Una familia que vive en Castellar afectado por los niños robados “¿Cuántos hijos tiene? ¿Tres? Ya tiene bastantes hijos”. Así contestó una trabajadora del Hospital La Paz de Madrid a Isabel Chamorro cuando solicitó en su día documentación sobre la muerte de su bebé. Isabel, que en la actualidad vive en Castellar de Santiago, dio a luz el 18 de mayo de 1980. Ella no quería dar a luz en La Paz, quería ir al hospital donde tuvo a sus otros tres hijos, pero allí ingresó con contracciones y los médicos le dijeron que no se veía bien el corazón de su hija, así que si se iba sería bajo su responsabilidad. “A mi marido y a mí nos dio miedo, así que di a luz allí”, relata Isabel. “Al nacer no lloró, pero yo vi cómo una mujer la liaba en un trapo verde y se la llevaba”. A Isabel le contaron después que había nacido muerta. “No me dejaron verla, lo pedí muchas veces, pero me dijeron que me llevaría un mal recuerdo, aunque a mí no me importaba”. Después en el hospital le pidieron que donara el cuerpo al Servicio de Anatomía Patológica para poder realizar a la niña una autopsia y así poder ayudar a otros niños al saber de qué podría haber muerto. “No sabía qué firmaba y mi marido no estaba, pero nunca pude ver el cuerpo”. Dos meses después regresaron al hospital para conocer los resultados de la autopsia, pero siempre han recibido una negativa por respuesta. Desde entonces, cuenta Isabel, no han podido averiguar nada sobre la niña hasta este martes. La Paz le remitió una carta en la que indica que en sus archivos no consta de que haya dado a luz en este centro madrileño y, del mismo modo, tampoco consta la donación del cuerpo, ni la práctica de una autopsia, en el Servicio de Anatomía Patológica de La Paz. “Soy una mujer sana, pero vivo enferma”, lamenta María Isabel, que lleva 32 sufriendo depresiones por el paradero de su hija. Del mismo modo, relata que una posible prueba de que su hija nació viva se encuentra en su Libro de Familia. Allí, con la firma de alguien de La Paz, consta que la familia tenía derecho a una ayuda que por entonces se daba por los nacimientos. |