente.
Porque se logre la recuperación digna de la Capilla y especialmente del Retablo, con una esmerada limpieza, restauración de elementos deteriorados, afianzado de anclajes de soportes, iluminación, etc., manteniendo o aumentando su atractivo.
IMPULSO DE CARÁCTER CULTURAL.-
Porque los gentes puedan participar en eventos preparados para la ocasión, incluso de la apertura de posibles nuevas expectativas de tipo cultural.
Porque los villaescuseros puedan acercarse con más facilidad a datos, hechos y personajes históricos relacionados con su pueblo, de los que mucho han oído hablar en los pregones de las fiestas, a veces como si fueran fábulas.
Un pueblo se enriquece cuando toma conciencia de la historia que le ha llevado a donde está y aprende de ella.
IMPULSO DE CARÁCTER RELIGIOSO.-
No olvidemos que es la fe de una o varias personas la que ha permitido que hoy contemplemos este Monumento, y la fe conservada y alimentada en el pueblo la que ha permitido que hoy podamos conocer en imágenes la vida de la Virgen en escenas representadas en este retablo, culminando con su Tránsito o Asunción al cielo.
Esta celebración del V Centenario permitirá, a quien lo desee, conocer con más detalle a los personajes que representan las imágenes y las escenas mismas en su conexión con la Biblia y con la Iglesia.
El hecho de que se pueda celebrar el quinto centenario de cualquier acontecimiento, pone en evidencia la importancia del mismo, pudiendo bien ser considerado como un suceso histórico relevante, pues en caso contrario, la flaca memoria humana lo hubiera dado, hace tiempo, por no ocurrido.
Cuando las páginas que describen el acontecimiento cuyo centenario se desea celebrar, no han sido escritas por ningún apasionado cronista o historiador, sino que han quedado impresas en lienzo, en piedra, en madera, en bronce, etc.; tienen con ello la gran ventaja de que su lenguaje, su arte, hablan por si mismos a quienes lo desean contemplar. Pasan años, generaciones, siglos, y siguen admirando a tantos.
Es un legado de incalculable valor el que recibimos de nuestros antepasados: Valores acrisolados, mamados generalmente en el seno de la propia familia, y pulidos con la convivencia, lenguaje, historia de lo vivido, tradiciones, monumentos..., todo ello conforma el patrimonio, a veces intangible pero real, de un pueblo, y deja en sus habitantes la impronta de una cultura singular. Es como el sello de identidad que en este caso llevaría consigo el hecho de ser y llamarse Villaescusero, pues de Villaescusa tratamos en este caso.
Es también, consecuentemente, una gran responsabilidad la que cada generación asume de conservar, y si fuera posible ampliar o mejorar, el legado histórico, cultural, religioso, etc., que recibidos de los antepasados son dignos de quedar ligados a la historia del pueblo.
Ha quedado constancia de como a lo largo de los siglos se han ido derruyendo muchos monumentos que hoy calificaríamos de incalculable valor, con motivos muy diversos, pero que convergen en dos:
1.Guerras entre propios y contra extraños.
2.Escasez de medios durante épocas muy prolongadas.
Sin embargo contemplamos con orgullo las huellas que han llegado hasta nosotros, las obras monumentales que se han conservado, demostrándose en las últimas décadas el enorme atractivo que suscitan en cuantos nos visitan y que para España se han constituido en fuente de riqueza material por los ingresos que el turismo reporta. Esto ha dado lugar a que desde muchos estamentos se realicen esfuerzos considerables en la conservación de este patrimonio.
La conmemoración del V Centenario de la Capilla de la Asunción debe contribuir a dar un impulso a Villaescusa de Haro.
IMPULSO DE CARÁCTER MATERIAL.-
Porque sean muchas las personas que nos visiten con ocasión de esta celebración, aumentando el turismo y comercio, además del efecto multiplicador, si es conocido por más gente.
Porque se logre la recuperación digna de la Capilla y especialmente del Retablo, con una esmerada limpieza, restauración de elementos deteriorados, afianzado de anclajes de soportes, iluminación, etc., manteniendo o aumentando su atractivo.
IMPULSO DE CARÁCTER CULTURAL.-
Porque los gentes puedan participar en eventos preparados para la ocasión, incluso de la apertura de posibles nuevas expectativas de tipo cultural.
Porque los villaescuseros puedan acercarse con más facilidad a datos, hechos y personajes históricos relacionados con su pueblo, de los que mucho han oído hablar en los pregones de las fiestas, a veces como si fueran fábulas.
Un pueblo se enriquece cuando toma conciencia de la historia que le ha llevado a donde está y aprende de ella.
IMPULSO DE CARÁCTER RELIGIOSO.-
No olvidemos que es la fe de una o varias personas la que ha permitido que hoy contemplemos este Monumento, y la fe conservada y alimentada en el pueblo la que ha permitido que hoy podamos conocer en imágenes la vida de la Virgen en escenas representadas en este retablo, culminando con su Tránsito o Asunción al cielo.
Esta celebración del V Centenario permitirá, a quien lo desee, conocer con más detalle a los personajes que representan las imágenes y las escenas mismas en su conexión con la Biblia y con la Iglesia.
Enviado por: JACG | Ultima modificacion:23-05-2007 18:22
 |  |  |