Santaella - Cordoba

Señor Antoni Duran y Lleida

Es usted uno de esos políticos, profesionales que sin “saber que es el PER”, ni porque “existe”, ni cuáles son los problemas del medio rural andaluz, habla y opina solo para congratularse con la burguesía catalana y para arrancar unos cuantos de votos miserables aunque sea a costa del desprestigio de los jornaleros/as de Andalucía.

Usted sabe bien que el P.E.R y los subsidios son un insulto a los jornaleros/as, siempre hemos defendido que el dinero público fuera a cambio de trabajo, respeto y dignidad.

Pero es usted y los que piensan como usted los responsables de que los jornaleros/as tengamos este subsidio (el paro alcanza el 40% en el medio rural andaluz).

No sea demagogo ni corto de memoria, ya que la burguesía catalana a la que representa pactó con los terratenientes el que Andalucía fuera una zona subdesarrollada, para proporcionarles materias primas (el 80% del algodón se cultiva en Andalucía y todas las empresas textiles están en Cataluña) y mano de obra barata, así 2.000.000 de andaluces tuvieron que emigrar a su tierra, ¿no tiene nada que decir de esa mano de obra? ¿También reciben el jornal en los bares de Cataluña?

En vez de criticar el P.E.R que suponen 7 euros al día, y que solo lo reciben 220.000 jornaleros/as de los 513.000 existentes ¿Por qué no critica que un 20% de propietarios (terratenientes) se lleven 5.200 millones de euros cada año de de la política agraria comunitaria (P.A.C el P.E.R de los ricos) a cambio de nada solo por tener tierras? Y encima le dan medallas como a la Duquesa de Alba.

Si tanto le molesta el P.E.R de los jornaleros/as, ¿por qué no defiende la reforma agraria (un 2% de propietarios posee el 50% de toda la tierra de Andalucía) que supondría el fin de este subsidio?

Señor Duran y Lleida

A usted le pasa como a ese ministro de agricultura y ganaderías que le regalaron una oveja y se llevo el perro del pastor creyendo que era una de ellas.

DIEGO CAÑAMERO

SG DEL SINDICATO DE OBREROS DEL CAMPO DE ANDALUCIA (SOC)

Ahí esta con dos bien puestos, la derecha catalana es ridícula, tal y como lo es la española.

amigo pelicano creo que este hombre esta confudido y no sabe lo que es el per ,el paro ,la ayuda ni sabe na de na

Cuando el Sr. Duran i Lleida habla de jornaleros subsidiados y que pasan el día en el bar de su pueblo, no hace más que profundizar en una idea vieja que sitúa a Cataluña como la más productiva del país, y a Andalucía como la más folklorica y vaga de esta España nuestra.
Sin embargo estas palabras que responden al ideario nacionalista de derechas y catalanista esconden un desconocimiento terrible del porque existe el PER, ni que es el PER, ni cuál es la realidad del campo andaluz. Solo habla para captar votos de sus bases nacionalistas, desperdigadas y perdidas según las encuestas de cara a las próximas elecciones, donde sitúan a CiU por detrás de PSOE y PP, convirtiéndola en la tercera fuerza política de Cataluña. Por lo tanto se hace en un contexto electoralista para contentar a la burguesía catalana, y poder arrancar unos votos que se le escapan, aunque para ello tenga que vilipendiar a los jornaleros andaluces.-
Este Sr. Duran i Lleida que representa a la burguesía catalana, conservador nacionalista, es como todos los conservadores españoles oportunista, y que casualmente se vuelven socialistas cuando se trata de prestar ayudas, subsidios, subvenciones a la Banca, a las Eléctricas, a sus amiguetes, e incluso a la Iglesia Católica, pero que cuando se trata de ayudar a los más débiles, a aquellos llamados “proletarios”, ya no llega ninguna subvención, porque ya se la han comido ellos. Cuando se trata de los poderosos, el Estado tiene que acudir a su rescate, pero cuando se trata de simples jornaleros andaluces, entonces hay que darle palos hasta que revienten.-
La burguesía conservadora nacionalista fue la responsable junto con los grandes terratenientes andaluces, junto con el dictador Franco, de diseñar un plan económico donde situaba el desarrollo en Cataluña, y el hervidero de mano de obra barata y semillero de materias primas baratas en Andalucía, que como cualquier sistema capitalista necesita de sectores desarrollados y de sectores subdesarrollados para que sirvan de caldo de cultivo capitalista.
Las palabras de este Sr. Duran i Lleida suponen un ideario catalanista, una reivindicación casi obsesiva identitaria, pero que se ha construido sobre base del olvido y de la mentira, sobre lo que se ha sido y de donde se viene, al tiempo que juega con la distorsión del esfuerzo de aquel desarrollo que he apuntado antes.
En el régimen del dictador Franco, y cuando llegó la revolución industrial a España, se industrializó Cataluña y el País Vasco, gracias a terratenientes que invirtieron en estos lugares sus excedentes de renta, pero también y muy significativamente por aquella mano de obra barata, proveniente del subdesarrollado pueblo andaluz y extremeño, quienes dejaron la tierra, el campo en busca de una vida mejor. Se quedaron, se arraigaron a una demografía que no era la suya, y acrecentaron la riqueza de estas comunidades. Olvidar esto, es olvidar el origen de la riqueza de Cataluña, y el Sr. Duran i Lleida desconoce, por activa o por pasiva, que el subsidio agrario intentó introducir tanto en Andalucía como en Extremadura dos fines esenciales: 1) Arraigar a los jornaleros al su campo, a su tierra, a su demografía para que la tierra siga siendo productiva, y no se quede atrás con respecto de otros sectores productivos; y 2) Como quiera que estos jornaleros andaluces son temporeros, coadyuvar a que tengan una ingresos dignos con los que subsistir, no pegar pelotazos como hacen ellos, sino simple y llanamente subsistir.
Estos conservadores, nacionalistas o no, siempre encuentran argumentos para justificar las subvenciones a la Banca, los desajustes tarifarios de las eléctricas para que suban sus importes, o para dar subvenciones a fondo perdido a empresas sin que se les exija contratos laborales de contraprestación, pero cuando se trata de recortar derechos sociales, de desmantelar la sanidad catalana, ahí no hay que dar explicaciones, ahí simplemente hay que llegar con la tijera y cortar por donde sea, y así poder ahorrar para seguir ayudando a los de siempre.

En este punto estoy de acuerdo con el Sr. Chaves cuando califica estas palabras como clasistas, y xenófoba , y lo son porque responden al plan ideológico del nacionalismo catalán (no tengo nada en contra del pueblo catalán) de minimizar a los andaluces, de criticar el PER, el subsidio agrario, las ayudas etc, etc, con el único objetivo de trasladar a las consciencias el estereotipo del agricultor indolente y vago, lo cual supone un insulto a nuestra inteligencia como andaluces.
Habría que preguntarle al Sr. Duran i Lleida que porque es tan duro con el desmentelamiento de la sanidad catalana, que supone un pilar básico en el estado del bienestar, y sin embargo no cierra las Embajadas exteriores de la Generalitat Catalana por medio mundo. ¿No es esto un gasto más superfluo e innecesario que el subsidio de los jornaleros andaluces o que su sanidad pública catalana?
Sencillamente porque en estos momentos, donde la excusa es la crisis, y el fin es la terminación con el estado del bienestar está permitido todo con tal de conseguir ese fin deseado, arremeter contra los servicios públicos básicos de todos los ciudadanos, y contra los jornaleros andaluces, más desprotegidos y humildes que nadie.-
Como en todo totum revolutum, ahora salen los del PP a criticar al Sr. Duran i Lleida, claro por oportunismo electoralista, cuando dirigentes del PP de siempre han estado subidos a estos mensajes contra los andaluces, y nunca he oido al Sr. Arenas rasgarse las vestiduras por lo que decian sus compañeros de partido.
Para muestra un boton: Ana Mato, criticando la cultura y preparación de los niños andaluces; Vidal Quadras en la COPE tildó a Blas Infante de "cre...ino" y "sub...ormal"; la exmilitantes Monserrat Nebreda se mofó del acento andaluz de Magdalena Alvarez, por aquel entonces Ministra de Fomento; y la gran Esperanza Aguirre nos llamó gallinas, cuando dijo que “los socialistas han ido a Andalucía a dar pitas pitas…..”, y muchísimas frases más que ponen de relieve que piensa en realidad el PP sobre Andalucía.-
Javier Arenas nada dijo entonces de todas estas descalificaciones e insultos al pueblo andaluz, pero claro como ahora estamos en precampaña se suma a toda esta gente que ha salido en contra de las descalificaciones del político catalán, de Huesca.

No obstante lo dicho, y como quiera que hay que ser autocritico, es cierto que el subsidio que se cobra está sujeto a cierto fraude, y que es cierto que hay gente que cobra dicho subsidio sin salir de su casa, sin ser jornalero del campo.
Pero no podemos rasgarnos las vestiduras, porque esto supone muy poca gente, y la mayoría de los que lo cobran se ajustan a los requisitos y no tienen más ingresos que éstos.-
Sí es verdad que debería controlarse el fraude, pero como cualquier fraude: el fiscal, el inmobiliario, el bancario, el financiero, etc, etc.
De todas formas el fraude en el subsidio de desempleo es ínfimo, si lo ponemos de relieve con la ingente cantidad de dinero entregado a la Banca para que sanee sus cuentas, y que ahora estamos viendo como se está destinando para premios a los ejecutivos, pensiones a los despedidos, y subsidios a aquellos directivos que han llevado a las Cajas a la bancarrota. ¿Quizás no es esto más vergonzoso e injusto?

Y por supuesto, ni que decir tiene que para que un jornalero pueda hacer fraude, detrás debe haber un empresario que le interesa firmar las jornadas que igualmente hace fraude, por lo que todas las tintas no pueden cargarse siempre sobre los de siempre.-
Para acabar me gustaría traer el Poema Aceituneros, de Miguel Hernández, poeta de la generación del 36, perseguido por Franco hasta su muerte en el 1942, de tuberculosis en la cárcel de Alicante. Y que quizás tanto el Sr. Durán i Lleida como el resto de políticos españoles deberían tener presenta a la hora de hablar de los jornaleros andaluces.
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién,
quién levantó los olivos?
No los levantó la nada,
ni el dinero, ni el señor,
sino la tierra callada,
el trabajo y el sudor.
Unidos al agua pura
y a los planetas unidos,
los tres dieron la hermosura
de los troncos retorcidos.
Levántate, olivo cano,
dijeron al pie del viento.
Y el olivo alzó una mano
poderosa de cimiento.
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién
amamantó los olivos?
Vuestra sangre, vuestra vida,
no la del explotador
que se enriqueció en la herida
generosa del sudor.
No la del terrateniente
que os sepultó en la pobreza,
que os pisoteó la frente,
que os redujo la cabeza.
Árboles que vuestro afán
consagró al centro del día
eran principio de un pan
que sólo el otro comía.
¡Cuántos siglos de aceituna,
los pies y las manos presos,
sol a sol y luna a luna,
pesan sobre vuestros huesos!
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
pregunta mi alma: ¿de quién,
de quién son estos olivos?
Jaén, levántate brava
sobre tus piedras lunares,
no vayas a ser esclava
con todos tus olivares.
Dentro de la claridad
del aceite y sus aromas,
indican tu libertad
la libertad de tus lomas.



PD. Se me olvidaba, coincido plenamente con Diego Cañamero, pienso exactamente lo mismo que él.-