Chóvar - Castellon

El comedor privado del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, le costó a los valencianos 32.366,24 euros en 2012, según las facturas internas a las que ha tenido acceso ESTRELLA DIGITAL. Además de estos gastos, la presidencia de la Generalitat, con la firma de la entonces directora General de Organización, Esther Pastor, abonó facturas de pedidos telefónicos para cantidades domésticas de alimentos a Mercadona. Los encargos consistían en yogures griegos, Actimel, tacos de mojama, tacos que queso havarti o fruta.

Los pedidos a Mercadona de la oficina del Presidente de la Generalitat eran semanales, según figura en las facturas a las que ha tenido acceso este diario, correspondientes al año pasado, 2013. Los pedidos telefónicos se hacían a nombre de la Presidencia de la Generalitat valenciana, con domicilio en la plaza de Manises. Los pagos se hacían en efectivo y todas ellas cuentan con la aprobación y conforme de Esther Pastor.

Estos pedidos no están incluidos en las compras que hace la Generalitat para el comedor privado de Alberto Fabra. La Generalitat justifica estos gastos alegando que son un ahorro en restaurantes y que sirven para encuentros que requieren discreción por parte del presidente Fabra.

Estos almuerzos discretos y más económicos supusieron 32.366,24 euros al erario público en 2012. Cerca de 29.000 de ellos se hicieron a cargo de la “Caja fija” y otros 13.787,72 euros por medio de un “Documento adok (sic)” que cargó El Corte Inglés.

Algunas de las partidas son llamativas por su volumen. Fabra y sus invitados consumieron “pan y bollería” por valor de 6.309 euros. El gasto se hizo en dos proveedores, José A. Marco García y Vicente Montaner Llavata, reposteros de Valencia. Algo más se gastó en alcohol, 7.151,72 euros. En café también se gastó una cantidad llamativa, 2.701 euros.

La base de las compras para el comedor se hicieron en El Corte Inglés (13.787 euros), aunque en estas partidas se incluyen también las compras de cantidades domésticas hechas en la tienda gourmet de José Palmero (como una ñora, yogures o arreglo de cocido), autorizadas directamente por Esther Pastor.

Esa es más o menos la naturaleza de las compras de supermercado que hace por teléfono alguien de la Presidencia de la Generalitat y que se pagan en efectivo a Mercadona. Jamón cocido para sándwiches, paquetes de cuñas de queso semicurado, actimel, guantes de látex o vinilo, pan de molde, un níspero, una pechuga de pollo, un paquete de fresones, filetes de bonito o dos flanes de huevo al baño maría, son algunas de las compras encargadas al supermercado. El monto mensual es de algo más de 500 euros, pagados con el conforme y firma de Esther Pastor.

En la sede de la Presidencia de la Generalitat se bebe una cantidad respetable de alcohol, de acuerdo a las facturas de suministros que reciben. En una de ellas, en poder de ESTRELLA DIGITAL, se encargan bebidas bastante variadas. Vinos (como impromptu o Santa Rosa Reserva), exquisito moscatel Casta Diva (el mismo que se sirvió en la boda de los príncipes de Asturias), whisky Johnnie Walker etiqueta negra (a casi 24 euros la botella) o Kirsch Iganis.

La Generalitat comentó, tras la publicación en ESTRELLA DIGITAL de las facturas de gastos de la presidencia, el pasado mes de diciembre, unas pesquisas e interrogatorios grabados entre los funcionarios de presidencia a fin de localizar a quien ellos denominaban “el topo”. En enero la Generalitat aseguró que “había cazado al topo”, al que identificaba como un funcionario que había dejado ya su puesto en presidencia.