Arañuel - Castellon

Nada menos que un 40% de los empleados públicos son contratados a dedo, sin pasar ninguna oposición. Estos contratados son generalmente personal laboral, enchufados por el preboste de turno para que tengan un trabajo seguro y bien remunerado en la administración correspondiente; pero un 13% de estos “enchufados” son cargos de “confianza”, altos cargos y consejeros, mas personal sin “responsabilidades específicas”.

--Esto tiene una explicación muy sencilla: Todas las administraciones, las nacionales, las autonómicas y las locales, tienen una legión de funcionarios, digamos que estos son su “ejército de leva”, pero aparte de ellos tienen una seria de “fuerzas especiales” y “comandos de élite”, estos serían los contratados a dedo, sin pasar ninguna oposición (control de calidad) y cuyo único mérito consiste en una lealtad ciega a su benefactor: el preboste y el partido de turno. Estos “hombres de confianza” tienen dos labores fundamentales: disciplinar al resto de funcionarios en el acatamiento a las directrices de los gobernantes y hacer de voceros y portavoces del gobierno de turno o ayuntamiento en la población civil. Personal muy valorado especialmente en los gobiernos regionales y muy concretamente en los “nazi-onalistas”, pues son los encargados de sobrevalorar las políticas de los gobernantes, imprescindibles por ejemplo para la imposición idiomática o el desprestigio popular hacia España y lo español.

--Lógicamente estos “cargos de confianza” están muy bien pagados, hay dos motivos para ello: la precariedad de su contrato, que sólo dura lo que dure el gobierno en funciones y su falta de preparación académica y legitimidad por tanto para ocupar semejante cargo. Esto explica por que muchas administraciones públicas o regionales tienen los abultados déficits que padecen; no solamente derrochan en absurdos demagógicos y populistas, es que además tienen que financiar a estos sujetos puestos a dedo y cuyos honorarios no son baladíes y menos aún sus actuaciones, que suelen caracterizarse por un derroche de medios inconmensurable (todo es poco para fomentar la imagen del cacique de turno). Si tenemos en cuenta que actualmente tenemos más de 3.000.000 de funcionarios (de los que ya sobran la mitad) nos encontramos que en España hay la friolera de 1.200.000 empleados públicos que están contratados a dedo y cuya misión en las administraciones está basada en la “obediencia ciega al líder” y de estos hay nada menos que un 13% que son “cargos de confianza, asesores, secretarios Etc. (la noticia de referencia aún abulta mas estas cifras, por lo que se ve el número de funcionarios sigue aumentando desde las últimas dataciones que yo tengo, ver noticia). Estas cifras excluyen los funcionarios en empresas estatales o autonómicas, tan sólo hace referencia al funcionariado cuya nómina paga directamente la administración, por lo que tendríamos que añadir unos cuantos más que trabajan para empresas pero cuyo patrón es el estatal o regional.

--Sin comentarios, que cada cual saque las conclusiones pertinentes.

--Yo por mi parte lo tengo claro: “Esto sólo lo solucionamos sin ellos”. Hay que reformar la organización territorial del Estado y aquellos que quieran una autonomía propia, que se la paguen ellos de su dinero, no a costa de las cuentas públicas, es decir: a cuenta de todos los españoles. No es tan complicado, de los ingresos vía impuestos de esa región se descuentan los gastos que el Estado les presta y con el resto, que hagan su autonomía, ya verían que rápido bajaba el déficit o su población exigía la anulación de la autonomía, por la cuenta que les tendría a sus bolsillos.

Haces creer que escribes muy bién, pero eres un jodido ignorante.

Para que luego hablen de la profesionalidad de los funcionarios. Estos sinverguenzas que viven a cuenta de los contribuyentes son en su mayoria unos parasitos de la sociedad productiva. Lo mas gracioso es que esto parasitos funcionales se creen el puesto es suyo y pueden hacer lo que quieran que no los van a despedir. Pero no se dan cuenta quien paga los salarios que reciben?

No habria que imitar a Grecia y empezar despedirlos?, ya verias como asi curraban

Si se redujeran los funcionarios a la mitad podrian bajarse los impuestos con lo que la capacidad adquisitiva de los espanholes aumentaria y la economia mejoraria. Desgraciadamente el dinero de los funcionarios viene todo del mismo saco. No es mejor que se quede en el bolsillo del que se lo ha ganado, en vez de que nos lo roben a traves de impuestos para darselo a unos mangantes....