Tarancón - Cuenca

Que el párroco de la nueva y muy "necesaria" parroquia ante el ruido que montan algunas de las "buenas y muy creyentes" feligresas en lugar pedir silencio, cosa bastante sencilla desde un micro, se dedica a chistar a la población, como si estuviera adiestrando animales, que algunas veces parecen del poco respeto que tienen a los lugares de culto los que se dan golpes en el pecho de lo " buenos" cristianos que se cree.
A ver si tienen un poco más de tacto y cuando se dirijan al público desde un micro, pues pide silencio y afea conducta como muy sencillamente y con tranquilidad hace el sacerdote Gabaldón.